Produjo decenas de obras, empleó a más de 300 personas y responde: ¿Es negocio el teatro en Argentina?
El CEO de Circus Entertainment Group, Luis Alberto Raimundo, cuenta cuánto cuesta producir una obra "a todo trapo", cuánto se tarda en recuperar la inversión y los obstáculos más grandes de la industria.

Luis Alberto Raimundo se dedica a la producción teatral desde el 2017, año en el que fundó Circus Entertainment Group. En los más de seis años que lleva produciendo, llevó a cabo más de diez obras en las que trabajaron más de 300 personas, tanto arriba como abajo del escenario. Sus producciones transitaron las salas más reconocidas del circuito teatral porteño, como el Teatro Liceo, Broadway, Lola Menbribes, Astros, Apolo, Metropolitan, Regina y Picadilly, entre otros

Dos de los últimos grandes lanzamientos del Grupo fueron Regreso en PatagoniaCosta Presidenta, en el Teatro Premier. Otros de sus grandes éxitos son Viva La Vida,  ATR, Un estreno o un velorio, De Costa a Costa, El regreso del Joven Príncipe, Despojo, Costa está de fiesta y Entretelones, con cinco años de obras ininterrumpidas, incluyendo streaming durante la pandemia. 

Pasan los años, llegan nuevas tecnologías, plataformas de streaming y demás… pero el teatro en la Argentina sigue firme. ¿Qué tiene el teatro argentino que hace que el público siga apostando por él?

Antes que nada, lo que hace que la gente nos siga eligiendo es la calidad artística, tanto de los creativos como de los intérpretes que tenemos en el país. Hay mucho talento, de hecho, se está exportando. Las plataformas trabajan mucho con actores nacionales. La plaza teatral está entre las más grandes del mundo y está entre las tres más grandes de Latinoamérica. Al mismo tiempo, el precio de las entradas es muy competitivo, entonces ofrecemos espectáculos de una gran calidad artística por valores pocas veces vistos en el mundo. Hoy, los países limítrofes como Uruguay, Chile y Brasil, vacacionan en argentina y muchos eligen Buenos Aires, consumiendo nuestra cultura.

 

Y ahora nos vamos del otro lado, ¿por qué los directores y productores siguen apostando por el teatro en la Argentina?

Principalmente, porque somos unos apasionados por lo que hacemos. Si bien el contexto nunca es el ideal para producir en Argentina, aportar algo a la cultura, al arte y al país se siente gratificante, y creo que esa es la motivación con la que seguimos adelante, pese a que cada día sea más complicado en el país.

 Me imagino que los números varían mucho dependiendo cada obra pero, en promedio, ¿cuánto sale producir una obra de teatro en la Argentina? 

Los números realmente varían mucho entre una obra como lo fue Mentiras Inteligentes, donde eran sólo cuatro personajes y un equipo de producción trabajando atrás, a un mega proyecto como fue Regreso en Patagonia, donde fueron casi 90 personas las que trabajaronPodríamos decir que hoy en día volver a producir Mentiras Inteligentes demandaría una inversión de por lo menos 10 millones de pesos. Costa Presidenta salió alrededor de 15, mientras que Regreso en Patagonia saldría 10 veces más.

De todos modos, en Argentina cualquier proyección es muy volátil porque al comenzar un proyecto uno tiene un presupuesto armado y, con las variables económicas del país, es muy difícil de sostener ese presupuesto en el tiempo.

¿Cuánto se tarda en recuperar la inversión?

Depende de la magnitud de la obra. No hay ciencia exacta en esto. Se puede recuperar en una temporada de seis meses o bien necesitar una segunda, todo depende del éxito que tenga la obra. Además hay muchas variables que juegan aquí y todos los casos son distintos.

 

¿En cuánto tiempo te das cuenta si la obra te va a dar ganancias o no?

No es siempre claro, pero en el primer mes de ventas ya tenés un panorama de si la obra puede llegar a ser un éxito o si estamos condenados al fracaso y no lograremos recuperar la inversión. Lo importante es que, al armar el negocio, se contemple esta segunda opción pese a que nunca sea la perseguida. Hay espectáculos que son artísticamente impecables y no son aceptados por el público. Perder la inversión siempre puede ser una opción.

Podríamos decir que hoy en día volver a producir Mentiras Inteligentes demandaría una inversión de por lo menos 10 millones de pesos. Costa Presidenta salió alrededor de 15, mientras que Regreso en Patagonia saldría 10 veces más.

Alberto Raimundo.

 

Supongamos que viene un productor teatral extranjero a la Argentina, ¿qué consejo le darías?

A los productores teatrales extranjeros les va a favorecer el cambio. Cuando vengan a invertir en Argentina, sea cual sea su nivel de riesgo, les va a ser significativamente más barato que en su país de origen. Lamentablemente, tenemos una moda muy poco competitiva a nivel mundial. Les aconsejaría que vengan y que inviertan en Argentina. Necesitamos desarrollar y potenciar la industria de la cultura, y siempre serán bienvenidos. Además, decirles que el público argentino es muy cálido y acompaña como pocos a los buenos productos.

 

¿Qué trabas encontrás como productor teatral para desarrollarte?

Tenemos varias trabas. Primero, si bien es una plaza teatral muy grande, en Capital Federal normalmente todas las salas están ocupadas y cuesta dar con el espacio para poner nuestros productos, porque felizmente aún somos muchos los que seguimos tomando el riesgo de producir para el país. Por otro lado, las variantes económicas del país no permiten sostener un presupuesto claro y estable en el tiempo, sumado a las cargas impositivas. Son muchos los frentes que deben contemplarse para no ir a ciegas.

¿De qué manera afecta la macroeconomía al sector?

La fórmula es bastante simple: mientras se mantenga estable y en crecimiento, eso se verá reflejado en el ánimo y el bolsillo de la gente. En esos casos, consumen cultura sistemáticamente. Cuando se desordena, y lamentablemente en nuestro país eso pasa mucho, el público se ve obligado a elegir en que consume su capital. Ya no pueden hacer todo y, en ese contexto, el ocio pasa a estar último en la lista de prioridades.

Si lo tenés que evaluar desde la óptica empresarial, ¿es buen negocio hacer teatro en la Argentina?

Lamentablemente, y aunque parezca oscuro el panorama, no es buen negocio hacer teatro en Argentina ya que demanda una gran inversión de energía y dinero, y es imposible saber si el negocio será rentable. A ver… nunca es seguro, pero en otras áreas de lo empresarial parece ser más matemático. Creo, de todos modos, que es algo inherente a nuestro trabajo. Insisto, es la pasión lo que nos hace seguir adelante.

"Como productora nos está pasando que es más el sector privado el que nos acompaña que el estatal"

¿Qué se puede hacer para mejorar la rentabilidad del negocio?

Lo que necesitamos siempre es negociar lo mejor posible la producción, bajar costos y potenciar acuerdos comerciales. No podemos fiarnos simplemente de la boletería. Por suerte, siempre hay empresas que están dispuestas a acompañarnos. Como productora nos está pasando que es más el sector privado el que nos acompaña que el estatal.

¿Cuánta gente "invisible", más allá de los actores y la gente arriba del escenario, hay detrás de una obra de teatro?

Realmente varía mucho, dependiendo de la magnitud del proyecto. Una obra un poco más pequeña puede tener un equipo de 10 o12  personas, entre maquinistas, asistentes, vestidores y más, pero no mucho más. En un caso como es Regreso en Patagonia, abajo del escenario teníamos la misma cantidad de gente que arriba prácticamente, ya que era el único modo de que el show se viera como lo queríamos.