El uso del efectivo en las transacciones cotidianas viene bajando hace años y la pandemia aceleró ese proceso de la mano de las herramientas del mundo fintech, una tendencia que se viene registrando con fuerza en la Argentina y la región. Juan Pablo D´Antiochia, Senior Vice President of Worldpay from FIS for Latin America, Manuel Beaudroit, CEO de Belo y Mariano Di Pietrantonio, Chief Strategy Officer para MakerDAO plantearon los desafíos inmediatos tanto de las empresas en el proceso de innovación como de los reguladores.
“El fin del efectivo es muy ambicioso, no va a desaparecer al menos en el mediano plazo, pero como medio de pago se está desacelerando y su participación es cada vez menor. En muchos países ya no representa el primer medio de pago como en Brasil o Chile y esperamos que en la Argentina para 2025 tampoco lo sea”, afirmó D´Antiochia en la apertura del primer panel del Forbes Money Summit sobre “El futuro de las finanzas en América Latina”.
Para el directivo de la procesadora de pagos Worldpay “la tarjeta de crédito continúa como el primer medio de pago y las billeteras crecen de manera significativa y tienen la virtud de llegar a una porción de la población que la banca tradicional nunca supo como entrar. Las billeteras están ocupando ese espacio aunque el medio de pago atrás es una tarjeta de crédito pero lo más importante es que le bajan el costo al comercio y a la larga a la economía en general”.
En esta revolución de las finanzas, los participantes coincidieron en que el futuro de los pagos pasa por la conveniencia del consumidor y no por una decisión del comercio o un banco, sino a través de una infraestructura tan extendida como un teléfono celular y no solamente con moneda de curso legal sino también con criptomonedas de creciente participación.
En ese sentido, para Beaudroit “la misión es hacer cotidiano los pagos en cripto con las billeteras, lo que pide el comercio y el usuario, y hay que empezar a integrarlo cada vez más en el día a día de las personas. Hoy los volúmenes vienen creciendo dos o tres veces por año sobre todo en la Argentina, porque la gente necesita esa herramienta”, que además brinda la posibilidad de hacer inversiones con rentabilidades importantes. “Hoy con DAI se puede obtener rendimiento del 8,5% anual en dólares mucho mas atractivo que un plazo fijo o algunas inversiones, propio del estadio en el cual está la industria”, agregó.
También el CEO de Belo, la billetera virtual, planteó que “por momentos hay una dificultad regulatoria tan grande que no permite el desarrollo, si bien en Argentina es mucho más amable con la generación de innovación y el ecosistema local. Entender la tecnología es un proceso que muchas veces no se lleva adelante con la profundidad que se requiere y regular antes de entender es matar una oportunidad a futuro”.
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“Tenemos una estructura financiera -señaló Beaudroit- que es top a nivel mundial con transferencias entre billeteras o bancos de manera instantánea y gratuitas que en otros países no existe o es mucho mas complejo, pero a la vez el tema de la voracidad impositiva es una fiera enceguecida que no permite atacar los problemas de raíz”.
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También al referirse al rol de la regulación para el desarrollo de las nuevas finanzas digitales, Di Pietrantonio “el desafío de las regulaciones pasa por entender qué instituciones entienden cripto y cuáles no. Los que la entienden juegan y saben hasta dónde llegar, mas allá que no este regulado. Lo que tiene cripto es que esta basado en matemáticas y más seguridad que esa no es posible”.
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Para el directivo de MakerDAO, el ecosistema cripto “es un lenguaje universal financiero para todos y se genera otra forma de hacer finanzas, otras formas de hacer mercados y hay reguladores que lo entienden y reguladores que no, pero las regulaciones siempre corren atrás del desarrollo tecnológico”.
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Este nuevo sector no sólo es el futuro en pagos sino también en la parte de créditos, “fundamental para reemplazar al sistema financiero tradicional en costos sino también en tiempos y lo que le permite a la gente eso, en tener una opcionalidad de manejar el dinero como nunca antes. Ingredientes que antes no existían y que forman parte de la potencialidad de este ecosistema”.
