Desde octubre del año pasado, el sector automotriz y el Gobierno nacional comenzaron a pensar un rumbo que los encuentre caminando hacia el mismo lugar. En la reunión con ADEFA de aquel entonces, los directivos de la entidad hablaban de inversiones por US$ 5.000 millones para este año. Del otro lado, Fernández prometía darle al sector automotriz un lugar fundamental en la recuperación económica.
Sin embargo, de las palabras a los hechos hay un largo trecho. Por eso, desde la industria automovilística, con los oídos ya endulzados, exigían acciones concretas sobre la mesa. Y eso es lo que intentó hacer Fernández en el Museo del Bicentenario este mediodía.
El Presidente firmó el decreto del régimen de exención de retenciones a las exportaciones incrementales de la industria automotriz y anunció el envío del proyecto de Ley de Promoción Inversiones para ese sector y su cadena de valor.
El decreto implica un nuevo esquema de retenciones para 2021, en el que las unidades que se exporten por encima del número de vehículos vendidos al exterior el año pasado no pagarán derechos de exportación. Por su parte, el Proyecto de Ley de Promoción Inversiones en la Industria Automotriz y su Cadena de Valor busca generar puestos de trabajo de calidad, impulsar el desarrollo de nuevos modelos, fomentar el perfil exportador del sector y una mayor integración de autopartes locales. Éste fue consensuado entre el Gobierno, cámaras empresariales y los sindicatos del sector.
El sector suma 130.000 empleos privados formales, explica el 7,2% del producto bruto industrial del país y exporta a casi 50 países por casi US$ 4.500 millones.
Las inversiones de las empresas productoras de automóviles, utilitarios, comerciales livianos, camiones y chasis, motores, cajas de transmisión, ejes, autopartes y piezas, o de quienes realicen determinados procesos para la producción de los bienes descriptos anteriormente, tendrán beneficios impositivos.
Del acto formó parte el presidente de Fiat Chrysler Argentina, Cristiano Rattazzi, y los secretarios generales de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), Antonio Caló, y del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (Smata), Ricardo Pignanelli.
El presidente de ADEFA, Daniel Herrero, destacó la medida y resaltó la importancia que tiene para el desarrollo del sector automotor, que se caracteriza por su alto perfil exportador. El diálogo y el consenso son el camino para la generación de medidas que alienten el desarrollo de nuestro sector y permitan al mismo tiempo promover mayores exportaciones, generar mayor producción y un ingreso incremental de divisas para el país, sostuvo el presidente de la entidad.
El alcance de las medidas
Desde el Gobierno estiman que las normas consensuadas con empresas privadas y sindicatos de la industria automotriz permitirán que haya unos US$ 5.000 millones de nuevas inversiones. Hoy en día, el sector suma 130.000 empleos privados formales, explica el 7,2% del producto bruto industrial del país y exporta a casi 50 países por casi US$ 4.500 millones.
El proyecto de ley para promover inversiones en la industria automotriz y su cadena de valor prevé, entre otros beneficios, la eliminación de los derechos de exportación para quienes, previa autorización de la autoridad de aplicación, cumplan con un monto de inversión mínima.
Según la iniciativa, las inversiones en bienes de capital nuevos, incluyendo obras de infraestructura destinadas a la actividad, podrán gozar de "saldo libre de los créditos generados por el IVA para aplicar contra impuestos nacionales, amortización acelerada en Ganancias para los bienes muebles en tres cuotas anuales e iguales, y derecho de exportación cero".
Adicionalmente, se debe cumplir con un monto de inversión mínima en función del bien o el proceso que se trate. A su vez, el bien o el proceso objeto del proyecto aprobado debe mantener un contenido nacional mínimo determinado durante los cinco años posteriores a la fecha de inicio del proyecto.
La coordinación entre los diferentes eslabones de la cadena de valor, el Estado Nacional, trabajadores y científicos, estará a cargo del Instituto de la Movilidad, que aportará ideas e iniciativas en el marco de las políticas públicas dirigidas a la industria automotriz y el sector autopartista.
La conducción y administración del Instituto estará a cargo de un directorio integrado por un presidente y ocho vocales: dos por la Autoridad de Aplicación, uno por el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), tres por asociaciones empresarias y dos por representaciones sindicales (Smata y la UOM).
Movilidad sustentable
En este contexto, desde el Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación aprovecharon para comunicar un entendimiento con la empresa china Jiankang Automobile, con la que suscribió un memorando para promover la fabricación de baterías de litio y vehículos de transporte urbano de pasajeros de movilidad sustentable.
El acuerdo establece un conjunto de condiciones económicas, financieras y técnicas garantizadas por la Ley de Movilidad Sustentable para la instalación de plantas de producción de chasis de autobuses y baterías de litio. "El objetivo es reemplazar, de manera planificada y gradual, la flota de colectivos con motorización convencional que se encuentran actualmente en circulación en las ciudades de nuestro país", informó la cartera productiva en un comunicado.
Por su parte, la firma china se comprometió a realizar las inversiones necesarias para la radicación de las plantas con la suficiente escala para abastecer el mercado argentino y exportar al resto de la región. La proyección estima que el inicio de las operaciones será a principios de 2023.
El memorando es parte de la iniciativa del gobierno nacional, expresada por el Presidente de la Nación en la apertura de sesiones extraordinarias el 1° de marzo pasado, de desarrollar la producción y utilización de energías renovables como parte de la agenda productiva para el crecimiento sustentable.