El Congreso de los Estados Unidos confirmó a Joe Biden como el ganador de la elección presidencial de 2020 en una sesión conjunta que se extendió hasta la madrugada luego de que manifestantes pro-Trump invadieran el Capitolio ayer en un intento violento por dar vuelta el resultado de la elección.
Los legisladores fueron evacuados del edificio luego de que el grupo ingresara al Capitolio, vandalizara las oficinas y ocupara la cámara del Senado. Finalmente, los miembros de ambas cámaras volvieron a juntarse para la sesión conjunta luego de que la policía asegurara el edificio y votaron la victoria de Biden a la madrugada, logrando rechazar los intentos por rechazar los triunfos de Biden en Pennsylvania y Arizona.
Varios senadores republicanos que inicialmente habían planeado objetar los votos electorales de Biden en estados clave finalmente decidieron no hacerlo.
Después de meses de no reconocer ni conceder frente a Biden, Donald Trump emitió un comunicado vía Twitter a través de la cuenta de Dan Scavino, su jefe de Gabinete (su cuenta fue bloqueada por la red social de forma temporal por incumplir la política de la plataforma de no inducir a la violencia). Dijo que "habrá una transición ordenada el 20 de enero", aunque insistió que está "totalmente" en desacuerdo con el resultado de la elección y que su salida "representa el final del mejor primer mandato en la historia presidencial".
Trump estuvo semanas presionando a los republicanos en el Congreso a que objetaran los resultados como último intento por revertir su derrota electoral. Alabó a quienes se comprometieron a levantar las objeciones y atacó públicamente a los republicanos escépticos. Igualmente, el resultado nunca estuvo en duda en serio: las mayorías de ambas cámaras del Congreso apoyaron la victoria de Biden, incluyendo la mayoría del liderazgo republicano en el Senado.