Ahora que Bernie Sanders se bajó de la pelea, Joe Biden se encamina a transformarse en el candidato de los demócratas para batirse con Donald Trump en las elecciones presidenciales de EE.UU. en noviembre.
Las primeras encuestas le dan la ventaja al exvicepresidente en unos comicios trastocados por el brote de coronavirus, pero Trump ya demostró que no necesita ganar el llamado voto popular para ganar las elecciones.
Biden encabezó todas las encuestas donde se lo comparó con Trump en los últimos 45 días, señala Vox. Una encuesta reciente de CNN con 875 votantes registrados lo muestra superándolo a Trump por 53% a 42%. Los promedios de las encuestas nacionales también le dan la ventaja a Biden. Según un sitio de monitoreo de encuestas para las elecciones nacionales de Real Clear Politics, el exvicepresidente le saca 6,4 puntos a Trump.
Sin embargo, las chances del futuro candidato demócrata se ven menos sólidas al analizar las encuestas en cada estado. En las elecciones de 2016, Trump demostró que puede quedarse en la Casa Blanca sin obtener la mayoría de los votos impulsando la participación de su base en los estados fundamentales para ganar en el Colegio Electoral.
Larry Sabato, director del Center for Politics de la Universidad de Virginia, declaró a Forbes que es posible que Trump se convierta en el primer presidente de la historia del país en triunfar en dos elecciones consecutivas sin ganar el voto popular, y agregó que al ser el mandatario en ejercicio es el favorito: “Por esto del Colegio Electoral, los demócratas podrían acumular muchos votos de más sin importancia”.
En un análisis de las encuestas estaduales realizadas en noviembre de 2019, un año antes de las elecciones, el New York Times concluyó que Biden le sacaba ventaja a Trump en estados clave como Pensilvania, Wisconsin, Florida y Arizona y que estaban empatados en Michigan. Una encuesta realizada recientemente en Florida por la Universidad del Norte de Florida arrojó que Biden derrotaría a Trump en ese estado por 6 puntos. Con todo, Sabato advirtió que hay que tomar con pinzas las encuestas realizadas hasta ahora porque muchas cosas pueden cambiar entre hoy y noviembre; otras encuestas estaduales revelaron un empate, según Vox.
En 2016, Trump ganó porque se impuso con lo justo en Pensilvania, Wisconsin y Michigan, tres estados donde sacó unos 77.000 votos de ventaja en total, pese a perder el voto popular por casi 3 millones de votos. Los analistas de encuestas, entre ellos Sabato, afirman que esos estados también serán cruciales en 2020. Sabato sostiene que otros estados, como Arizona y Carolina del Norte, también podrían decantarse por los demócratas en noviembre.
Sin embargo, la campaña de este año no se parecerá en nada a la de 2016. El brote de coronavirus transformará la forma de hacer campaña de Trump y Biden. Sabato sostuvo que Trump aprovechará la atención que recibirá por dar más conferencias de prensa televisadas durante el brote. “Solía decirse que la campaña se hacía desde el rosedal de la Casa Blanca”, afirmó, en referencia al poder del presidente en ejercicio durante las elecciones, “pero ahora podría decirse que se hará campaña desde las salas de prensa. ¿Qué piensa hacer Joe Biden para llamar la atencióñ”.
Las donaciones a la campaña de Biden aumentaron desde que el ex vicepresidente triunfó en las primarias de Carolina del Sur a fines de febrero: el mes pasado, Biden recaudó más de US$ 30 millones por internet. Pero la campaña de Trump fue mucho más eficaz: su equipo y el Comité Nacional Republicano sumaron más de US$ 247 millones a sus arcas para financiar la reelección de Trump, según el Center for Responsive Politics, una asociación no partidaria. La campaña de Biden estaría comenzando a unir fuerzas con el Comité Nacional Demócrata para recaudar fondos en conjunto, según CNBC.
Forbes está siguiendo a los multimillonarios que donaron dinero a Joe Biden y también los eventos de recaudación de fondos de la campaña de Trump.
El miércoles, Biden obtuvo la adhesión oficial de muchas personas a horas de que Sanders se bajara de la candidatura para 2020. Uno de las principales figuras que proclamó su apoyo a Biden es el senador demócrata por Colorado y excandidato presidencial Michael Bennet.
Autor: Jack Brewster