Conocé a los creadores de la app de telemedicina que cuadruplicó sus consultas en la cuarentena
Cecilia Valleboni Forbes Staff
Cecilia Valleboni Forbes Staff
Doc24, nacida en Rosario en 2016, es una de las protagonistas del boom mundial de la telemedicina. Cómo responden a la demanda y por qué la medicina a distancia va a quedarse aún cuando ya haya pasado el temblor.
Cuando todo parece negro, hay emprendimientos que pueden capitalizar la crisis del coronavirus. Hace cinco años, Roberto Villavicencio y Pablo Utrera decidieron incursionar en en telemedicina, un rubro que hasta la aparición del COVID-19 y las reglas de distanciamiento social era apenas incipiente. “Hoy hay un interés de muchísimas empresas, aún de segmentos que no necesariamente están directamente vinculados a la prestación de servicios de salud. El mercado no volverá a ser el mismo que antes de la pandemia”, confía Utrera, cofundador de Doc24.
Tras formar el equipo emprendedor interdisciplinario ?al que también se sumaron como cofundadores Carlos Osella, Martín Degrati, Javier Echaniz y Anibal Krivoy? lanzaron la app en septiembre de 2016. Así nació ?dicen los propios emprendedores? la primera empresa argentina totalmente enfocada en telemedicina. “El comienzo fue muy difícil. De alguna manera pagamos el costo de ser los que abrimos camino: había mucho desconocimiento en las empresas de salud acerca de la utilidad de la telemedicina, y por supuesto muchos reparos por la falta de un marco regulatorio claro para la práctica médica a distancia”, cuenta. Y añade: “Todos tenían la certeza de que más temprano que tarde la telemedicina sería una realidad, pero no tenían claro cómo aprovecharla y algunos tenían miedo de ser pioneros”. Ese momento parece haber llegado con la pandemia. “Todos nuestros clientes multiplicaron los volúmenes de consultas, y aún al día de hoy vemos que esa tendencia está creciendo”, cuenta el emprendedor. Así, la app canaliza unas 1.500 consultas diarias, más de cuatro veces el volumen habitual. Eso los obligó a, por ejemplo, escalar la cantidad de profesionales simultáneos, particularmente en las horas pico. Hoy, tiene unos 700 profesionales en el país, que ofrecen servicios de más de 30 especialidades. Además, está en plena expansión en Brasil, donde ya cuenta con un staff de 50 médicos.
“Tenemos un mercado bastante más desarrollado que está comenzando a dejar su fase de introducción y metiéndose de lleno en una de crecimiento. Está potenciado por el contexto de crisis sanitaria en la que estamos inmersos”, cuenta y destaca el rol del Dr. Gabriel Barbagallo, que lideró la creación de ACTRA (Asociación Civil de Telemedicina de la República Argentina). El aislamiento social y obligatorio expuso las virtudes del sistema, pero también los pendientes que tiene el marco regulatorio: “No se nos ha ofrecido un marco claro en el cual desarrollarnos, y eso implica que hoy estemos atravesando una coyuntura en la cual desde el mismo Estado se avaló la utilización de cualquier herramienta de tecnología para la práctica médica a distancia y eso es muy peligroso”.
El modelo de negocios de Doc24 se basa en ser partner de las empresas del mundo de la salud que deseen desarrollar programas de telemedicina. Además, cuenta con su propio staff médico, lo cual le permite brindar un servicio de videoconsultas de demanda espontánea disponible las 24 horas en las especialidades de Clínica Médica y Pediatría, así como videoconsultas programadas con medicos especialistas. Su primer cliente fue Medicina Esencial, la empresa del Grupo Oroño en Rosario, y luego Assist Card. Hoy, en su portfolio de clientes se encuentran OSDE, Medifé, Medicus, SanCor Salud, Aca Salud, Federada Salud, también con Obras Sociales Sindicales como la de Petroleros (OSPe), la del turf (OSPAT) y la de los docentes (OSDOP), entre otras. También, compañías de seguros generales como La Caja, San Cristóbal e Iúnigo; o prestadores de salud, como el Hospital Británico de Buenos Aires, y el Sanatorio de Niños de Rosario.
Para Utrera, el cambio más importante que esta coyuntura epidemiológica introduce es el de romper la barrera cultural. No sólo de los pacientes, sino también de los médicos. “Se sumaron muchos en las últimas semanas”, cuenta. De hecho, con varios de sus clientes trabaja en una dinámica de teletriage, que permite hacer una clasificación de los casos de pacientes con síntomas compatibles con COVID-19, detectar casos sospechosos, y hasta despachar al personal del laboratorio para la toma de muestra en domicilio.