El mundo volvió a abrirse. Luego de dos años en los que la pandemia de Covid-19, con sus fuertes restricciones comerciales y confinamientos, cerró prácticamente las fronteras, 2022 se alzó como un año de recuperación y este 2023 espera superarlo. Así lo indica un comunicado publicado por la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA): la recuperación de la demanda de viajes aéreos continúa este año, según los resultados del tráfico de enero. De hecho, el tráfico total en enero de 2023, aumentó un 67% en comparación con enero de 2022. A nivel mundial, el tráfico ahora se encuentra en el 84,2% de los niveles de enero de 2019.
Aerolíneas Argentinas, que opera 38 destinos de cabotaje, 48 rutas federales o interprovinciales y 21 destinos internacionales y que en 2022 transportó algo más de 11,6 millones de pasajeros, da cuenta de esta tendencia.
De acuerdo a datos aportados por la compañía, entre enero y febrero la línea de bandera local transportó a casi 2,4 millones de pasajeros, lo que supera en un 5% la marca de 2019, cuando se transportaron 2,2 millones de personas en el mismo período. Los destinos más elegidos fueron Bariloche, Mendoza, Córdoba, Salta, Iguazú, El Calafate, Ushuaia, Trelew/Madryn, Tucumán y Mar del Plata, los cuales representaron cerca del 50% de los pasajeros transportados.
Estos dos meses siguen la tendencia alcista que dejó 2022, año en que Aerolíneas Argentinas generó ingresos por ventas por US$ 1.864 millones, agregó frecuencias y retomó rutas: volvió a operar con tres frecuencias semanales Ezeiza-Roma, suspendida durante dos años por la pandemia; sumó Brasilia y retomó Habana con tres frecuencias semanales. Además, en la red de cabotaje agregó Merlo y recuperó rutas federales como Córdoba-Mar del Plata, Córdoba- Comodoro Rivadavia, Córdoba-Resistencia, Córdoba-Trelew, Córdoba-Posadas, Iguazú-Rosario y Bariloche-Salta; y sumamos: Resistencia-Salta, Córdoba-San Juan, Bariloche-Viedma, Bariloche-Tucumán, Mendoza-Mar del Plata e Iguazú-Tucumán. Asimismo, desde agosto se encuentran operativos dos nuevos vuelos a La Rioja y Catamarca.
También fue un año de reducción de subsidios para la firma. Sin ir más lejos, la línea aérea de bandera recibió solo el 65% de los $ 72.000 millones asignados por el Estado Nacional. Esta cifra significa una disminución de casi 50% respecto a los aportes utilizados en 2021. En tanto que, para 2023, las transferencias por parte del Tesoro serán de US$ 412 millones, una reducción de US$ 102 millones respecto al presupuesto proyectado para 2022.
Asimismo, Aerolíneas Argentinas inició este año una nueva unidad de negocios: Aerolíneas Cargo. Para ello, ingresarán dos aviones cargueros puros modelo 737 -800, con una capacidad de carga de 23.000 kilos. El primero ya está en el país y comenzará a operar formalmente a partir de abril. El segundo llegará antes de mitad de año.
Se trata de los primeros cargueros que operan en Aerolíneas Argentinas desde 2005, cuando la empresa tuvo uno de estos aviones hasta 2006. Anteriormente, también, durante un breve periodo de la década del 70 realizó operaciones de carga. La carga aérea ya fue un importante negocio para la compañía durante 2022: La empresa trasladó más de 1 millón de kilos de salmón desde El Calafate a los Estados Unidos. También semillas de maíz y trigo, carne, vinos y otros productos de manufactura nacional a Estados Unidos y Europa. En esta primera etapa de operaciones, Mirgor será su socio principal utilizando parte de la capacidad carguera de las nuevas aeronaves.
Pablo Ceriani, presidente de Aerolíneas Argentinas, trazó con Forbes Argentina un balance de la operación en 2022 y compartió dónde estará puesta la estrategia de cara a este año.
-¿Qué balance hace de 2022 para Aerolíneas Argentinas?
El balance es muy positivo. Hemos cumplido con las metas: alcanzamos y superamos los niveles precovid en cuanto a pasajeros transportados, al mismo tiempo que necesitamos menos aportes del Estado Nacional. Es decir, hoy tenemos una compañía más eficiente que la que recibimos en diciembre de 2019.
Incorporamos dos rutas inéditas, como Merlo y Puerto Madryn, volvimos a operar Brasilia y La Habana, que fueron canceladas en 2016 y sumamos las rutas directas desde San Pablo a Bariloche, Salta, Tucumán, Córdoba, El Calafate y Ushuaia. También, hubo un importante incremento en las rutas federales o intertramos con la recuperación del Corredor Atlántico, Petrolero y los Corredores Turísticos.
Además, ha sido un año importante para el crecimiento de otras unidades de negocios, como ser la carga aérea con el transporte de miles de toneladas de salmón, semillas, carnes, vinos y teléfonos y otros productos de manufactura nacional. Asimismo, se han vendido muchísimas horas de capacitación en nuestros simuladores a otras líneas aéreas como Aeroméxico y Boliviana de Aviación, entre otras.
-¿Dónde estará puesta la estrategia para este año?
Este año, al igual que el anterior, continuaremos ampliando la red de vuelos con un fuerte foco en el turismo receptivo con los vuelos desde San Pablo a los principales destinos turísticos de invierno.
De igual forma, continuaremos creciendo en la operación con más frecuencias y vuelos. El objetivo de este año es superar los 13 millones de pasajeros transportados, que es el récord histórico.
Por otro lado, con el ingreso de los dos aviones cargueros puros apuntamos a desarrollar un negocio históricamente relegado en la empresa y que es muy atractivo porque tiene una rentabilidad más alta que el transporte de pasajeros debido a la alta demanda de cargueros debido al auge del comercio electrónico que tuve una fuerte alza sobre todo a partir de la pandemia.
-¿Analizan la apertura de nuevas rutas, tanto nacionales como internacionales?
En la medida que vayan ingresando aviones, vamos a ir aumentando las frecuencias. Este año ingresarán 2 Airbus 330 - NEO, aviones nuevos de largo recorrido. Con estos aviones pasaremos a volar de 7 frecuencias semanales a Madrid a 12 a mitad año. También Roma pasará de 3 a 5 frecuencias.
Estamos siempre analizando siempre las mejores opciones para conectar a los argentinos con más vuelos intertramos o federales que unen el país sin pasar por Buenos Aires y otras rutas también. Seguramente para la segunda mitad del año pueda haber otras novedades en materia de nuevas rutas y vuelos.
En cualquier caso, debemos apuntalar el crecimiento consolidando la flota con un plan de renovación acorde y sostenible.
-¿Cuáles son los desafíos que enfrenta la compañía de cara a este año?
En 2020 y 2021 la industria aérea vivió una de las crisis más importantes de toda su historia. En la última parte del 2021, iniciamos el camino de la recuperación que pudimos transformar en crecimiento durante 2022.
2023 será el año de la consolidación del crecimiento con más vuelos, más pasajeros, más aviones y con mejores resultados económicos y financieros.