Un recorrido por las ventajas de la construcción industrializada y su evolución hacia un mayor valor agregado en diseño
Florencia Radici Forbes Staff
Florencia Radici Forbes Staff
Para Lucas Salvatore, director de Idero, Real Steel y del Grupo Salvatore, la construcción industrializada tiene numerosas ventajas: “Una muy en boga es la sustentabilidad: construimos con estructura de acero que tiene menor huella de carbono que el hormigón, que es 100% e infinitamente reciclable", introduce.
Y agrega: "También tiene una ventaja al reducir al 50% el tiempo de obra. Y una ventaja de precisión que permite industrializar al resto de la construcción también. Y dentro de eso hay una ventaja de certeza muy grande, que es el factor principal por el cual hoy nos compran: certeza. De costos, de tiempos”.
Además de los nichos de renta (donde más crecemos), también hay nichos de inversión. Hay que entender que la inflación le ganó al dólar en los últimos tres años, con lo cual no es un dato menor tener una certeza de tiempos y costos acotados.
Tenemos desarrollos en Palermo y Villa Crespo, pero donde hacemos foco es en desarrollos de renta. El país tiene una gran oportunidad de dejar de importar gas y empezar a exportar. Añelo es una ciudad a 100 km de Neuquén, el hub principal de Vaca Muerta, donde hoy viven 12.000 personas y entran y salen 15.000 más todos los días por una ruta de doble mano con un solo carril.
No hay oferta suficiente de buenas locaciones, entonces hay un déficit de 10.000 camas, pero hay una proyección de 40.000 personas de acá a 10 años. Ahí tenemos dos edificios en operación con 72 departamentos y estamos terminando un edificio de 24 departamentos. Tenemos tierra, desarrollamos, construimos y operamos, toda la cadena. Como es una inversión de renta, queríamos asegurar al inversor controlando ese ciclo. Tenemos alquiler con contrato a 10 años en dólares, algo que no es muy normal para el mercado.
Y en dólares, una cosa rarísima. Estamos empezando a construir seis edificios más, un plan de 50 viviendas modulares. El desarrollo es una de nuestras apuestas, porque vemos muchas virtudes. También lo hacemos posicionando un producto un poco por encima de la media con un edificio con mayor sustentabilidad. Apostamos al largo plazo.
Hay algunos que dicen que en la Argentina no se puede hacer, que es muy caro, que golpeás y suena hueco. Hace 32 años que hacemos estructuras de acero y hace cinco que dimos el paso a construir llave en mano, con un concepto que es integrar la industria con la arquitectura. Dentro de ese concepto está el valor agregado con un mayor grado de diseño, tenemos casas unifamiliares de barrio privado, premium, de alto valor agregado, casas multifamiliares, edificios de vivienda, edificios de oficina, salones de eventos, clubes deportivos, hospitales de emergencia. Dado el avance de la tecnología, se logró que los costos sean similares, sin contar incluso la comparativa financiera, como que si tiene más aislación es menor el consumo energético o si tarda la mitad…
La construcción modular es una parte de la industrializada. Se llama construcción modular pura cuando fabricás en una planta un módulo 3D que después transportás terminado o cuasiterminado. Tiene más limitaciones desde el diseño. Sirve para nichos. Por ejemplo, acabamos de hacer un hotel en el Cerro Catedral, que lo compraron a mitad de enero y se inauguró esta temporada.
Encontramos un nicho como desarrollador, Multifamily Modular: hacemos un edificio de multifamily sin que necesariamente sea un edificio con módulos. Hacemos casas modulares o módulos hoteleros donde el inversor entra con un ticket que arranca en US$ 25.000. Capaz tiene una habitación de hotel que es un módulo hotelero que va en un glamping que termina dando una renta del 8% o 10% en dólares.