Hay una tecnología que se viene desarrollando hace tiempo, una tecnología que cambiará el paradigma de la informática, que romperá la barrera de los límites, disparó Facundo Díaz, fundador y CEO de /q99, en un mano a mano con el editor de Forbes, Pablo Wahnon, en el último CIO Summit, que reunió a los principales ejecutivos de la tecnología de las principales compañías y donde se debatió, entre otras cuestiones, cuál es el rol del Chief information Officer en la actualidad.
Esa tecnología de la que habla Díaz, y que promete revolucionar casi todo lo que se conoce sobre la informática, es la computación cuántica, que gracias al principio de superposición -un comportamiento físico particular donde un sistema se encuentra en todos los estados posibles y al mismo tiempo- se pueden resolver problemas que ni toda la memoria de computación convencional podría solucionar actualmente.
Todos estamos viendo el crecimiento de la IA Generativa, y hay un desafío enorme en el hardware porque hoy en día hay una gran limitación. Detrás de cada una de las nuevas versiones del chat GPT, hay una necesidad de procesamiento enorme -explica Díaz-. La capacidad de los procesadores (según dice la máxima de la ley de Moore) se duplica cada 18 meses, y en los últimos años no fue tan así. Por eso, insiste Díaz, la IA requiere de un mayor poder computacional para seguir creciendo.
En este escenario, y luego del éxito obtenido con la plataforma TravelX para la venta de pasajes a través de NFTs, que incorporó la compañía Fly Bondi, Díaz trabaja sin descanso en su nuevo proyecto, la startup /q99, que reunió a un equipo interdisciplinario de científicos y profesionales de tecnología para impulsar la creación de un ecosistema que potencie el desarrollo de estas tecnologías en América latina.
Consultado por Wahnon sobre el vertiginoso avance de la IA, Díaz también habla de la superinteligencia, que futuristas como Ray Kurzweil o Elon Musk, asegura que igualará las capacidades cognitivas de los seres humanos, o incluso puede llegar a superarlas, en un futuro próximo. Es un tema complejo, pero los expertos que señalaban a 2029 como referencia, ahora hablan del 2026. Y cuando uno ve las grandes disrupciones tecnológicas, siempre son fenómenos que surgen de la combinación de distintas tecnologías -apunta Díaz-. Si uno ve por dónde evoluciona la IA, cuando se vuelve súper inteligente aparece la combinación de tecnologías. Y usando solo la lógica binaria, en cierta forma, es limitado. La IA generativa va a buscar para atrás, es determinista, y la computación cuántica es probabilística. Es decir, no mira para atrás sino para adelante.
En China, aporta Díaz, están usando fotones. Hay muchas opciones compitiendo en una carrera por el hardware que hoy cambia constantemente. Y eso implica entender por dónde va la industria y ver en cuál conviene apostar, sugiere el experto, que no se considera un visionario, sino más bien alguien con buen criterio para ir uniendo puntos. Creamos la plataforma de música [Vrtify, la primera en realidad virtual del mundo] y también creamos TravelX con mi socio Juan Pablo [Laffose] porque vimos que la tecnología de Blockchain se podía aplicar a la industria aérea, ejemplifica.
Sobre este tema, Wahnon repasa que fue la innovación de Díaz la que le permitió a la empresa Fly Bondi implementar la venta de pasajes a través de NFT, lo que significa, en otras palabras, la posibilidad de tokenizar un activo o propiedad digital. Así como se estaban usando para proteger las piezas de arte, creamos una infraestructura que le permite a las aerolíneas tokenizar su inventario -es decir los pasajes-, distribuirlos y darles a los usuario la libertad de, si quieren, hasta venderlos. Porque todas las validaciones están en el Blockchain, entonces como pasajero, y por primera vez, una persona pasa de recibir un servicio a ser dueña de un activo.
Las aerolíneas, explica Díaz, también ganan en este proceso. Porque si alguien revende ese pasaje que compró a un precio mayor, la aerolínea también cobra un porcentaje. Sin embargo, Díaz considera que ningún emprendedor, por tenaz que sea, puede meterse en una industria como esta siendo un outsider. Juan Pablo tenía toda la experiencia y juntos fuimos uniendo puntos, concluye.
Ahora, refuerza Díaz, la inteligencia artificial está pidiendo pista. Y la computación cuántica viene a romper la barrera de los límites con su probabilística. No sé cómo termina todo esto, pero sabemos que el secreto está en la data. Y ahí estamos, tratando de unir puntos, remata el pionero tecnológico y emprendedor.
Díaz, además, está convencido de que en la Argentina hay mucho talento, y si bien considera que Latinoamérica se unió tarde a la revolución de la IA, aún puede ser líder en computación cuántica. Por eso, en /q99 se busca impulsar la innovación y el desarrollo de talento en la región a través de alianzas con empresas y universidades para liderar la próxima revolución tecnológica. Lo que están haciendo en la facultad de Ciencias Exactas de la UBA -ejemplifica el experto- es muy bueno, y tenemos alianzas estratégicas.
Al final, diría Díaz, sólo se trata de unir puntos.