Los incendios en California van quedando bajo control de a poco, pero en Australia todavía arden con fuerza. Aunque tu empresa no esté literalmente bajo fuego, este fenómeno deja enseñanzas fundamentales para cualquier líder empresarial a la hora de prepararse para un desastre natural. Veamos tres lecciones para las empresas que tratan de ser responsables y sostenibles.
Preparate bien
Hay que entender cuáles son los riesgos y cómo podrían afectar a la empresa e implementar estrategias de reducción y respuesta a riesgos. Una parte importante de eso pasa por contar con un seguro adecuado, pero también entender los límites de la cobertura.
Además, el seguro no es la única herramienta a disposición. Veamos el ejemplo de California. Primero, hay que tener buenas medidas de protección contra incendios; puede ser reducir el riesgo creando zonas defendibles alrededor de tus instalaciones con concreto o piedra o diseñar instalaciones con materiales de construcción ignífugos. Aunque no tengas los recursos de un lugar como el Centro Getty, hay cosas básicas que harían toda la diferencia. El diseño de exteriores debe incorporar más plantas ignífugas como el aloe que plantas inflamables como las icónicas palmeras californianas. Toda la propiedad debe estar bien mantenida, porque no podemos depender ? como sí puede la Biblioteca Nacional Ronald Reagan? de que venga un rebaño de cabras a despejar el área.
Y hasta ahora hablamos solo de incendios. ¿Tu empresa está expuesta a amenazas parecidas, como tornados, inundaciones o terremotos? ¿Estás preparado para esó
Mostrales a tus empleados que te importa el tema
Los líderes empresariales deben comunicar que estar preparado es prioridad tanto en el trabajo como en casa. Es fundamental que todos conozcan tus planes de respuesta a incidentes y continuidad de los negocios. Explicales bien lo básico con campañas de concientización para toda la empresa y hacelos participar de ejercicios y simulacros. Durante un incidente, prestá atención a los efectos. Si un empleado llega tarde por una evacuación o por complicaciones de salud como síntomas de asma agravados por el humo de un incendio, es importante que el empleador tenga consideración y ayude a los miembros del equipo que fueron afectados.
Además, hay que entender cómo puede impactar un desastre en tus empleados fuera del trabajo. Alentalos a armar planes con preparativos para sus familias y bolsos con lo que puedan llegar a necesitar. ¿Ya discutieron con sus familias que pasaría si los miembros quedaran en lados opuestos de un incendio activó ¿Y vos? ¿Estás dando el ejemplo de comportamiento responsable a tu equipó ¿Hablaste con tu equipo recientemente sobre las posibles amenazas para tu comunidad y si están todos preparados para ponerse a salvó
Invertí en opciones sostenibles
Todos somos cada vez más vulnerables al clima extremo, y por lo general nuestra infraestructura no está equipada para aguantar sus efectos. En un giro extraño, en el caso de los incendios en California, las empresas en el estado ahora también deben estar preparadas para los cortes de luz programados que toma como medida preventiva la Pacific Gas and Electric Co. Las empresas deben encontrar formas de seguir operando durante esos apagones programados, ya sea con esquemas de teletrabajo o usando generadores de respaldo. Toda estrategia de ese tipo exigirá invertir tiempo y recursos. Sin líderes que adopten y defiendan ese tipo de medidas, difícilmente se las considerará prioritarias. Dependerá de los líderes comunicar su valor y asignar recursos para invertir en ellas.
La preparación para desastres te da la oportunidad de demostrar responsabilidad social corporativa y también proteger a tu empresa, tu equipo y tu comunidad. Así todos salen ganando. Por eso, siempre exhorto a los empresarios de cualquier parte del mundo a dedicarles un ratito a sus planes para forjar una cultura de preparación.
Por Chloe Demrovsky