Recientemente, Mercado Libre realizó un nuevo estudio para conocer la oferta de vehículos sustentables en la Argentina y, entre los principales datos, el informe reveló que en los primeros seis meses del año, las publicaciones sobre este tipo de vehículos aumentaron 10 veces más en comparación con el mismo período en 2022.
Según el relevamiento realizado, del total de la oferta de vehículos en el ecommerce, las publicaciones de vehículos eléctricos e híbridos se encuentran en tercer lugar en cantidad de publicaciones (5,2%), detrás de vehículos a nafta (69,2%) y diésel (14%).
Estos resultados muestran una tendencia que viene acelerando: la búsqueda de productos que sean más amigables con el medioambiente. En esta línea, avanza también Toyota Argentina. La automotriz de origen japonés que comenzó a producir en nuestro país en 1997 no pierde la mirada a largo plazo de su estrategia de negocio. "Creemos que la industria va a tener cambios drásticos por la modificación de hábitos de nuestros consumidores", destacó Diego Prado, director de Asuntos Corporativos de Toyota Argentina en el marco de una charla con un grupo reducido de periodistas en la planta de Zárate.
La planta de Toyota Argentina en Zárate.
Desde allí, la empresa que en la Argentina emplea a 8500 personas, opera a capacidad plena con tres turnos. Este año, habrá producido 182.000 vehículos. El 85% se exporta a 23 países.
"Toyota viene trabajando en la electrificación de la movilidad desde los años 90 y lleva vendidos más de 20 millones de vehículos electrificados a lo largo de su historia. En 2022, vendimos en Toyota 10 millones de vehículos y el 20% fueron electrificados", compartió Prado. La compañía asumió el compromiso con alcanzar la neutralidad de carbono antes de 2050, y comenzó a transitar este recorrido cuando lanzó al mercado Toyota Prius, el primer híbrido de la historia.
Como parte de este recorrido, Toyota desarrolló cuatro tecnologías de electrificación para reducir emisiones de manera eficiente: hidrógeno, híbridos, híbridos enchufables y batería. "Los cambios tecnológicos se van acelerando cada vez más rápido y hay otras tecnologías que se están desarrollando", adelantó.
Para poder avanzar en este objetivo, no obstante, hay algunos desafíos que afrontar: fortalecer la infraestructura eléctrica y de carga, pensar la reconversión de la cadena de valor, avanzar hacia una matriz energética más limpia y promover la adopción de nuevas tecnologías.
"Como industria, debemos trabajar en la reducción de las emisiones con el horizonte puesto en la neutralidad de carbono. Parte de este desafío implica acelerar la transición hacia una movilidad sustentable y responsable, respondiendo a las necesidades y particularidades de cada región, atravesadas por un cambio de los hábitos de los consumidores, regulaciones cada vez más exigentes y los avances tecnológicos. La industria automotriz se enfrenta a uno de los periodos más desafiantes de su historia. Sin dudas, en los próximos años, veremos más cambios que los últimos 100. Esto implica un nuevo paradigma donde se demandan vehículos cada vez más conectados, autónomos, de uso compartido y, por sobre todo, con motorizaciones alternativas que reduzcan su impacto ambiental y respondan a las nuevas necesidades de nuestros clientes y la sociedades. Toyota también se encuentra en un proceso de reconfiguración: estamos pasando de ser una compañía que produce automóviles a una compañía que brinda soluciones de movilidad", cierra Prado.