Elon Musk, director ejecutivo de Tesla tuiteó en agosto que la empresa de coches eléctricos había fabricado ya más de tres millones de vehículos, frente a los sólo tres mil de hace una década. El crecimiento de la fabricación es notable, aunque teniendo en cuenta la alta demanda que hay es una tarea que el multimillonario debe mejorar. Por que está a la vista que la empresa no da abasto.
El caso alcista de Tesla siempre ha sido un salto de fe. Incluso con su vertiginoso crecimiento de fabricación, la empresa con sede en Austin, Texas, es un actor diminuto en términos de vehículos totales fabricados. Toyota (TM) fabricó 10 millones de vehículos sólo durante 2021, y eso fue en medio de una escasez de piezas.
A pesar de ello, con una capitalización de mercado de US$ 904.000 millones, las acciones de Tesla alcanzan un valor dos veces mayor que el valor combinado de Ford (F) (US$ 63.600 millones, General Motors (US$ 56.000 millones), Stellantis N.V. (US$ 48.500 millones) y Toyota (US$ 259.600 millones).
La Asociación de Concesionarios de Automóviles Nuevos de California anunció en agosto que Tesla produjo los dos vehículos más vendidos en el estado durante la primera mitad de 2022. Se trata de un gran avance. Sus vehículos eléctricos, el Modelo Y y el Modelo 3, hoy son más populares que el Toyota Rav4, el Camry y el Corolla.
El Modelo Y de Tesla tiene una cuota de mercado del 54,2% de los vehículos utilitarios compactos de lujo. En el primer semestre se vendieron 42.320 unidades, frente a las 7.856 del Mercedes Clase GLC, el segundo clasificado. Los comparables BMW, Audi y Lexus completan los cinco primeros puestos, habiendo vendido cada uno menos de 5.500 unidades.
Entre las berlinas de lujo, el Model 3 se hizo con un 60,8% de cuota de mercado por encima de Lexus y BMW. Incluso el Tesla Model S superó a sus comparables BMW, Mercedes y Chevy Corvette en la categoría de coches de lujo y deportivos de alta gama, según un informe de Electrek.
Sería fácil descartar estos datos como algo propio de California. El estado es notoriamente ecológico. También es el mayor y más importante mercado automovilístico de Estados Unidos. Todos los fabricantes de automóviles compiten allí, y las tendencias que se inician en California se extienden necesariamente por todo el país porque las empresas automovilísticas son reacias a construir dos conjuntos de vehículos.
El crecimiento de Tesla no se limita a California
La empresa se ha convertido en un actor importante en China, donde su fábrica de Shanghái celebró esta semana la fabricación de su vehículo número un millón, según el tuit de Musk. Esa fábrica comenzó a producir en 2019 y hoy está considerada como la instalación más avanzada del mundo.
Bloomberg señaló que las recientes actualizaciones ponen a la fábrica en ritmo para producir 20 millones de vehículos eléctricos al año para 2030.
Además, Tesla tiene fábricas de próxima generación que se pondrán en marcha en Austin, Texas; y cerca de Berlín, en Alemania. Esas instalaciones utilizarán las llamadas giga fundiciones para reducir la complejidad. La fundición masiva trasera reduce el número de piezas de chapa de 171 a dos piezas de aluminio, al tiempo que elimina 1.700 soldaduras. Musk dice que la fundición puede optimizarse aún más.
Se trata de verdaderas ventajas competitivas que permiten a Tesla construir vehículos eléctricos de forma más rápida y eficiente. Los elevados precios medios de venta mantienen los márgenes de beneficio. Recientemente, Tesla registró unos márgenes de beneficio del 26,5%, unos 1.400 puntos básicos más que la media del sector.
Los altos precios no están teniendo impacto en la demanda
Drive Tesla Canada informó el viernes de que Tesla ha dejado oficialmente de aceptar nuevos pedidos en Estados Unidos y Canadá para el Model 3 Long Range, debido a la abrumadora demanda. En la página de configuración de nuevos pedidos se dice ahora rotundamente que el producto no estará disponible hasta 2023.
Este lunes, las acciones de Tesla caían cerca de un 5% después de que la automotriz más valiosa del mundo anunciara que durante el tercer trimestre del año había vendido menos vehículos de lo esperado, ya que las entregas se retrasaron mucho por problemas logísticos