Verónica Marcelo, Gerente General de Natura, asumió su posición en plena pandemia, allá por abril del 2020. Desde aquel momento hasta ahora aprendió cómo liderar en una situación atípica. Sin embargo, la ejecutiva se apoyó en los años que estuvo en la empresa, los cuales la ayudaron a desarrollar esos valores necesarios para un momento particular.
La clave fue cuidar a las personas que trabajan con nosotros y hacer que la economía siguiera circulando. El foco y desafío fue pensar en ellos, remarcó.
El modelo de negocio de Natura incluye a varios emprendedores. Es un negocio basado en las relaciones. Si bien la pandemia no modificó el core del negocio de Natura, la transformación digital jugó un rol fundamental y modificó esas relaciones.
Usamos la digitalización a nuestro favor y pasamos del catálogo físico a uno digital e interactivo. Eso implicó una serie de desafíos en la capacitación, explicó la ejecutiva.
Lo importante, destacó la gerente en Natura, es que en un año y medio de metodología, mantuvimos la economía circulando, aunque reconoció que a algunas personas les costó más que otras. Pero seguimos y seguiremos trabajando.
A la hora de hablar de diversidad e inclusión, reconoció que es un tema crítico, y que como empresa tenemos la responsabilidad de impulsar esta agenda. De hecho, señaló, el consumidor está pidiendo esto; las empresas que no sean diversas van a ser menos rentables.
No sólo se trata de esgrimir la bandera filosófica de la inclusión, sino hacer que ésta impacte en el negocio. Recientemente, Natura relanzó una línea de maquillaje sin género. Tal vez hace años nos hubiera dado temor. Hoy, en cambio, salimos a viva voz. Es una reconstrucción que hicimos.
Sin embargo, la líder es consciente que aún queda camino por recorrer. Y desde la compañía trabajan para que las mujeres sigan creciendo y lleguen a posiciones de decisión. Para eso tienen tres ejes: La capacitación, dar visibilidad de los logros de las mujeres y, por último, crear una red de contención, explicó la ejecutiva.
En ese camino de construcción, además de trabajar puertas adentro y sobre el impacto de la diversidad en el negocio, es fundamental entender al nuevo consumidor. Así lo remarcó Verónica Marcelo, quien habló de un consumidor más empoderado y consciente.
Hoy el cliente exige saber qué hay detrás de cada producto: cómo fue elaborado, de qué materias primas y demás. Es un consumidor al que hay que escuchar mucho más para poder evolucionar.