El aislamiento obligatorio y las medidas de prevención de algunas empresas ya están provocando cambios en la dinámica de trabajo: cómo hacer que el trabajo desde casa siga siendo eficaz.
El pánico que se ha generado a costa del aumento de contagios por coronavirus ha llevado al gobierno a suspender por treinta días todos los vuelos internacionales provenientes de zonas afectadas por la pandemia
En el ámbito privado, muchas empresas han optado por cancelar los viajes de sus empleados a determinadas zonas geográficas y recurrir a la alternativa del teletrabajo, una práctica que puede ser muy efectiva si se cumplen estos 10 consejos que proponen desde BiCG:
Los objetivos, claros.Se tienen que establecer objetivos medibles y sus correspondientes indicadores, por lo que la figura del responsable es indispensable para comunicar y trasladar con claridad al empleado sus compromisos, ya sea trabajando en la oficina o en cualquier otro lugar. Realizar una lista de tareas es una buena medida en estos casos.
La tecnología como aliada.Se deben utilizar todas las herramientas disponibles para comunicarse, compartir documentos o realizar las tareas de la mejor manera posible.
Dinámicas de equipo.Establecer protocolos ?una reunión matinal, una llamada antes de la hora de la comida, entre otros ejemplos? para trabajar con el resto de compañeros en remoto, de manera que se puedan replicar las dinámicas de trabajo cotidianas que tendríamos en la oficina.
Huir del aislamiento.Comunicarse de forma constante con los compañeros de trabajo y responsables es fundamental para la motivación: existen múltiples herramientas en línea que nos permiten la comunicación fluida y conocer el estado de nuestros compañeros en cada momento (disponible, reunido, ausenté).
El teléfono como herramienta de eficiencia.Esta vía de comunicación es muchas veces más efectiva que el correo o la mensajería instantánea y evita muchos malos entendidos de la comunicación por escrito.
Hola y adiós.Dar los buenos días a los compañeros y despedirse de ellos es una buena práctica para no perder la rutina y, además, saber cuando las otras personas están disponibles.
Establecer una rutina de jornada.Es aconsejable que cada persona mantenga su rutina de trabajo ideal, siempre que sea posible. Se pueden establecer las llamadas ventanas de coincidencia, periodos de varias horas en las que se acuerda que todo el equipo estará accesible.
Luz y orden.Es clave disponer de suficiente luz ?a ser posible natural?, mantener un orden mínimo, evitar fuentes de ruido que alteren la concentración o exposiciones al sol excesivas.
Vigilar la ergonomía y los descansos.Utilizar posturas correctas, tomar un descanso cada cierto tiempo y ventilar el espacio de vez en cuando son acciones recomendables.
Evitar las distracciones domésticas.El trabajador debe tener claro que cuando se encuentra en horario laboral, debe evitar otras actividades que afecten o rompan su ritmo de trabajo, como las labores domésticas.