Fue en 2012 cuando Luz Mallaviabarrena (31) y Sabrina Fontana (33) se conocieron en la Universidad de Yale, en Nueva York. Estudiaron en la misma universidad y participaron de un scholarship de Derecho en Estados Unidos. Pero más allá de las leyes, la moda siempre fue un motivo que las unió: “Ya desde ese momento, nos ilusionaba mucho tener nuestra propia marca. Y si algo bueno tuvo la pandemia fue el impasse para pensar y saldar algunas cuentas pendientes”, cuenta Mallaviabarrena, que trabaja en Tribunales y por la feria judicial que se impuso en las primeras semanas de cuarentena por el COVID-19 tenía horarios más reducidos.  

“Siempre fuimos chicas muy urbanas, inquietas, que nos fascinaba todo el mundo del arte y de la moda”, añade Fontana, que trabajó en el área de derecho laboral y es además dueña de View Vino, un club de vinos online. Así, con el lockdown total de las últimas semanas de marzo de 2020, decidieron invertir $ 200.000 y crear Heloise, una marca de indumentaria con prendas clásicas y atemporales, cómodas para estar en casa. 

Fueron varios meses de investigación, charlas con expertos del rubro e idas y vueltas para llegar al producto final. Probaron talleres y buscaron las telas, desafiando los impedimentos de la pandemia. “Creo que todo nos llevó un poco más de tiempo, pero nosotros siempre tuvimos nuestras ideas claras”, dice Mallaviabarrena.  

Como diferencial en una industria donde hay mucha competencia, las emprendedoras apuestan a la calidad y la atemporalidad. “A nivel global se está dejando un poco de lado todo lo que es el fast fashion. Nosotros apostamos a prendas que tengan durabilidad y variedad de usos”, aseguran. 

Hoy, las emprendedoras ?que siguen con sus trabajos en el mundo del derecho? venden la primera colección, que lanzaron formalmente en el mes de septiembre, a través de su página web. Su apuesta va por el ecommerce como principal canal de venta y están en pleno desarrollo de un showroom en Capital Federal. 

Mallaviabarrena y Fontana que no son diseñadoras tuvieron que aprender sobre la marcha. “Hubo muchos desafíos. Por ejemplo, tuvimos que aprender a hacer un balance entre lo que nos gusta y los costos”, aseguran. Así, la curiosidad y hablar con personas que conocen el mercado fueron los puntos destacados para poder darle forma al proyecto. A contracara, la parte más complicada fue la logística. “Nos pasa que es algo que te excede y más en pandemia. Eso fue lo más difícil de poder coordinar”, asegura Fontana. 

Tras haber tenido un año fuerte de desarrollo, las emprendedoras esperan que este año sea de consolidación y expansión. “Creemos que 2021 será el año para crecer en el interior y posicionarnos en todo el país”, asegura Fontana. Para esto las emprendedoras creen que es fundamental el trabajo a través de las redes sociales, que “tienen el potencial de mostrar Heloise en todos lados”. “Una vez establecidas en la Argentina nos interesa crecer en otros mercados de América latina”, confirman.