Por qué las alianzas público-privadas serán clave en la postpandemia
Lorena Guarino Forbes Staff
Lorena Guarino Forbes Staff
“La pandemia generó desafíos y cambios increíbles en la industria farmacéutica”, comenzó diciendo Cristian Von Schulz-Hausmann, Managing Director Grupo de Merck en Argentina y General Manager del negocio de Biopharma para el Cono Sur, en el tercer panel del Forbes HealthCare Summit, contando que debieron cambiar el foco de sus productos para brindar soluciones para el Coronavirus: "Hoy en día proveemos insumos, tecnología y asesoramientos en distintos proyectos vinculados con el virus".
Por fuera de Merck, y haciendo una observación más global, Von Schulz-Hausmann aseguró que el hecho tomar la producción de este tipo de medicamentos para el Coronavirus “generó un gran estrés en el sistema de salud”. Por otro lado, destacó que hubo un cambio importante en la “comunicación con la comunidad médica”, explicando que esa responsabilidad de dar soporte e información de los nuevos tratamientos/ medicamentos, lo tuvieron que hacer pero de manera virtual.
Por su parte, Juan Diddi, Gerente General para Bristol Myers Squibb Argentina, resaltó el trabajo interno que hubo dentro de la compañía durante estos meses, subrayando “su resiliencia, compromiso y el propósito en común que los fortaleció”. También indicó que, con el Coronavirus, quedó aún más de manifiesto el valor de la innovación, no solo para la salud sino también para la economía y la política; al mismo tiempo que ponderó la “articulación interdisciplinaria” que hubo para llevar adelante distintas iniciativas.
Por otro lado, dijo que si bien la visión y la estrategia de la compañía no cambió, “lo que sí se modificó es cómo lo logramos”. Y continuó: “Se generaron nuevas formas de conectar, energizar y colaborar con los diferentes jugadores y protagonistas de la Salud, y en ese sentido la transformación digital nos cruzó a todos”.
Lorice Scalise, Gerente General de Roche Pharma Argentina, en una mirada simular a Diddi, destacó el “sentimiento del colectivo” que trajo el Coronavirus, “de tener un propósito en común donde cada uno pone la extra milla en el trabajo por un bien común. Se despertó un sentimiento de empatía y a partir de allí comenzaron a gestarse alianzas”.
En ese sentido, añadió: “Algo que salió a la luz es la necesidad de que los diferentes actores de la sociedad construyan alianzas y muevan barreras. Yo veo que no hay otra forma que no sea a través de alianzas de los diferentes actores, para pasar a otro estadio del sistema de salud. El virus dejó muy claro en distintos países las ineficiencias de infraestructura, de educación, del sistema de salud. Es momento de pensar qué tipo de alianzas podemos hacer”.
Haciendo foco en Roche puntualmente, Scalise contó que, como el resto de las compañías de la industria, de la noche a la mañana se encontraron con el desafío del Covid pero aún teniendo que asistir a otros pacientes, que necesitaban otros tratamientos. Por lo tanto, señaló que la “agilidad, la flexibilidad en los procesos y la conexión con los procesos fueron claves para proveer las soluciones a los pacientes”.
Por su parte, en la misma sintonía, Von Schulz-Hausmann explicó que fue y es muy importante en este contexto “la colaboración en la innovación”, deslizando que “nadie se salva solo” y en este tipo de cuestiones “la coordinación entre los diferentes actores, público-privado, fue el gran motor de todas estas novedades que se fueron dando a conocer sobre el virus”.
"La pandemia aceleró el conocimiento del público en general de cómo se hace un producto farmacéutico”, afirmó Von Schulz-Hausmann, expresando que es importante que la gente entienda cómo se genera una innovación.
Según él, este acercamiento generó un cambio en la relación entre médico- paciente y a su vez trajo un mayor compromiso por parte de la sociedad con las nuevas innovaciones: “Anteriormente, cuando uno empezaba un estudio de investigación era muy complejo tener voluntarios para probar el producto. Hoy en día encontrás gente más predispuesta a colaborar”.
En Merck están trabajando en distintos productos oncológicos, esperando traer soluciones específicas en distintos tipos de tumores. Por otro lado, avanzan en un nuevo fármaco para tratar la esclerosis múltiple, que estiman que puede llegar a estar en el mercado en los próximos dos años y medio.
Bristol también puso énfasis en medicamentos para oncología y hematología. Por su parte, Roche, lo hará en la “medicina personalizada”, con el fin de “tener un tratamiento preciso según cada paciente. Para Scalise, esto “tiene que ver con el respeto al individuo" y es algo que le "resulta fascinante”.
Redacción: Nicolás Della Vecchia.