La firma presentó una nueva tarjeta orientada a dueños de empresas y el segmento PyME. “A pesar del contexto", afirma, la mora sigue siendo baja: "nuestros clientes se comportan bien”.
“Cuando uno piensa en American Express, piensa en cuentas grandes, pero más del 90% de mis clientes son PyMEs”, confirma Patricia Furlong, vicepresidente y gerente General de Global Commercial Services de American Express Argentina para explicar por qué, a pesar a de la crisis macro y de continuar en un contexto de caída de consumo, la firma estadounidense decidió lanzar una nueva tarjeta corporativa: “The Corporate Platinum Card”, con foco en dueños de empresas y, sobre todo, en PyMEs.
Patricia Furlong (2° desde izq.) en el evento de lanzamiento de The Corporate Platinum Card de American Express, junto a José Luis Mejía, Jorge Delara y Marcela Semidubarsky.
Furlong explica que el lanzamiento de este nuevo plástico se gestó antes de que empezaran los vaivenes macroeconómicos. “Cuando nos dieron la inversión y el ok para seguir, a pesar de todo, no queríamos perder la oportunidad y ahora la respuesta está siendo fantástica”, asegura. Hoy en día, el portafolio de consumo de los clientes corporativos de American Express argentina se compone en un 60% de gastos operativos y 40% de gastos de viaje. “Desarrollamos una fuerte estrategia local en gastos operativos para evitar el sube y baja que depende del contexto y hace que el gasto en viajes sea más volátil”, define.
Con respecto al impacto de la crisis en el consumo de su cartera, Furlong reconoce que los clientes utilizaron mucho más la línea de crédito de American Express. “Nosotros somos una línea complementaria al banco y lo que vemos es que la han cuidado y la usaron muchísimo”, asegura y destaca: “El tener back-up de la línea de Amex vino muy bien”.
En el evento de lanzamiento de la nueva tarjeta, la compañía alemana Battle Royal brindó un espectáculo inspirada en el mundo empresarial.
Furlong define a la cartera clientes de American
Express como “una cartera sana que, a pesar del contexto, se comporta muy
bien”. “No hay aumentos de mora. Implementamos un monitoreo estricto desde el
año pasado y vemos que los clientes se comportan de manera sana, vemos que le
dan valor a la propuesta y tratan de sostenerla”, explica.
Para Furlong, los clientes alcanzaron un fuerte grado
de “madurez financiera”. “Las empresas saben que si no se comportan bien
crediticiamente esto se ve reflejado en el mercado. Hoy, el que no puede gastar
no gasta, ves que consumen menos pero no te van a dejar de pagar, vemos una madurez
y racionalidad fuerte”, analiza. En este sentido, aunque no da cifras, confirma
que la mora fue “históricamente baja” durante los últimos cinco años.
Plástico nuevo
Hoy en día, un 15% del portafolio de American Express
trabaja con su tarjeta premium dorada. El objetivo de Furlong es lograr una
migración de “doradas a platinum”. “Entendemos que los clientes van a ver el
valor y ya nos llamaron cuentas que no eran clientes para adquirir el
producto”, confirma y aclara que el objetivo está en lograr que entre un 5% y
un 7% del portafolio tenga el nuevo producto.
El espectáculo de Battle Royal en la Usina del Arte para la presentación de The Corporate Platinum Card.
La nueva tarjeta corporativa tiene un costo anual de $ 16.000 y permite a los clientes acceder a los salones Centurión de todo el mundo, estacionamiento gratuito en Ezeiza durante 3 días, sin costo, 3 veces al año y priority pass. Además, bonifica hasta US$ 100 del costo del trámite de la membresía Global Entry (el programa de aduanas que pre-aprueba la entrada de los viajeros frecuentes a Estados Unidos).
Furlong confirma que durante julio, agosto y septiembre el costo anual, por precio promocional de lanzamiento se comercializará con un 50% de descuento, a $ 8.000. “Es un valor cercano a lo que se pagaría por una tarjeta dorada, pero, por poco, accedés a una propuesta de valor más completa”, concluye.