En Italia, hubo tiempo para conspirar contra el Papa. La prensa y dentro del Vaticano especuló con su renuncia. ¿Motivos? De todo tipo. Algunos aseguraron que la salud del Santo Pontífice no era la mejor y le iba a impedir seguir mucho más como cabeza de la Iglesia Católica. Otros hablaron de presiones internas dentro de la cúpula. Por un motivo o por otro, Francisco Bergoglio fue noticia por temas que poco tenían que ver con su agenda como Papa.
Y ahora lo fue de nuevo. Recientemente, habló sobre su renuncia. Pero ahora fue un poco más allá y dio un mensaje para el interior de las paredes herméticas de la Santa Iglesia. "Todavía vivo. Aunque algunos me querían muerto", denunció el pontífice en un encuentro con jesuitas la semana pasada en Eslovaquia.
Así lo revela este martes la revista de la Compañía de Jesús "La Civiltà Cattolica". "Incluso hubo encuentros entre prelados, que pensaban que el Papa estaba más grave de lo que se dijo. Preparaban el cónclave", criticó Jorge Bergoglio, de 84 años.
En tren de recordar, la muerte temprana de un papa también trae a la memoria a Juan Pablo I, Albino Luciani, cuyo mandato duró apenas 33 días. Ese papa italiano fue encontrado muerto en su cama poco antes del amanecer del 29 de septiembre de 1978, 33 días después de su elección. Según las fuentes oficiales, el papa murió de un infarto a los 65 años.
La información vaticana indica que el papa argentino criticó que algunos religiosos "preparaban el cónclave" para elegir a su sucesor. El argentino aludió así a movimientos dentro de la Curia romana. El cónclave es la reunión de cardenales menores de 80 años, llamados "electores", dentro de la Capilla Sixtina para elegir a un Papa en caso de renuncia o muerte.
A Francisco le extrajeron 33 centímetros de intestino para tratar una diverticulitis. Y se recuperó con rapidez en su residencia de Casa Santa Marta. Tanto que se lo vio de buena forma y sonriente durante su reciente gira de cuatro días por Budapest yEslovaquia, según la crónica internacional.
Tras la operación, frente a rumores sobre una posible dimisión, el Papa planteó sin embargo que "nunca" se le "pasó por la cabeza" renunciar.
Amenaza de muerte al Papa
A principios de agosto, los Carabineros de Milán, norte de Italia, interceptaron una carta dirigida al papa Francisco que contenía tres balas. La carta fue interceptada en el centro de clasificación postal de Peschiera Borromeo, en la provincia de Milán, e inmediatamente intervinieron los Carabineros del departamento de San Donato Milanese, que abrieron una investigación bajo la autorización de la fiscal adjunta de Milán, Alessandra Cerreti.
Según la prensa italiana, la carta contienía tres balas de calibre de 9 milímetros y un mensaje relativo al último caso de las operaciones financieras en el Vaticano, sobre el que hace algunos días se abrió un juicio contra varias personas y el cardenal defenestrado por Francisco, Angelo Becciu.
La agencia Adnkronos informó que la carta fue enviada desde Francia y el destinatario estaba escrito con bolígrafo pero apenas legible aunque se podía identificar: “Papa -Ciudad del Vaticano, Piazza S. Pietro en Roma”.
En julio de este año el Vaticano inició el juicio por "malversación y abuso de funciones" contra el cardenal italiano Angelo Becciu, echado por el papa Francisco en 2020, acusado junto a otras nueve personas en la causa que investiga supuestos fraudes con la compra de un edificio en Londres por casi 200 millones de euros entre otras irregularidades que provocaron pérdidas millonarias a los fondos de caridad pontificios.