El presidente de Laboratorios Richmond, Marcelo Figueiras, marcó la importancia estratégica del desarrollo local de la vacuna Sputnik durante el summit Health in Action, organizado hoy por Forbes Argentina y en el que destacados expositores debatieron sobre la salud en el país y la región.
“La fabricación de la vacuna significó una pérdida, no solo porque pusimos muchos recursos sino porque no queríamos demorar un minuto en negociaciones económicas que pudieran retrasar el acceso a los resultados. El balance de la compañía dio ganancias gracias a otras actividades. Con la unidad de negocios Sputnik perdimos un millón de dólares, pero ganamos prestigio y pudimos encarar una planta nueva. Elaboraremos 500 millones de dosis al año y nuestro mercado será el mundo”, anticipó.
Figueras consideró que la crisis del Covid-19 demostró la “condición estratégica de la industria farmacéutica, la importancia de la investigación y la capacidad de los científicos argentinos”, no sólo en el tema vacunas: también se desarrollaron reactivos para diagnóstico, respiradores que evitaron el colapso sanitario, estudios clínicos que son referencia en el mundo.
“La vacuna contra el Covid (casi 9 millones de dosis se fabricaron ya en el país) nos dio visibilidad, pero venimos trabajando hace muchos años con productos que salvan vidas. Tenemos, por ejemplo, uno innovador para el HIV y también el medicamento contra la Hepatitis C, de calidad excepcional y a un 5% del precio del importado”, afirmó.
En cuanto al acceso a capitales, remarcó que Richmond es el único laboratorio que cotiza en la Bolsa local y anticipó que la empresa intentará salir en busca de mercados internacionales. “Estamos negociando con bancos y veremos cuál será el mejor lugar para ir”, añadió.
Al ser consultado sobre la inflación y el desarrollo, sostuvo que Argentina “es compleja en términos políticos, pero desde el trabajo y la generación de riqueza, sin magia, podemos sacar a la gente de la pobreza”.
“Ya probamos todos los sistemas económicos. Debemos juntarnos detrás de 10 pilares básicos, dejar el movimiento pendular de un gobierno a otro y definir qué queremos. A algunos sectores les irá mejor, a otros peor, pero sabremos adónde vamos. Tenemos que hacer como en Perú, donde cambian de presidente a cada rato, pero siguen adelante”, recomendó.
El empresario lamentó que el mensaje que reciben sus pares sea “competí o fundite, que total viene otro”. “Los países en una crisis como esta se cerraron. Nosotros, en cambio, con el pretexto de que el consumidor se va a beneficiar traemos rezagos de un país de Oriente y así importamos desempleo. Tenemos que competir, pero en igualdad de condiciones. Necesitamos protección en el buen sentido, jugar todos con reglas claras”, reclamó.
Figueras consideró que todos los países que crecieron, “incluso los que hacen alarde de liberalismo económico, son proteccionistas. Cuando Australia decidió no tener industria automotriz, definió eso. No es que un día fabrica autos y al otro no”.
“En Argentina el capital humano está, tenemos unicornios, empresas de tecnología. Debemos lograr que el hub sea acá, que se conviertan en multinacionales hacia afuera, crecer sustentablemente y ser un país mejor. Tenemos que buscar la soberanía sanitaria, no vivir con lo nuestro, pero sí contar con nuestros desarrollos y hablarle de igual a igual al mundo”, concluyó.