Entiendo que la situación es difícil, que la gente esté cansada, pero no queremos tirar por la borda lo que hicimos hasta ahora e hipotecar el futuro, aseguró este viernes 12 Ginés González García, el ministro de Salud que asumió como tal en el mismo mes que se inició el brote de COVID-19 en China y lleva más de medio mandato intentando lidiar, sin libreto y aprendiendo de nuestros propios errores, con la mayor crisis sanitaria global de nuestra época.
A continuación, diez definiciones de González García durante una conferencia de prensa vía Zoom con miembros de la Red Argentina de Periodismo Científico (RADPC), de la que participó FORBES:
Relación público-privado. Tendría que haber insistido más, en los niveles locales, en la organización e interrelación de lo público y lo privado. En Capital Federal, por ejemplo, el ministro de Salud (Fernán Quirós) habla siempre de las camas disponibles en terapia intensiva del sector público, pero no hay ningún otro lugar que tenga una oferta privada tan generosa y potente, además de contar con los hospitales de la universidad y los sindicales.
Medidas. Hemos tratado de seguirle el ritmo a la pandemia sin especulación política. Hoy estamos en una situación de que tenemos que tomar medidas: si hay que cambiar, vamos a cambiar; y si tenemos que pisar el freno, lo vamos a hacer.
AMBA. La circulación del virus en el área metropolitana de Buenos Aires (AMBA) tiene una potencialidad de crecimiento brutal. Y es un factor de expansión a nuestros propios habitantes en el resto del país. Ayer pasé con el auto por el Once y vi una ciudad casi normal. Me parece que tenemos que ser cuidadosos: lo que no hagamos hoy, se paga en 14 días. El problema por su magnitud es el AMBA. Si se nos va de las manos, la cuestión tiene otra complejidad.
Semanas críticas. Yo soy un optimista, pero creo que lo peor está por venir. Tenemos más posibilidad de casos. no estoy haciendo ninguna adivinanza. El miedo fundamental es que las enfermedades de transmisión respiratoria tienen su pico en la última semana de junio y primera de julio, entonces, esas son las semanas en el calendario epidemiológico más críticas.
Indicadores. Yo no suelo ser esclavo de los indicadores. La decisión de cambiar de fase de la cuarentena en el AMBA siempre va a tomar en cuenta varios factores, en especial, cómo evoluciona la cantidad de casos, la cantidad de positivos cuando se hacen los testeos, cómo se disemina por los distintos sitios de la ciudad o cómo está el primer anillo del Conurbano.
La vuelta del fútbol. Tengo mucha pasión por el fútbol, voy a la cancha. pero yo no creo que pueda empezar ni en esta región ni en el resto del país, porque el 75-80% de los jugadores viven en el AMBA. ¿Va a viajar a las provincias un plantel completo, con la posibilidad de que sea vehículo de transmisión del virus? No veo que sea una posibilidad en el corto plazo. También me han hablado de hacer los entrenamientos en alguna provincia? yo entiendo que el fútbol es un gran negocio y una gran pasión, incluyéndome, pero no creo que sea razonable y menos con estos picos que estamos teniendo. Sería totalmente contradictorio.
Runners. Pasamos de tener un aislamiento a una estampida como lo que se vio el lunes con los runners. Yo pensé que eso era porque era el primer día, pero el segundo día fue bastante parecido. Necesitamos mantener la conciencia colectiva que vinimos manteniendo perfectamente y nos dio resultado. No podemos creer que estamos al final del partido cuando, en realidad, estamos recién en el final del primer tiempo.
Vacunas. A mí me preocupa, en el caso de la vacuna, que esté cuanto antes. Pero también el precio: si esto va a entrar en el juego habitual de los precios y las patentes, va a tener mucha dificultad de accesibilidad. Y también me preocupa la disponibilidad, la enorme necesidad de dosis que habría. Si no hay una coalición productiva entre las grandes empresas, va a ser muy difícil.
Tratamientos experimentales. El ensayo clínico Solidarity (de la OMS) anda más o menos. La OMS no nos mandó todavía un antiviral para una de las cuatro ramas. Pero no hay ninguna cosa contundente, ni siquiera una anécdota. En cambio, parecería que el tratamiento con sueros de personas que hayan padecido la enfermedad reduce las complicaciones. Le tengo fe.
Extensión de la cuarentena. Yo entiendo que la mayoría de la gente no acepte la extensión de la cuarentena, pero es por el bien de todos. Nadie valora lo que no ve. Cuando uno hace prevención como la que hicimos, y lo hace muy bien, realmente lo peor no sucede, o todavía no sucedió. Entonces se tiende a debilitar la idea de la prevención y del cuidado. Pero hay que volver a esta idea de generar la conciencia colectiva para obtener buenos resultados. Tenemos que pensar que esto va a pasar y lo vamos a hacer más rápido si cumplimos con responsabilidad.