La familia presidencial de Argentina violó en 2020 la cuarentena, una de las más estrictas del mundo, en plena pandemia por el coronavirus. Y ahora esa celebración tiene consecuencias para el presidente.
Esto quedó claro cuando unas fotos de una reunión realizada el 14 de julio de 2020 en la residencia presidencial fueron publicadas esta semana por los medios locales.
Eran del cumpleaños de Fabiola Yáñez, la esposa del presidente, Alberto Fernández, quien pasa por un momento político sensible: la economía sigue de capa caída, hay indicios de fracturas dentro del oficialismo y en noviembre se realizarán unas elecciones legislativas que pueden comprometer las mayorías del peronismo que él representa.
"Definitivamente me doy cuenta que no debió haberse hecho", admitió Fernández este viernes durante un evento en el que el oficialismo quiso mostrarse unificado.
El escándalo, principal noticia en los medios durante la semana, parece haberle dado un impulso a la oposición, que anunció la intención de hacerle un juicio político al presidente por el manejo de la pandemia, que ha dejado 108.500 muertos en un país que tuvo unas de las restricciones de movilidad más largas y rígidas del mundo.
Aunque la iniciativa del juicio político tiene pocas chances de prosperar, debido a que el peronismo cuenta con mayorías en ambas cámaras del Congreso, el gesto tiene un valor simbólico que puede marcar las elecciones intermedias de noviembre, de las cuales dependerá el resto del mandato de Fernández.
Las fotos fueron reveladas por dos periodistas de La Nación +, el canal de televisión de uno de los diarios más importante del país.
Luego llegaron a todos los medios, entre ellos Reverso, un conglomerado de medios gestionado por Chequeado, portal experto en verificación, que hizo un sesudo análisis de las fotos para concluir que no solo eran verdaderas, sino que era del cumpleaños de la mujer del presidente en plena Quinta de Olivos.
También circuló una noticia de junio de 2020 de la agencia de noticias estatal, Télam, en la que se reportaba que la mujer del presidente había celebrado su cumpleaños por Zoom.
En las fotos se ven al menos una decena de personas que no usan mascarillas, no mantienen el distanciamiento social en un salón con las ventadas cerradas.
Y estos son precisamente algunas de las ordenes pautadas por el decreto presidencial, firmado por el mismo Fernández, que marcaba las pautas de una cuarentena que, para muchos, fue muy estricta y que tuvo un fuerte impacto en la población argentina, que en su mayoría vive de la economía informal.
"La situación desenmascara la hipocresía del presidente", se lee en un comunicado de varios partidos opositores que piden el juicio político.
"Para entonces, regía una estricta cuarentena que prohibía reuniones sociales y limitaba la circulación de los esenciales. Él, quien ordena cumplir lo que él no cumple ni hace cumplir a su círculo estrecho en el lugar donde vive, muestra una desigualdad ante la ley que agravia a un país republicano".
La oposición ha aprovechado las fotos para atacar a un presidente que ya acumula varios escándalos, entre ellos un caso de vacunación exclusiva para miembros del Ministerio de Salud de Argentina.
Además, la inflación sigue disparada (está en 50% anual, una de las más altas del mundo), la mitad de la población está en la pobreza y el dólar paralelo, que marca importantes sectores de la economía, se elevó a 180 pesos por dólar esta semana.
Una mujer sostiene un cartel reclamando poder circular y trabajar, durante una protesta en contra de la cuarentena en Buenos Aires, el 30 de mayo.