Cómo es la "estrategia de dividendos del 10%" para invertir en Wall Street
Pasaron casi dos años desde que las acciones tocaron por última vez máximos históricos, y el S&P 500 aún se encuentra un 11% por debajo de su nivel máximo.
Pasaron casi dos años desde que las acciones tocaron por última vez máximos históricos, y el S&P 500 aún se encuentra un 11% por debajo de su nivel máximo.
La FED mantendrá las tasas en el máximo de 22 años, de 5,25% a 5,5%, según anuncio este miércoles por la tarde tras la conclusión de la reunión de dos días de su Comité Federal de Mercados Abiertos.
Este miércoles se reunirá el Directorio de la FED para analizar si realiza o no una nueva suba en las tasas de interés. Los mercados se mantuvieron relativamente sin cambios durante la semana y la volatilidad continúa rondando sus bajos niveles recientes.
La inflación subyacente, que excluye alimentos y energía, se moderó a su nivel más bajo en casi dos años.
Tanto los datos económicos entrantes, como el informe de inflación IPC de este mes , como las próximas divulgaciones de la FED ayudarán a señalar la probabilidad de un movimiento de las tasas para noviembre.
Este y otros datos recientes hacen ahora improbable un aumento de las tasas de interés en septiembre, a menos que los próximos datos de inflación del IPC, que se conocerán en dos semanas, resulten muy inesperados.
Un analista de bitcoin y criptomonedas "muy atento" advirtió que la Fed está a punto de desencadenar el "mayor tirón de alfombras de la historia" y podría causar un caos en los precios de bitcoins a finales de este año.
El costo del dinero se incrementó a los niveles más altos en los últimos 22 años. Se espera una salida de capitales desde países emergentes frente a los rendimientos de los títulos estadounidenses. El aislamiento de la Argentina de los mercados internacionales blinda la posibilidad de un impacto disruptivo.
La tasa de fondos federales se ubicó entre 5,25% y 5,5%, siguiendo la campaña de incrementos más agresivas en las últimas cuatro décadas. Jerome Powell no dejó claro cuál será la estrategia de la entidad en los próximos meses.
El alza anual del Índice de Precios al Consumidor en junio fue del 3% y quedó a sólo un punto del objetivo de la Reserva Federal. La baja de los combustibles fue lo que más ayudo a lograr este resultado.
Su titular Jerome Powell, deslizó que están dispuestos a seguir con una política monetaria más restrictiva para sofocar las presiones inflacionarias. Mientras tanto, crece el temor por el impacto que tendrá esa dinámica en la economía de los Estados Unidos.
Los responsables de la política monetaria de la Fed coinciden en que es "bastante probable" que EE.UU. entre en recesión este año, aunque no sería "ni profunda ni prolongada".
Según la encuesta de Instant MLIV Pulse, realizada a 223 participantes, alrededor del 70% considera que la campaña de aumentos de tasas de la Fed, que comenzó en marzo de 2022 debido al crecimiento de la inflación durante la pandemia, aún no ha concluido.
Los mercados observan con nerviosismo lo que los analistas de JPMorgan estiman que podría el monto de la emisión en nuevas letras del Tesoro.
Los analistas de Bank of America dirigidos por Savita Subramanian elevaron el valor de la firma para el S&P de 4.000 a 4.300, en una nota a los clientes. Ese sería el nivel más alto del S&P desde agosto, aunque es sólo un 2% superior al nivel de 4.200 que alcanzó el índice el lunes.
Los estrategas de Goldman Sachs y Barclays explicaron que el mercado podría estar descontando un recorte de tasas de interés más violento del real.
El precio del barril de petróleo se desplomó hoy en Nueva York en más del 5%, alcanzando valores de comienzos de año, debido a los temores de una recesión en la economía mundial, en vísperas de que la Reserva Federal (FED) anunciará una nueva suba de su tasa de interés.
El precio del barril de petróleo abrió mayo en baja luego de que los datos de la producción en China no conformaran las expectativas y antes de la reunión de la Reserva Federal (FED) en la que se resolvería otra suba de tasas de interés.
En un informe de 114 páginas señala el pánico alimentado por las redes sociales como uno de los principales factores de la segunda mayor quiebra bancaria de la historia de EE.UU.