El término insurtech hace referencia a la unión de las palabras insurance (seguros) y technology (tecnología), término que define al sector que engloba a las compañías de seguros tradicionales, las empresas tecnológicas y a las startups disruptivas. Cada una de éstas estuvo representada en el último Forbes Insurance Summit de mayo, donde se habló de la digitalización del sector, alianzas entre empresas y de cómo se trabaja en conjunto como industria, entre varios temas.
Participan del panel llamado Tecnología y colaboración insurtech Martín Ferrari, CEO de 123Seguro; Gabriel Mysler, Director de Innovation@Reach; Marcelo Girardi, Gerente de Agronegocios Corporativos y Cuentas Públicas de Sancor Seguros; y Julián Bersano, CEO y Founder de Klimber.
Al comienzo de la charla se repasa la situación en la que se encuentra el ecosistema, el vínculo y la colaboración entre actores del sistema de aseguradores. El primero en hablar fue Bersano, quien define que el ecosistema es muy colaborativo en Latinoamérica, a diferencia del mercado de los Estados Unidos.
Empiezo a ver colaboración entre insurtech o fintech, que tiene una lógica particular: no todos hacemos todos. Sabemos que, si colaboramos, ganamos todos. Yo creo que todos nos vamos a beneficiar. Estamos viendo negocios a los que no podemos acceder porque no tenemos cómo llegar, y vemos colaboración en ese sentido, declara el especialista.
Va a haber cada vez más tecnología en todos los procesos. Van a seguir existiendo los clientes que necesitarán asesores de seguros. Va a haber lugar para todos, pero mucho más para la tecnología, refiere.
En coincidencia, Girardi asegura que la revolución se ve cada vez más en la industria de los asegurados. Lo que nos ayudó la tecnología a achicar la asimetría entre el productor y la aseguradora, nos permitió hacer seguros más personalizados. Nos falta muchísimo para entender qué herramientas tentemos disponibles para llegar mejor al productor, opina.
Y dice que hay que llevar el concepto de la importancia de asumir algunos riesgos y de transferir otros. La definición es que hoy es un ambiente colaborativo entre las insurtech y fintech, coincide con su predecesor en la palabra.
A su turno, Mysler dice que hoy el seguro atraviesa una oportunidad que le da la tecnología y es la de acercarse a la gente. El seguro y el ahorro es dejar de consumir ahora para estar bien después. La tecnología te permite romper con algunos paradigmas de nuestros pensamientos, ya que no tenemos incorporado el sentido del futuro, continúa.
Luego, reflexiona acerca de cómo acercar el seguro a la gente, sin echarle la culpa de que no tiene cultura aseguradora. Es lo que podemos pensar de la colaboración insurtech. La tecnología está hoy ayudando a romper uno de los problemas más grandes del seguro, que es un conflicto de intereses: La compañía gana plata cuando no te paga explica.
En este sentido, dice que también ayuda a fijar cierto estándar. Como el derecho de cobrar más caro. Si tengo ese derecho, puedo agregar valor. La tecnología acerca el seguro a la gente. No viene con el miramiento del 'no me quieren pagar', opina.
Por último, en este tema, Ferrari coincide con sus tres compañeros de panel y contó su experiencia personal. Durante ocho meses tuvimos 100% de rechazo en las aseguradoras cuando contamos lo que íbamos a hacer. Pero ahora ya no hay miedo de que Internet sea para gente joven. Hoy trabajamos con 54 aseguradoras. Hay un nivel de maduración que comparten desafíos y necesidades. Vemos un proceso de entendimiento de que todos, solos, no lo pueden hacerlo, define.
Y dijo que van a existir muchos más casos para el consumidor de experiencias que en otros años no existían. Hay entendimiento y compresión entre lo que hace cada uno, estima sobre los actores de la industria.
En cuanto a los desafíos próximos de la industria, Ferrari dice que el mayor de ellos representa una gran oportunidad, que es trabajar en conjunto. Ese gran cambio tiene que ver con la evolución cultural, no la tecnología. No hay rechazo a lo desconocido hoy. Disruptivo, valor. Todos tenemos un valor diferencial trabajando en conjunto. Nuestro desafío es innovar, romper, traer y exigir. Lo peor sería una mala regulación, concluye.
Respecto de esto último, Bersano nombra a la regulación como uno de los grandes problemas de la industria. También tiene que ver con la intervención del gobierno, que es muy intervencionista. Retrasa mucho los negocios y hace que la gente se baje de los seguros. Los gobiernos y reguladores tienen que repensar esto. Cuando la sociedad está asegurada es más resiliente, especialmente en esta región que necesita desarrollarse más. Es el principal obstáculo con el que nos encontramos, estima el ejecutivo de Klimber.
En tanto, Mysler dice que la innovación siempre va primero y más rápido que la regulación. Obviamente la regulación es necesaria, pero me queda claro que cuando la sociedad pide cambios, el regulador lo genera, opina y dice que uno de los valores más importantes que tienen las compañías es algo que antes no se medía: Qué tan fácil es trabajar conmigo.
Eso se volvió algo importantísimo. Empezamos, gracias a la tecnología, nuevas herramientas de acercar los productos a la gente. El seguro se volvió un bien deseado y no un mal necesario. Necesitamos que el seguro esté presente en cada cosa. Hoy es mucho más cercano, amigable y la tecnología nos ayuda, concluye.