El Dr. Matthew Binnicker, experto en el diagnóstico de enfermedades infecciosas, explica por qué una persona podría dar positivo de COVID-19 semanas después de recuperarse.
Hasta el momento, la mayoría de los pacientes con COVID-19 se diagnosticó con un test de laboratorio llamado PCR, que detecta el material genético del virus (el ARN) en muestras clínicas (por ej., hisopados nasales). El PCR es un método de laboratorio muy sensible, o sea, puede detectar muestras muy diminutas de ARN viral, y se usa hace casi dos décadas para diagnosticar diversas infecciones, entre ellas la gripe y la faringitis. Pese a ser veloz y sensible por diseño, el PCR tiene ciertas limitaciones que hay que tener en cuenta a la hora de interpretar los resultados.
Una de esas limitaciones es que no puede determinar si un paciente es contagioso o no, porque está diseñado para detectar el ARN del virus. Este suele aparecer (y ser detectado por el PCR) cuando un virus está causando una infección activa, pero también después que un virus se descompuso (es decir, dejó de ser infeccioso) y lanzó su genoma a las células huésped o los fluidos corporales. Por experiencia con otras enfermedades infecciosas, sabemos que los PCR pueden dar positivo días o semanas después de que el paciente se recuperó y ya no es contagioso.
A medida que aumentan los testeos de COVID-19, vemos que algunos pacientes dan positivo semanas después de su diagnóstico inicial. Un estudio reciente mostró que el 16% de los pacientes con COVID-19 siguió dando positivo de ARN de SARS-CoV-2 hasta 24 días después del fin de los síntomas y el alta del hospital.
Cuando un individuo da positivo de COVID-19, lo normal es prescribir entre 10 y 14 días de cuarentena. De hecho, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) recomiendan a los que den positivo de COVID-19 hacer cuarentena hasta recibir dos PCR negativos en muestras obtenidas con por lo menos 24 horas de distancia.
Es un método conservador, pero estuvo justificado en las primeras etapas de la pandemia de COVID-19 debido a la falta de datos sobre el período de contagio del SARS-CoV-2 y las fuertes repercusiones de permitir que un individuo infectado vuelva a trabajar o interactúe con otras personas antes de que se pueda asegurar que ya no es contagioso. Sin embargo, el PCR no se suele usar como “prueba de cura” para otras enfermedades infecciosas porque puede seguir dando positivo después de que un paciente eliminó la infección.
¿Qué significa que un paciente dé positivo después de recuperarse de la COVID-19?
Se están haciendo estudios para dar una respuesta definitiva a esta pregunta, pero datos recientes sugieren que el período de contagio del SARS-CoV-2 podría no guardar correlación con los PCR positivos. En otras palabras, es posible que un individuo ya no pueda contagiar a otros y dé positivo de PCR.
La semana pasada, los CDC de Corea del Sur publicaron datos importantes para responder estas preguntas. El estudio rastreó aproximadamente 800 contactos de pacientes de COVID-19 después de que estos se recuperaran, dieran negativo y volvieran a dar positivo en PCR.
Aunque los resultados sugieren que los pacientes de COVID-19 podrían dejar de ser contagiosos semanas o meses después del fin de los síntomas, el período específico durante el cual un individuo puede transmitir el virus a los demás no está claro. Se necesitan más estudios para definir mejor el período de infectividad viral, así podemos prevenir la propagación de la COVID-19 sin sacarles a los pacientes recuperados la oportunidad de terminar la cuarentena apenas puedan hacerlo.
Autor: Matthew Binnicker y Coronavirus Frontlines
Leé la nota completa (en inglés) acá.