No solo llegar: la importancia de acompañar la permanencia de las mujeres
En la sexta edición del Forbes Summit Mujeres Power, tres ejecutivas dedicadas a tecnología coincidieron en que es clave el acceso femenino a puestos en el sector, pero del mismo modo se requiere apoyar el desarrollo de sus carreras.

Andrea Folgueiras, CTIO de Telefónica Hispanoamérica; Andrea Bautista, VP de Ingeniería en Yuno y Paula Coto, Directora Ejecutiva de Chicas en Tecnología remarcaron la importancia de hacer un seguimiento de la evolución profesional de las mujeres que acceden a puestos vinculados con el segmento IT. 

“Hay que trabajar dentro de las compañías porque allí también hay erosión: se necesita un acompañamiento muy fuerte para que las mujeres de IT no abandonen su desarrollo”, sostuvo Folgueiras, quien explicó que la falta de paridad arranca desde los perfiles que ofrece el mercado. “En el segmento digital, solo un 30% de la oferta laboral es femenina”, señaló, convencida de que “hay un proceso de erosión en toda la cadena”.

En ese sentido, remarcó que según datos del CIPPEC, “el 60% de los estudiantes superiores son mujeres, pero en las carreras de ciencia y tecnología solo el 30%”, mientras que en el ámbito laboral del segmento su presencia es de solo el 24%.

Una vez que ingresan, “a lo largo de la carrera muchas van abandonando y desapareciendo. La erosión ocurre dentro de las compañías. Hay que hacer un acompañamiento muy fuerte. En Telefónica tenemos el programa Futura, que se focaliza en liderazgo femenino. Arrancamos por mandos medios, y ahora lo estamos expandiendo a todo el colectivo femenino, con coaching, talleres, trabajo uno a uno”, puntualizó.

En la empresa se procura que las búsquedas para cubrir puestos sean “justas para todo el mundo, y por eso se evalúa que la terna final de candidatos tenga balance de género, pero a la vez no se incluya a ninguna mujer solo por serlo. Para eso hay un Comité de transparencia”.

Pero lo más llamativo, dijo, es que “todo el tiempo pasa que debemos contactar a mujeres” que podrían presentarse para cubrir una vacante, y no lo hacen. “Es mucho más probable -marcó- que se presenten hombres que no cumplen con todos los requisitos, a que lo haga una mujer que sí está perfectamente capacitada”.

Andrea Folgueiras, CTIO de Telefónica Hispanoamérica.

No obstante, Folgueiras detalló que muchas cosas han cambiado. Recordó sus épocas de estudiante de Ingeniería Electrónica en la UBA. “Me han dicho cualquier cosa, venimos de las cavernas. Te dabas cuenta de que estaba mal, pero te callabas porque tenías que recibirte. Hemos evolucionado”, celebró.

La confianza como eje

“No podemos delegar tanta responsabilidad en la escuela y las empresas si desde casa no se da un cambio de mentalidad: a las niñas hay que darles confianza desde pequeñas de que podrán enfrentar cualquier cosa”, aportó Bautista, quien valoró el apoyo de sus padres. “Siempre me dijeron que si mi hermano podía hacer tal cosa, yo también”, agradeció.

Andrea Bautista, VP de Ingeniería en Yuno.

La búsqueda de oportunidades está centrada en la confianza, y para eso se precisan cambios en toda la sociedad. “De lo contrario cuando una sale de la universidad a la vida real siente que los demás la van a destrozar. No te explican cómo enfrentarte al mundo. Yo me apoyaba mucho en mis amigos cuando estudié, éramos una tribu, había protección de todos como equipo. Ahora hay más empatía y no se considera que haya carreras de hombres o de mujeres. Tenemos la misma capacidad mental, el mismo intelecto”, subrayó.

“Hay desafíos de permanencia. El 39% de las ingenieras dice en algún momento que su carrera ya no es para ellas. Se debe acompañar a esos perfiles en sus procesos de crecimiento”, advirtió por su parte Coto, quien destacó el creciente rol del sector IT: representa el 10% del PBI y el 20% de las exportaciones argentinas. “Crece un 30% más en promedio que el resto de los sectores, abriendo muchas oportunidades no solo a las mujeres, a todos”, dijo.

Pero detrás de esa expansión, hay una fuerte vacancia de perfiles que puedan absorber la demanda del mercado. “El año pasado hubo más de un millón de puestos abiertos aunque solo formamos a 100.000 estudiantes”, lamentó Coto.

Paula Coto, Directora Ejecutiva de Chicas en Tecnología.

¿Qué impide que más mujeres se acerquen a las carreras tecnológicas? “Solo el 30% de las personas que trabajan en industria son mujeres, pero a la vez solo el 16% de los que estudian tecnología lo son, por un montón de causas. Las jóvenes que sortean barreras y se incorporan a la industria enfrentan fuertes desafíos de permanencia porque la diferencia salarial, la falta de reconocimiento y las dificultades de vincular positivamente los espacios personales y las tareas de cuidado con el marco laboral inhiben los recorridos”, afirmó. 

“Desde Chicas en Tecnología -detalló- trabajamos con universidades, empresas y organizaciones para que las mujeres puedan incorporarse a la industria, pero también permanecer. Que haya instancias de selección claras, una mirada abierta sobre las bandas salariales, procesos de ascenso transparentes, políticas de licencias para generar paridades internas, espacios de mujeres en los que pensar y compartir desafíos”.