Standard & Poor's: aún con el default resuelto, la calificación de Argentina es la misma que Congo y Mozambique
La agencia de calificación de riesgo estadounidense, Standard & Poor's Financial Services, sacó rápidamente a la deuda argentina de su categoría de "default selectivo" ni bien se conoció que el gobierno argentino había logrado una exitosa "salida", con más de 99% de adhesión tanto para el canje de deuda local y extranjera. No obstante, su nota continúa siendo baja, ubicándose por debajo de países sin tradición en los mercados de capitales.
"CCC+" fue la calificación que recibió Argentina por parte de esta agencia norteamericana. ¿Qué significa? Que somos un país "vulnerable a un incumplimiento de pago". Al igual que países como Belice, República Demócrata del Congo y Mozambique; con la misma nota. La diferencia es que estos últimos cuentan con poca historia en los mercados de capitales y, además, son naciones pobres.
Por encima nuestro en la tabla y con una calificación de "B" (mejor que nosotros), aparecen otros países altamente riesgosos como Ghana, Egipto, Mongolia, Pakistan, Ruanda, Uganda y Senegal.
Este paso de "default selectivo" a "CCC+" significó una mejora de cinco escalones dentro de la escala de calificación. Según señaló Infobae, de un total de 26, la deuda argentina se ubicaba en el puesto 22 y ahora se encuentra en el puesto 17.
Standar & Poor´s justificó su valoración a la Argentina diciendo que "en caso de condiciones adversas", es muy probable que el país no tenga la "capacidad de cumplir con sus compromisos financieros".
¿Qué debería pasar para convertirnos en un país de "grado de inversión"? Tendríamos que ascender todavía 9 puestos más, lugares que ocupan aquellas naciones consideradas como "confiables". De hecho, los inversores que apuestan a comprar bonos argentinos lo hacen asumiendo un "riesgo sustancial", según marcó la calificadora.
Definición clave para la economía
Standar & Poor's señaló que Argentina debería alcanzar un acuerdo con el FMI para mejorar su confianza con el mundo y también arreglar la deuda que quedó atrasada con el Club de París. Aunque tampoco bastaría con eso, ya que después aparecen otras dificultades como la "elevada inflación, el estancamiento económico, desequilibrios fiscales y la persistente presión sobre los mercados cambiarios".