IRSA es una de las compañías de desarrollo más importantes de Argentina y también una de las más damnificadas por la pandemia. “Entre el primer y segundo cierre fueron nueve meses terribles. Fue la tormenta perfecta que hoy, con el diario del lunes, no puedo creer que sobrevivimos”, dijo Daniel Elsztain, CEO de IRSA Propiedades Comerciales.
El empresario contó que el impacto se ve en el último balance de la compañía, que poco tiene para festejar. "Lo que sí podemos celebrar ahora es que vuelve la vida y muchas marcas deciden reinvertir en los centros comerciales”, apuntó. De a poco, después de la tormenta, retornó el optimismo.
Para Elsztain, esos nueve meses fatídicos fueron de puro aprendizaje. El empresario recordó cuál fue el peor momento de aquel túnel sin luz al final. "Fue cuando legamos a tener casi 200 marcas que decidieron cerrar sus locales. No había ninguna perspectiva de cuándo y cómo se iba a abrir. Y, a su vez, veíamos por parte de las políticas pública una postura discriminatoria hacia los centros comerciales. Ahí fue cuando más sufrí”.
“Se estaban yendo las marcas y no estábamos cobrando nada”, reveló el CEO. Pero de todo eso, completó, "aprendí es que hay que tener paciencia y saber comunicar lo que le pasa a uno, a la compañía y a las marcas".
El sol que emerge tras una tormenta tan particular como la pandemia invita a pensar en lo que viene. "Ahora estamos haciendo mucho foco en propuestas de entretenimiento y gastronomía, Los centros comerciales van a dejar de ser un lugar de compra para ser un lugar de encuentro. Y esto se ve, por ejemplo, en lo que estamos haciendo en el DOT".
Y en la post pandemia, para el empresario también es posible pensar en la recuperación de los sectores que más sufrieron. “Las ciudades fueron las más afectadas, como bien dijo Constantini en otro de los paneles, pero la recuperación de la pandemia va a ser que todos los que fueron afectados crezcan". Y agregó: "Todas las ciudades buenas van a tener un rebote. Y sobre todo ciudades como Buenos Aires, que tienen mucha vida y tuvieron inversión en espacios públicos, gastronomía y entretenimiento”.
El CEO reservó un espacio de la charla para hablar del proyecto de la ex ciudad deportiva de La Boca: “Se entendió finalmente que éste es un terreno privado y que es mucho mejor darle uso que no es sólo para el privado sino también de espacio abierto público".
Y contó una infidencia: "La primera vez que Álvaro Resta, Secretario de Desarrollo Urbano de la Ciudad de Buenos Aires, hizo una propuesta, yo le dije que era una locura. Y terminó muy inteligentemente explicándome por qué era correcto y yo pude también transferirlo al directorio. Pero hubo muchos argumentos para hacerlo y eso es lo que primó".
En esta línea, se refirió a las frecuentes "tensiones" entre el sector privado y el sector público. Y se apalancó de los dicho que Jorge Ferraresi en la entrevista con Alex Milberg, Director de Forbes Argentina, durante la cual aseguró que los desarrolladores debían poner "precios más reales".
Sobre esto, Elsztain replicó: “Quizás hay muchos costos que no se están teniendo en cuenta en el medio como, por ejemplo, el valor de la tierra, el costo de capital, los costos intermedios, además de la rentabilidad. Lo que es un mito es que el precio de mercado no lo pone el desarrollista, sino el mercado: todas las ventas que se hace de algo similar. Lo que el Estado tiene que tratar de lograr es que los precios sean lo más competitivos posible".
Sobre las trabajas que presenta Argentina para invertir, el empresario identificó dos grandes problemas: la falta de moneda y la falta de crédito. "Esos son dos granes problemas para el consumidor de real estate". Por eso, al país le hacen falta reglas claras, que dos o tres presidencias mantengan lo mismo".