El expresidente Donald Trump y sus hijos, Ivanka Trump y Donald Trump Jr., tendrán que dar testimonio en la investigación de la fiscal general de Nueva York, Letitia James, sobre los tratos financieros de la Organización Trump. Así lo dictaminó un juez estatal el jueves por la tarde, negando el intento de los Trump de bloquear las citaciones argumentando “una investigación criminal separada” y sus afirmaciones de que James “tiene una agenda política".
El juez del estado de Nueva York, Arthur Engoron, rechazó una moción para bloquear las citaciones para Donald Trump y sus hijos, que se emitieron en diciembre, o para emitir una suspensión que les impediría testificar hasta que se complete la investigación criminal separada de James.
Los abogados de Trump habían argumentado que el expresidente no debería tener que testificar porque la oficina de James también está realizando una investigación criminal por separado sobre la Organización Trump, y los fiscales podrían usar su testimonio en la investigación penal.
“Esa sería una forma de evadir las leyes del estado de Nueva York que exigen que los fiscales otorguen inmunidad a los Trump si testifican ante un gran jurado en la investigación penal”, argumentaron los abogados de Trump durante una audiencia el jueves.
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Engoron dictaminó que el argumento legal de los abogados de Trump “no da en el blanco por completo” y “pasa por alto por completo el hecho” de que los Trump simplemente no pueden responder ninguna pregunta que pueda incriminarlos, como lo dictamina la Quinta Enmienda de ese país.
La abogada de Trump, Alina Habba, también criticó a James, alegando que tiene una “agenda política” y prejuicios contra Trump durante la audiencia, lo que, según ella, contaminó el caso legal de la oficina.
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El juez tampoco fue persuadido por esas afirmaciones y expresó que los abogados de Trump no probaron ninguna evidencia de que él fuera discriminado injustamente y que James tenía el derecho de la Primera Enmienda de hacer comentarios sobre el expresidente, señalando el hecho de que “un fiscal le disgusta alguien no impide un enjuiciamiento”.
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Trump deberá testificar
Engoron ordenó a Trump y a sus hijos que testificaran dentro de los 21 días posteriores a su orden, aunque el abogado de Trump, Ron Fischetti, le dijo al juez el jueves que el equipo legal planeaba apelar la orden.
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“Para [la oficina de James] no haber investigado a los demandados originales, y no haber citado [a Trump y sus hijos], habría sido un flagrante incumplimiento del deber”, escribió Engoron en su fallo. “De hecho, el ímpetu de la investigación no fue una animadversión personal sino el testimonio jurado ante el Congreso del exsocio de Trump, Michael Cohen, de que los encuestados estaban 'maquillando los libros'”.
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“Este es un caso único. Este es el expresidente de los Estados Unidos”, dijo Fischetti a Engoron el jueves mientras argumentaba que Trump no debería ser depuesto, diciendo que si la declaración de Trump se hiciera pública en un documento judicial, “estaría en la primera página de todos los periódicos del mundo”.
Antecedentes sobre la investigación contra Trump
La oficina de James inició una investigación civil sobre los tratos financieros de la Organización Trump en marzo de 2019, y anunció en enero que su oficina hasta ahora ha encontrado "evidencia significativa" de que la compañía infló falsamente el valor de muchos de sus activos para obtener ganancias económicas.
Su investigación también se ha ampliado para incluir una investigación criminal sobre las finanzas de la empresa, que se está llevando a cabo junto con la oficina del fiscal de distrito de Manhattan, anunció en mayo. Trump se ha opuesto firmemente a la investigación y presentó una contrademanda en respuesta tratando de detenerla.
Engeron falló previamente a favor de James en otras peleas por el testimonio de testigos en la investigación, ordenando a Eric Trump que testifique en septiembre de 2020. La investigación civil resultaría en que James presentara una demanda contra la Organización Trump si encuentra que hay suficiente evidencia para hacerlo, lo que podría resultar en que un tribunal imponga sanciones a la empresa que van desde daños monetarios hasta la revocación del certificado comercial de la Organización Trump.
James reveló en una presentación judicial el lunes que la firma de contabilidad de Trump, Mazars USA, lo dejó como cliente e informó a la Organización Trump que los estados financieros preparados para el expresidente entre 2011 y 2020 "ya no deberían ser confiables", en parte dado el activos inflados potenciales que James ha descubierto. Los abogados de Trump afirmaron en un comunicado que la carta “hace que las investigaciones del fiscal y del fiscal sean discutibles”, un argumento que Engoron dijo el jueves que era “absurdo” y que “recuerda a Lewis Carroll, George Orwell ('La guerra es paz, libertad es esclavitud, la ignorancia es fuerza'); y 'hechos alternativos'”.
*Publicada en Forbes US
