Ya sobre el final de la primera jornada del 57º Coloquio de IDEA, desarrollado hoy en Costa Salguero, María Laura Alzúa, subdirectora del Centro de Estudios Distributivos, Laborales y Sociales (CEDLAS), Facultad de Ciencias Económicas, UNLP; Marcos Bulgheroni, CEO de Pan American Energy (PAE) Group; Sara García, Secretaria general nacional de AMET (Asociación del magisterio de enseñanza técnica); Daniel Herrero, Vicepresidente 1° de IDEA y Presidente de Toyota Argentina; e Ignacio Ibarzábal, director de Argentinos por la educación, participaron del panel, moderado por Daniel Hadad, Educación: tragedia u oportunidad.
Durante la exposición, Herrero contó su visión sobre la educación y el impacto de los jóvenes argentinos en la inserción en el mundo laboral. Compartió que Toyota está en un proceso de crecimiento y necesitaba 200 chicos con colegio secundario. "Lamentablemente no los conseguíamos en la zona de influencia, aunque luego los tomamos en otros lugares".
"La revolución tecnológica va a dar muchos más puestos de trabajo, no nos va a quitar, pero tenemos que estar capacitados para eso que viene", sostuvo el ejecutivo de Toyota.
Además, contó que antes de la pandemia hicieron una experiencia piloto de pago de salario para que terminaran la escuela secundaria. "97 de los 100 se recibieron y hay 4 que estudian en la universidad, mientras que el resto consiguió trabajo formal", comentó Herrero.ç
"La educación de un chico dura tres mandatos presidenciales. Debe ser prioridad de todos para lograr esta Argentina sostenible que queremos", completó.
Alzúa dio su mirada acerca de la coyuntura post pandemia y sostuvo que "las familias que más perjudicadas se vieron en cantidad de horas trabajadas eran mujeres con chicos entre 0 y 5 años que no tuvieron accesos a jardines de infantes".
Al referirse a las consecuencias de la educación en tiempos de pandemia, Bulgheroni dijo: "La virtualidad fue efectiva hasta cierto punto pero tuvo sus costos en contenidos y emocionales". El ejecutivo sostuvo que es importante recuperar contenidos perdidos, pero también "está la parte emocional y la vinculación con el ambiente educativo. Hay que hacer un plan para recuperar también a los que salieron del sistema. No podemos darnos el lujo de no hacerlo".
En tanto, García, al frente de un sindicato que representa a docentes de escuelas técnicas, dijo: "Los números de la educación que nos duelen a todos están vinculados a los números de la pobreza". Y agregó: "Quienes tenemos una historia de trabajo en escuelas técnicas hemos visto caer en la desesperanza a muchos desde que se planteó que los servicios eran más importantes que las industrias. Me gustaría reorganizar los contenidos y priorizar lo básico. Para eso, necesitamos docentes capacitados y actualizados y que las familias que se involucraron sigan vinculadas y que ese esfuerzo mancomunado de la sociedad sirva para recuperar la escuela".
Finalmente, Ibarzábal sostuvo que hace tiempo que se habla de una “tragedia educativa” y compartió algunos números que preocupan: "Tres de cada diez adultos terminan el secundario en el decil de ingresos más bajos, mientras que en el más alto son nueve de cada diez. Entre los primeros, sólo dos de cada diez alcanzan resultados satisfactorios en matemáticas. Este desafío que ya era difícil vino a ser profundizado por la pandemia. Lo que se demostró es que aún hoy la escuela es irremplazable".
En la Argentina, como pasó en otros países, no estaban dadas de ninguna manera las condiciones para la educación a distancia y, según Ibarzábal, hay hay dos datos que lo certifican: "Solo el 20% de los estudiantes de primaria tiene conectividad y el 90% de los estudiantes se comunicaron con la escuela a través de WhatsApp".