Las compras de los que se asustaron por el coronavirus no se restringen a alimentos, agua y papel higiénico. Algunos también están adquiriendo seguros de vida.
Ante el temor generalizado al contagio y las cuarentenas, muchos estadounidenses están poniendo en orden sus asuntos financieros. También en la Argentina, donde la red de asesores gratuitos Lifer aseguró que se triplicaron las consultas en lo que va de marzo.
Fabric, en Estados Unidos, que ofrece seguros de vida instantáneos por internet y asesoramiento financiero, afirma que la cantidad de solicitudes de seguros de vida que recibe aumentó 50% desde mediados de febrero. La empresa también registró un incremento similar para sus testamentos online.
La gente “está pensando cómo proteger a sus familias”, afirma Adam Erlebacher, CEO y cofundador de Fabric.
LifeQuotes, una agencia de seguros de vida por internet que opera en todo EE.UU., informa un aumento del 29% en la cantidad de solicitudes recibidas desde el 20 de enero de 2020, fecha tomada por muchos como el día en que el mundo se enteró del coronavirus.
Los seguros de vida en la era de los virus
Cualquier póliza tradicional de seguros de vida, como los seguros de vida a término, sirve de red de seguridad financiera.
“Hoy, las pólizas de seguros de vida cubren los fallecimientos por cualquier causa en cualquier momento y lugar, excepto por suicidio en los dos primeros años de vigencia de la póliza”, explica Bob Bland, CEO de LifeQuotes.
Las pólizas por muerte accidental y pérdida de miembros son mucho más limitadas y cubren solo los fallecimientos accidentales, como un accidente de avión o una caída. No cubren las muertes por enfermedad o causas naturales.
Además, las pólizas con cobertura asegurada suelen contemplar un “beneficio gradual por muerte”, es decir, no pagan todo el monto si uno muere hasta dos años después de contratar el seguro. Estas pólizas se venden sin que le consulten la historia médica ni le realicen exámenes al usuario.
Cómo conseguir un seguro de vida rápido
El proceso tradicional de solicitud de seguros de vida puede tardar varias semanas. Normalmente contempla una solicitud extensa, un examen médico hecho por el seguro y después un período en que la empresa recibe los informes de los médicos y verifica los datos del usuario. Así se manejan muchas solicitudes de seguro de vida.
“Mucha gente se empantana en ese proceso y pierde las ganas”, sostiene Erlebacher, de Fabric.
Pero hoy los que contratan seguros de vida cuentan con opciones para solicitarlos rápidamente. Por ejemplo, las pólizas sin examen médico acortan el proceso. Y opciones instantáneas como la que ofrece Fabric usan un algoritmo que procesa una gran variedad de datos personales para decidir rápidamente si acepta o rechaza al cliente y calcular una tarifa. Las pólizas instantáneas suelen ofrecerse a personas jóvenes y sanas. El que no pueda cumplir sus requisitos puede terminar atravesando el proceso más tradicional con un examen médico.
Estas opciones de seguro de vida exprés con la “suscripción acelerada” tardan unos 10 minutos en completarse, un producto perfecto para una economía on-demand.
Los consumidores tienen otros motivos para evitar el examen médico de los seguros de vida aparte de la conveniencia. Bland, de LifeQuotes, observa que hace poco recibieron a un cliente que quería una póliza sin examen porque no quería que fueran a examinarlo a la casa ni ir a una clínica para evitar exponerse al coronavirus.
Consejos para los que salieron a contratar seguros ahora
Aquellos cuya preocupación por el coronavirus los llevó a contratar seguros de vida no necesariamente hacen mal. En muchos casos, esa es la última cosa que piensan en adquirir.
No importa el motivo por el cual uno se haya decidido a contratar un seguro de vida, “lo importante es hacerlo”, afirma Erlebacher. “El tema es que no rejuvenecemos y podríamos sufrir un problema de salud en el futuro. Es importante ocuparse de eso ahora”.
Por más rápido que se haga, es importante elegir bien el tipo de cobertura y póliza.
“Los que hayan salido a contratar seguros de vida por miedo al virus tienen que parar y pensar cómo conseguir una cobertura adecuada durante suficiente tiempo”, afirma Bland, de LifeQuotes. “No hay que pensar en cómo van a morir porque eso no se puede predecir. Un agente experimentado de seguros de vida puede dar consejos útiles a los que no quieran buscarlos por su cuenta”.
