Juntarse con amigos, comer y disfrutar de probar nuevos sabores. Esta fue la combinación que dio inicio a KOI, una empresa gastronómica que tiene todos los ingredientes del street food asiático, pero con toques de fusión que la acercan al paladar local. Una receta que cautiva, al punto de que hoy se expande mediante franquicias (a un ritmo deliberadamente moderado) y ya se proyecta creciendo fronteras afuera. La idea de KOI nació durante una aventura gastronómica en Nueva York.
Los cuatro somos amigos, y viajamos a probar y experimentar diferentes sabores. Un día entramos a un local de dumplings y nos gustó la propuesta: es nutritiva, sabrosa, rápida y te permite comer al paso. Después fuimos a Chicago y ahí vimos cómo la gente salía de las oficinas y llenaba un restaurante donde los servían, y eso terminó de confirmar nuestra intuición, cuenta Juan Manuel López.
Así es el negocio de KOI
La marca cuenta con cinco locales, cuatro propios y una franquicia. Además, está preparando la apertura de la primera franquicia fuera de Capital Federal, en Olivos. En paralelo, inauguramos el centro de producción propio, donde elaboramos desde las materias primas hasta el producto final envasado al vacío para que llegue a los locales para ser regenerado, explica López.
Con el centro podremos abastecer a más locales (en total pueden abarcar más de 50), aunque no estamos apostando a la expansión acelerada, cuidamos el paso a paso. En cada apertura necesitamos un nuevo socio, no solo un franquiciado. Consideramos que los que se expanden demasiado rápido tienen fecha de caducidad, y el nuestro es un proyecto a largo plazo, dice.
Ya iniciando gestiones para abrir en Rosario, Córdoba, Neuquén y Salta, KOI tiene 110 colaboradores directos y un futuro promisorio. Nos hemos reinventado. Desde el nacimiento en 2017 crecimos de manera constante, obvio con altibajos. Por ahora la facturación crece y viene acompañando el ritmo de la inflación. Encontramos en el delivery un nicho (producto de la pandemia) en el que las apps de envíos cumplen un rol importante, detalla López. Hoy, el 40% de la facturación proviene del delivery.
Hoy, el 40% de la facturación proviene del delivery.
Juan Manuel López, socio de KOI.
En Paternal, el centro de producción tiene uno 650 m2 y está ubicado estratégicamente para tener buena salida hacia los locales. Está equipado con tecnología de punta, hacemos hasta las harinas. Fernando Orciani, especialista en el desarrollo de planta, fue quien ideó la obra, resalta López.
El aterrizaje a las góndolas
Esta nueva planta les permite ir a su próximo proyecto: En 2023 lanzaremos productos a góndola. Primero irán a mercados de productos frescos, al estilo de Mercat, y después está planeado llegar a los supermercados. Queremos acercarnos al consumidor. Nos gusta la idea de aportar alternativas para bajar el consumo de ultraprocesados, pero aportando facilidad a la hora de cocinar, relata el socio de KOI.
Uno de los productos que se podrán conseguir son los dumplings, la insignia de la marca. Al mes producimos más de 25.000 porciones de este plato. Aunque es cierto que también el ramen llegó para competirle, pero es un consumo más temporal aún, indica.
Este es un logro de KOI porque, destaca López, aunque los consumidores estaban ávidos de estos sabores, el mercado aún no estaba abierto: No había un movimiento fuerte y por eso creemos que uno de los aciertos fue fusionar culturas para adaptar la propuesta al paladar argentino. A esto le sumamos una comunicación descontracturada pero cuidada, al igual que el diseño del producto, del pack y los locales.
Para 2023, la empresa espera abrir cinco franquicias y dos locales propios. Para financiar esto, por ahora nos sostenemos con la ganancia de las franquicias y los locales, y con financiamiento del sector privado. Está en los planes de 2024 recibir una primera ronda de inversiones, adelanta López.
¿El objetivo? La compañía espera salir a la región y que esta sea la base para llegar a Europa. Ya hay ideas bastante concretas, entonces para esto sí estamos abiertos a las inversiones. También estamos pensando nuevas marcas de productos y hasta quizás crucemos la barrera de lo asiático en líneas de co-branding, concluye López.