Las contras del proyecto para prohibir "viviendas vacías" en CABA: "Menos gente pondrá su propiedad en alquiler"
“En cualquier tipo de contrato entre privados donde interviene el Estado tratando de entrometerse en lo que debería ser una cuestión de oferta y demanda entre las partes, termina siendo perjudicial", asegura Gabriel Brodsky, CEO de Predial.

El proyecto presentado por Inquilinos Agrupados en la Legislatura porteña propone pasar al alquiler las viviendas que permanezcan vacías por más de 90 días. La medida sigue provocando el rechazo del sector inmobiliario y cada vez se suman más voces en contra de esta iniciativa, a la que asimilan con la Ley de Alquileres y también la consideran un fiasco total.

“En cualquier tipo de contrato entre privados donde interviene el Estado tratando de entrometerse en lo que debería ser una cuestión de oferta y demanda entre las partes, termina siendo perjudicial para una o ambas y general para el mercado en general”, señaló Gabriel Brodsky, CEO de la firma Predial, quien está convencido de que medida empeoraría aún más la situación de los inquilinos.

La iniciativa de Inquilinos Agrupados, que ingresó a la Legislatura a fines de septiembre, propone que las propiedades que permanezcan vacías por más de 90 días consecutivos ingresen "de forma obligatoria" a un sistema de alquiler protegido, en una iniciativa que apunta a dar una solución a la falta de inmuebles disponibles para la renta.

También define a la vivienda ociosa como "aquella que registre durante el lapso de tres meses consumos de servicios eléctricos por debajo de los 50 kilovatios hora por mes", así como las que "no se hayan registrado su contrato de alquiler".

Ante este panorama, Brodsky se preguntó: ¿Qué va a pasar con las propiedades que están publicadas a la venta, en un mercado sobre ofertado, y que en muchos casos pueden pasar un año sin que se vendan?.

Si bien la propuesta apunta a que haya más oferta, para el experto en bienes raíces generará un efecto contrario: “No creo que bajen los precios de los alquileres sino al revés. Esto alentará a que menos gente ponga su propiedad en alquiler por la inseguridad jurídica que se genera. Los contratos de alquiler tienen que servirles tanto a los dueños como a los inquilinos y las intromisiones del Estado son para peor”.

Propiedades.

La iniciativa, además, establece que el Instituto de la Vivienda de la Ciudad sea el encargado de fijar un precio de renta equivalente al 1% del valor fiscal de la propiedad.

En ese sentido, Brodsky vaticinó un futuro de incertidumbre en el mercado locativo si finalmente se convierte en ley. “No habrá un techo para los valores de los alquileres porque hay una demanda muy grande. Va a ser desesperante para los inquilinos cuando tengan que renovar el contrato o mudarse y los precios sean impagables”, resaltó.

Para el CEO de Predial habría que hacer todo lo contrario a lo que propone Inquilinos Agrupados: “Hay que hacer foco en los dueños e incentivarlos con elementos que los aliente a colocar sus propiedades en el mercado locativo y no espantarlos. Cuanta más competencia haya el precio se va a ir acomodando solo, por lo que hay que trabajar en generar oferta”

Edificios- Departamentos

En un contexto incierto, donde hasta el momento las medidas aplicadas no dieron resultados para resolver el déficit habitacional, Brodsky propuso otorgar beneficios fiscales híper agresivos a quienes compren propiedades para luego ponerlas en alquiler y así resolver el problema del déficit de viviendas.

 Además, destacó la cantidad de empleos que genera la industria inmobiliaria y todos sus derivados; por lo que el costo fiscal se vería compensado con mayor actividad y la resolución de un gran problema de décadas conocido como déficit habitacional.

“Si le quitaran todos los impuestos nacionales, provinciales y municipales, a quienes compran para luego alquilar y obtener una renta, la situación empezaría a cambiar. Pero el Estado tiene que darles a los dueños un marco jurídico serio que les aclare que no se les puedan quitar, independientemente del gobierno de turno. Sino estaríamos en la misma situación que pasó con el blanqueo de Macri, en el cual prometieron que no iba a existir más Bienes Personales y no solo no quitaron ese impuesto sino que luego subieron las alícuotas”, concluyó Brodsky