El presidente de la Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, ha sido acusado de agresión sexual y coacciones por la fiscalía española por besar a la futbolista Jenni Hermoso en los labios sin su consentimiento tras la victoria de la selección en el Mundial femenino.
Según informan varios medios, el cargo puede ser castigado con una multa o de uno a cuatro años de cárcel.
Rubiales ha calificado el beso de consentido, pero Hermoso dice lo contrario, lo que ha llevado a los fiscales a presentar la demanda por agresión sexual. La acusación de coacción se realizó luego de que Hermoso dijera que fue presionada por Rubiales para que le defendiera después de que se produjeran reacciones en su contra, según informó Associated Press.
Antecedentes
El 20 de agosto, mientras jugadoras y aficionados celebraban la primera victoria de España en la Copa Mundial Femenina contra Inglaterra, Rubiales besó a Hermoso en los labios, lo que desencadenó una amplia polémica en torno al consentimiento y una investigación sobre el comportamiento del seleccionador.
Rubiales fue suspendido 90 días por la FIFA, y el seleccionado español de fútbol femenino renunció.
El anuncio del viernes de la fiscalía española sobre posibles cargos se produce luego de la investigación sobre abusos sexuales contra Rubiales. Un tribunal español había dicho previamente que los delitos de Rubiales contra Hermoso eran "graves" pero no "muy graves".
Un juez de la Audiencia Nacional de España decidirá si admite a trámite el caso, lo que pondrá en marcha la investigación formal del tribunal que podría acabar o bien con la desestimación de las denuncias por parte del juez o bien con la celebración de un juicio contra Rubiales.
En medio de la batalla legal, Hermoso (que juega en un equipo de fútbol mexicano), sus ex compañeras de equipo y compañeras campeonas del mundo iniciaron una huelga el jueves.
Así lo decidieron después de que el sindicato no llegara a un acuerdo con la Liga sobre el aumento del salario mínimo, los fondos de ayuda financiera para la universidad y otras peticiones, según el sindicato de fútbol femenino Liga F.
