Primer trabajo: un programa de JP, el antes y el después en la carrera del presidente de Quilmes
Cecilia Valleboni Forbes Staff
Los programas de Jóvenes Profesionales son un gran semillero de líderes. De hecho, Martín Ticinese, presidente de Cervecería y Maltería Quilmes en Argentina y Uruguay, dio sus primeros pasos en la carrera corporativa a través de uno de esos programas.
Mientras estudiaba Ingeniería Industrial en la Universidad de Buenos Aires (UBA), el ejecutivo tenía claro que antes de terminar la carrera quería poder ganar práctica en el campo. “Quería no solo generar horas de trabajo, sino que me desafiara desde el lado del aprendizaje”, dice.
Así, aplicó al programa de JP de Molinos Río de la Plata e ingresó en el área de Ingeniería Industrial, cuando todavía le faltaba un año y medio para recibirse. “Fue una experiencia espectacular: una escuela en todo sentido de la que estoy muy agradecido, porque me permitió entender que la parte comercial y de marketing era lo que más me interesaba”, reconoce.
Así, rotó del área industrial en todas las plantas de la compañía a trabajar con los equipo comerciales en proyectos de supply y llegó al negocio de pastas, en el equipo de marketing de la marca Matarazzo. “Me permitió generar networking, aprender a resolver problemas y conocer de cerca un montón de procesos que tienen las compañías grandes”, rememora.
Con trabajo de día y cursada de noche, la experiencia fue un desafío en todo sentido. “A mí me faltaba un año y medio para recibirme. Entre los que ingresamos era de los que estaban más lejos del título, y ese fue un desafío extra”, destaca.
Hoy, cuando evalúa la experiencia a la distancia, Ticinese destaca la posibilidad de generar networking, la empatía y la humildad para conectar con gente de mucha experiencia, y que es más importante escuchar que hablar con la gente que más sabe, entre los principales aprendizajes.
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“Además, los cinco porqué: preguntar por qué no todo el tiempo te permite seguir abriendo espacios y aprendiendo sobre un tema o encontrar colaborativamente una solución a los problemas”, destaca el ejecutivo, que menciona el rol de sus jefes como un pilar fundamental de su paso por la compañía de consumo masivo.
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Después de cuatro años en Molinos, Ticinese emprendió nuevos rumbos. Pasó por Clorox hasta que llegó a Cervecería y Maltería Quilmes hace ya 20 años. En la compañía, estuvo en el área de Marketing a cargo de las principales marcas del grupo, donde, entre otros logros, el año pasado lideró el lanzamiento de Quilmes Clásica. Estuvo a cargo del negocio en Chile como gerente general, fue VP de Soft Drinks, y antes de su posición como VP de Marketing para la Zona Latinoamérica Sur fue el BU Head para Paraguay, Uruguay y Chile.
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