El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de EE.UU. (USCIS, por sus siglas en inglés) sigue rechazando buena parte de las solicitudes de visas de trabajo que realizan las empresas del país, incluyendo visas para extranjeros cualificados y patrocinados por muchas de las mejores compañías del mundo, según un nuevo análisis. La tendencia general durante el Gobierno de Trump es complicarles la contratación de científicos e ingenieros extranjeros a las empresas.
“Al analizar los datos durante el segundo trimestre del año fiscal de 2020, se observa que se sigue rechazando una proporción de las visas solicitadas por las empresas mucho más elevada que en los años anteriores a la llegada de Donald Trump a la presidencia y la promulgación de nuevas políticas”, reza un nuevo análisis de la National Foundation for American Policy. El informe, basado en datos del USCIS, se concentró en las solicitudes de visa H-1B para empleos “iniciales”, que se usan sobre todo para nuevos puestos de trabajo, que por lo general se contarían dentro del cupo anual de visas H-1B.
Según el análisis, “en el primer semestre del año fiscal de 2020, los 25 empleadores de profesionales portadores de H-1B con más visas aprobadas para empleos iniciales en el año fiscal anterior sufrieron tasas de rechazo más elevadas que en el año fiscal de 2015”, y 20 de esos empleadores “registraron tasas de rechazo por lo menos 10 puntos porcentuales más altas en el primer semestre de 2020 que en todo 2015, incluyendo a grandes empresas de tecnología como Cisco y Google”.
La tasa general de rechazo de solicitudes en el primer trimestre fiscal de 2020 fue de 16,6%, según un documento publicado por el USCIS. Sin embargo, en el caso de las solicitudes para empleos iniciales, esa tasa asciende a 30%.
Recientemente, el USCIS publicó datos para el tercer trimestre del año fiscal de 2020 que mostraban una tasa de rechazo general de H-1B de solo 4,1%, pero no se conoce la tasa específica para los empleos iniciales porque el organismo combinó todos los casos.
Ni siquiera por mérito
La tasa de rechazo de H-1B para empleos iniciales pasó de 6% en el año fiscal de 2015, antes de que asumiera Trump, a 29% en el primer semestre de 2020. Como el Gobierno de Trump está bloqueando la llegada hasta de los extranjeros más cualificados? los que solicitan las visas O-1 y H-1B ?, no queda claro que si sus funcionarios seguirán afirmando que el Gobierno promueve la inmigración “por mérito”.
Este año habrá dos posibles puntos de inflexión en el tema. Primero, en la Justicia y las elecciones presidenciales de noviembre se definirá si se lleva a cabo la prohibición de entrada al país a extranjeros con visas H-1B, L-1 y otras visas temporarias, proclamada por Trump en junio de 2020. Después, es posible que el Gobierno intente promulgar normas para restringir las H-1B antes de fin de año. En otras palabras, la dureza de las políticas inmigratorias de EE.UU. para las empresas será definida por factores que estas no controlan.
Autor: Stuart Anderson
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