Pierpaolo Barbieri: "Tenemos la oportunidad de hacer servicios financieros que funcionen como la soja digital"
Alex Milberg Director
Alex Milberg Director
El anuncio del acuerdo entre Ualá y Wilobank, de Corporación América, llamó la atención a comienzos de abril por el secretismo con el que se manejó toda la negociación. “Veníamos trabajando por mucho tiempo y todavía no puedo hablar porque estamos en un proceso regulatorio con el Banco Central, pero creemos que es el principio de una alianza estratégica que va más allá de Wilobank y para la que soñamos cosas grandes en América latina”, detalla Pierpaolo Barbieri, CEO y fundador de la fintech, durante el Forbes Money Summit.
A su vez, el emprendedor explica qué le llamó la atención del banco digital creado por el holding de Eduardo Eurnekián. “Su base tecnológica es muy interesante para nosotros y también el equipo que formaron. Con Eduardo podemos ser de generaciones distintas, pero nunca conocí personas con más energía que él. Va a pasar a ser el primer inversor local que tiene Ualá”.
Hace casi cuatro años que su compañía debutó en el mercado local y a la fecha ya cuenta con más de 2,7 millones de clientes en el país. Por otro lado, con la profundización que la pandemia y la cuarentena generaron en la digitalización de servicios, amplió su plantilla a más de 800 personas y planea llegar a 1.300 antes de fin de año. “Es una solución que no es solo de argentinos para argentinos, sino que es de latinoamericanos para latinoamericanos”, apunta. En 2020 desembarcó en México donde emitió 100.000 tarjetas y podría triplicar esa cifra en el corto plazo.
“Lo que esperábamos que pasara en tres o cuatros años, pasó en uno. Y lo bueno es que entonces el Estado va a gastar menos en dinero en efectivo que es caro, ineficiente y un problema para la inflación”, indica Barbieri sobre lo ocurrido el año pasado.
Para el joven empresario, las bondades de que aparezcan más players y haya competencia dentro del sector es algo que repite cada vez que tiene la oportunidad. “El capitalismo no es que cada uno tenga su ranchito protegido, sino que haya competencia abierta y gane el mejor. Es algo que filosóficamente tenemos que abrazar y cuesta, pero te sube la vara”, asegura. Y agrega: “En la Argentina hay buenas regulaciones para paliar esa tensión con los jugadores tradicionales, como el CVU. En cambio, en los Estados Unidos no existe un método interoperable de envío de dinero en vivo por el lobby de los bancos”.
Según su visión, el futuro de la economía está más del lado de la exportación de servicios que de los granos. “Como modelo de país no son las mismas discusiones que venimos teniendo desde 1880. El agro es competitivo pero tenemos la oportunidad de hacer servicios financieros que funcionen como la soja digital”, analiza.
Por último, Barbieri enfatiza que la recuperación de la macroeconomía argentina irá de la mano con la velocidad en la que se despliegue el plan de vacunación. “Apostábamos que este iba a ser el primer año de crecimiento de tres, pero es un crecimiento de rebote por los precios de commodities que nos benefician. El problema es la vacunación, que te resuelve el problema sanitario y económico”.