Desde el viejo continente llega una nueva fintech para sumarse al ecosistema local. La española Lana, que actualmente opera en México y Chile, ya dio los primeros pasos formales para iniciar operaciones en el mercado argentino. Se trata de una plataforma de pagos y servicios financieros que apunta a los trabajadores de plataformas e incluso cuenta con Cabify como inversor minoritario.
“El mercado argentino es muy interesante para nosotros por varios motivos: el ecosistema fintech está bastante desarrollado, existe un porcentaje relevante de la población en Argentina que trabaja en la economía informal o economía gig y nuestros partners son fuertes en la región”, indicó Pablo Muñiz, CEO y fundador de Lana, en diálogo con Forbes Argentina.
Inicialmente, la compañía surgió como un proyecto interno de Cabify orientado a ofrecerles servicios de pago y financiero a sus conductores. “Pronto se dieron cuenta que esto era una problemática para todo el sector y teniendo en cuenta que los trabajadores de la gig economy trabajan en varias plataformas, se decidió crearla como una empresa independiente para poder ofrecer servicios a todo este colectivo”, explica el directivo.
Y agrega: “Queremos facilitarles el acceso a los servicios financieros a los trabajadores de este segmento participando como un agente clave en su inclusión financiera. A su vez, ayudamos a las compañías de la economía de plataformas a aumentar el engagement de sus colaboradores a través de los productos financieros”.
Sus principales partners están en los verticales de ride hailing y food delivery. Ambos sectores vienen experimentando cambios en los últimos meses en Argentina. En el primero, además de Cabify, operan la griega Beat y Uber, que a fines de septiembre consiguió un fallo favorable de parte del Tribunal Superior de Justicia porteño y ahora busca habilitar los pagos con tarjeta. En tanto, el de reparto de comida tiene como principales jugadores a PedidosYa (absorbió a Glovo) y a la colombiana Rappi, luego de que Uber Eats anunciara el cese de operaciones a partir del 22 de noviembre de este año.
Por el momento, Lana ya constituyó una sociedad en el país a fines de octubre (Lana Fintech Argentina SAU), no obstante su fundador cree que recién se instalaría en suelo argentino en 2021. Muñiz no brindó detalles sobre la inversión local pero confirmó que tendrán una oficina.
La firma nació en 2019 en España, pero enfoca su negocio en el mercado latinoamericano. Primero desembarcó en Chile y luego abrió oficinas en México. En agosto pasado anunció que había obtenido US$ 12,5 millones en su serie A liderada por el fondo ubicado en Silicon Valley, Base10, y la firma de venture capital Cathay Innovation.
¿Qué servicios ofrecerá? “Los usuarios pueden acceder a la wallet que esperemos sea la cuenta principal de estos trabajadores, donde reciban sus pagos de las plataformas. Desde la app podrán acceder a préstamos flexibles con bajas tasas de interés, descuentos en servicios útiles para la gig economy y a cualquier tipo de pago que ofrece cualquier otra wallet, como transferencias, tarjeta, pagos QR y pago de servicios”, detalla Muñiz.
En tanto, el emprendedor asegura que no lo preocupa la competencia con empresas más desarrolladas en el sector fintech, de la talla de MercadoPago o Ualá, porque se enfocan “en un sector muy diferente de la población”.
No se trata de la primera experiencia en esta industria para Muñiz, quien estudió Ingeniería en Telecomunicaciones en la Universidad Politécnica de Madrid y realizó una maestría en IT en la Universidad de Stuttgart. En 2017 fundó Denizen, una plataforma que le proveía servicios financieros a expatriados y contaba con el apoyo financiero de BBVA.