Dicen que los grandes artistas nunca mueren... y si se habla de números la afirmación cobra aún más fuerza. Quiénes son los que continúan multiplicando sus ganancias desde el más allá. Los argentinos que más facturaron en 2016.
San Pedro estuvo ocupado. En el último año, tuvo que recibir a varias leyendas (David Bowie, Prince, Arnold Palmer). El gran ganador fue Michael Jackson, que con la venta de la mitad de su catálogo musical a Sony por US$ 750 millones, que incluyó los derechos que había adquirido el cantante por la discografía de los Beatles, lo llevó directo al podio de nuestro ranking anual de famosos difuntos que más facturaron (e incluso lo puso por arriba de cualquier artista vivo). Un irónico desenlace, ya que los asesores de Michael siempre le dijeron que era una mala inversión.
En lo más alto del podio se ubica Michael Jackson con US$ 825 millones. Jackson pagó US$ 47.5 millones en 1985 (US$ 140 millones de hoy) para comprar el catálogo de los Beatles a ATV. Diez años después, Sony le pagó al rey del pop US$ 115 millones para formar una alianza 50/50, hasta que el pasado marzo compró la otra mitad. En total, esta venta le dio al patrimonio de Jackson (hoy controlado por su abogado John Branca y por el ejecutivo John McClain) un 30% anual de retorno en su inversión.
Charles Schulz, creador de Snoopy y sus amigos, se coloca segundo en la lista gracias a las ganancias que genera su licencia. En 2016, tuvo un impulso extra: la película 3D, que en su primera semana recaudó US$ 45 millones solo en Estados Unidos. Al día de hoy se estima que obtuvo una ganancia de US$ 48 millones.
Elvis Presley sigue siendo el Rey. Incluso 40 años después de su muerte, vende más de un millón de discos por año (la mayoría físicos) y, sin embargo, esa facturación no es nada comparada con la que genera la venta de entradas de Graceland: Su hogar en Memphis, el cual es la segunda vivienda más visitada de Estados Unidos, solo detrás de la Casa Blanca. Este año generó US$ 27 millones.
De los que “nos dejaron” este 2016, el cantante Prince y compositor de Purple Rain podría decirse que murió en su mejor momento: cada uno de sus shows en vivo generaba una recaudación de unos US$ 2 millones. Además, este año, vendió 2,5 millones de álbumes, cifra superior a la cualquier otro músico fallecido. En total, facturó US$ 25 millones.
Bob Marley facturó este año US$ 21 millones. Lo curioso es que la venta de discos no es lo que mantiene a la leyenda del reggae en el ranking, sino más bien los productos de audio de la marca House of Marley, las gaseosas Marley?s Mellow Mood y el merchandising en general.
John Lennon sigue generando ingresos gracias a los Beatles: durante los últimos 25 años, y solo en Estados Unidos, se vendieron unos 65 millones de discos de la banda. Love!, el show del Cirque du Soleil sobre los fantásticos cuatro en Las Vegas, no hizo más que aumentar el patrimonio del autor de Imagine. En total fueron unos US$ 12 millones.
Los artistas argentinos
Gustavo Cerati lidera el podio de los artistas nacionales. Si bien todavía no hay números oficiales, se estima que SEP7IMO DÍA de Circo Du Soleil tendrá una recaudación millonaria, algo cercano a los US$ 30 millones. El espectáculo recorre la historia de un joven a través de la música de Soda Stereo se estrenará en marzo en el Luna Park, y las cifras superan ampliamente las expectativas, incluso antes de su gira por toda América. Serán más de 45 funciones que prácticamente ya están agotadas.
El pasado septiembre se estrenó la película “Gilda, No me arrepiento de este amor” en las salas de cine de todo el país. Según los datos oficiales, el film basado en la vida de la ídola de cumbia argentina superó el millón de espectadores, convirtiéndose en una de las más vistas del año. La película ya fue vendida en Medio Oriente, Asia y Estados Unidos. Sólo de entradas, el film generó US$ 6,5 millones.
Los derechos de las obras, la música y las películas de Carlos Gardel eran de las de mayor cotización en toda América Latina. La última heredera fue Cristina Razzano, hija del compositor José Razzano quien en 1943 le compró a Armando Defino, representante legal de la familia Gardel, los derechos por apenas 30 mil pesos de aquel entonces. Hoy, su voz ya es patrimonio de la humanidad y al pasar más de 70 años de su muerte sus derechos ya son libres, con lo cual cotizaron este año un total de cero pesos.