Los expertos lo recomiendan, pero nuevos estudios sugieren que no es garantía de seguridad estar a dos metros de distancia.
Creo que es menos importante la distancia exacta que hay que mantener que evitar el contacto estrecho y prolongado con otras personas en lugares con mucha gente”, declaró Ben Cowling, profesor de Epidemiología de Enfermedades Infecciosas de la Universidad de Hong Kong. “Los que tengan tos o se sientan enfermos deberían quedarse en sus casas tanto como puedan”, agregó.
Un estudio reciente hecho por científicos de la Western University de Canadá respalda a Cowling. El estudio analizó cómo la gente con gripe puede contagiar a otros y reveló que por lo menos el 10% de las gotitas que produce un solo acceso de tos viajaron más de 2 metros.
“Sospechamos que en realidad la forma de toser es la misma independientemente del virus”, declaró Eric Savory, profesor de Mecánica de Fluidos en la Facultad de Ingeniería de la Western University y autor principal del estudio. “Nuestro estudio demostró que el tipo de tos y su potencia se mantienen iguales en personas sanas y enfermas, pero todavía no sabemos si cada virus produce un tipo distinto de gotita”, agregó.
Los investigadores del estudio en Canadá usaron una “cámara de tos”, una caja de plástico sellada, para monitorear la cantidad, el tamaño y la distancia recorrida por las gotitas que libera la tos en personas con gripe e individuos de control sanos. Así, pudieron detectar que el 10% de las gotitas que salen de la boca de una persona al toser recorre 2 metros en 4 o 5 segundos.
“Son gotitas más pequeñas, pueden flotar en el aire mucho más tiempo antes de caer al suelo”, afirmó Savory, que pese a los resultados, cree que por el momento, recomendar 2 metros de distanciamiento social es práctico. “Estar a 2 metros es mejor que estar a uno o a medio, pero si pueden alejarse más todavía, háganlo”, sostuvo.
Una cuestión fundamental para determinar si un individuo es propenso a transmitir el virus pareciera ser el tamaño de las gotas que produce al toser, hablar o incluso respirar. Las de mayor tamaño tienden a caer más rápido al suelo si la persona está quieta y tranquila, mientras que las más pequeñas flotan más tiempo en el aire.
“Los principales riesgos de la transmisión por vía aérea no se producen al estornudar y toser (algo que no hacemos tan seguido), sino de respirar y hablar con los demás a un metro de distancia o menos, compartiendo el mismo aire. Si puedo oler el ajo, el curry o el alcohol que almorzó el otro, casi con total seguridad estoy inhalando cualquier virus que exhale, y viceversa”, explicó Julian Tang, virólogo y profesor asociado ad honorem del Departamento de Ciencias Respiratorias de la Universidad de Leicester, en Reino Unido.
Entonces, con base en todo lo que se sabe actualmente sobre la transmisión y el contagio del coronavirus, ¿alcanza con 2 metros de distancia para reducir mucho el riesgo de contagió
“Es una precaución adecuada para infecciones por contacto estrecho, o sea, con gotas de gran tamaño. Si uno comparte una habitación con una persona infectada y la ventilación es inadecuada (o sea, si puede aumentar la concentración del virus en la habitación), 2 metros de distancia no alcanzan para protegerse”, afirmó la profesora Lidia Morawska, directora del Laboratorio Internacional de Calidad del Aire y Salud de la Queensland University of Technology de Australia, que hace poco publicó un paper en el que sugiere que la transmisión del virus por vía aérea podría ser un riesgo grave, en particular en ambientes cerrados.
Autora: Victoria Forster