En una industria tan volátil como lo es crypto, encontrar empresas con varios años de trayectoria no es sencillo. Son contados los casos de las compañías que están por llegar a la década de operaciones y, más aún, cuando se desarrollan en sectores altamente competitivos como el bancario o el financiero.
Un ejemplo de éxito en ese contexto es Koibanx que en 2023 celebra su octavo aniversario. Nacida en la Argentina, la empresa proveedora de infraestructura blockchain en América Latina registra varios hitos históricos para la región y así lo rememora Leo Elduayen, CEO y Cofounder de la compañía. La verdad que cuando miro para atrás se me pianta un lagrimón. La adrenalina del día a día a veces no te deja frenar la pelota y ver todo lo que se logró, cuenta en diálogo con Forbes. Y agrega: Pero desde haber implementado la infraestructura para que bitcoin se pueda adoptar en El Salvador, siendo el primer país que lo hizo, hasta lanzar el primer banco que tokenizó activos on chain, hay muchas cosas que cuando vuelvo al lanzamiento en 2013 dijo 'que impresionante lo que ha logrado el equipo'.
El haber transitado todos esos años le da a Elduayen y a la compañía un bien tan intangible como valioso para analizar los momentos de la industria: perspectiva. Estamos más o menos en lo que esperábamos de este bear market en cuanto a duración. Después de varios años en el sector, no es el primer ciclo contractivo que nos toca atravesar. Te mentiría si dijera que para este momento yo esperaba que ya hubiese terminado, confiesa el fundador de Koibanx.
- ¿Qué es lo que esperas de este ciclo que atravesamos?
- En general son ciclos de un año y medio o dos y este arrancó en junio del año pasado aproximadamente con algunos golpes que fueron fuertes. No fue solo la baja del precio sino que tuvimos quiebras de bancos, de exchanges y otras cosas fuertes que tiene sentido que todavía estemos saliendo. Hay algunos indicadores que a todos los que estamos en el ecosistema fintech y crypto nos hace decir que vemos luz al final del túnel. Vemos normativas que nos siguen llevando a interoperabilidad, se siguen creando fintech o canales digitales y cada vez hay más wallets de crypto y crypto asociado a servicios.
- ¿Cómo lo sobrellevan ustedes?
- La más importante es que no tenemos nuestro negocio o la demanda de lo que nosotros queremos operar, que básicamente es interoperar el sistema financiero y agilizar la vinculación de distintos tipos de activos, vinculado al precio. Siempre digo que prefiero los bullmarkets porque todos quieren hacer cosas y por lo tanto es más fácil pero es linda la sensación de que no solo nos miraban porque el Bitcoin estaba en 60 mil dólares sino que lo que creamos tiene un valor más allá de eso.
El trabajo en interoperabilidad
Uno de los focos de trabajo de Koibanx en la actualidad es la expansión de la interoperabilidad en la región a través de tecnología blockchain. Se estima que esta industria crecerá hasta los mil millones de dólares desde la actualidad hasta el 2028. Si se toma que hoy en día parte de los 300 millones de dólares, la oportunidad de crecimiento es elevada. Algo de lo que América Latina no es la excepción.
Es una tendencia que se está afianzando y, contrario a lo que normalmente escucho, creo que Argentina está bastante más adelantado que otros países. Tenemos una tendencia de sentir que siempre estamos atrás pero nosotros operamos en otros países y hay ejemplos que muestran que no es así, señala Elduayen.
- ¿Cómo es la comparación con otros países de la región?
- En Colombia están lidiando todavía con ciclos bancarios por ejemplo. Si alguien hace una transferencia no es instantánea sino que tenés que esperar los ciclos bancarios, que son tres veces al día, para que se mueva el dinero de un lugar a otro y lo puedas usar. El QR entre billeteras recién ahora va a ser interoperable. Ni de casualidad existe algo como MODO. En México, El Salvador y Costa Rica pasan cosas similares. Todos tienen una partecita pero no el ecosistema entero. Y en Argentina, aunque nos cueste admitirlo porque somos muy críticos con nosotros mismos, somos interoperables. Podes mandar pesos a una wallet crypto y comprar, viceversa y muchas opciones más de forma instantánea. Obviamente podríamos estar mejor pero no es malo.
- ¿Qué crees que depara la interoperabilidad?
- Lo que más me entusiasma es que estoy viendo mucha aceptación de blockchain en esta oleada de interoperabilidad. Principalmente porque para hablar de interoperabilidad, muchas veces se presume que como participante tenes que aceptar los sistemas, las bases de datos de alguien que podría ser tu competidor. Eso en el pasado llevó a que se creen compañías del estilo de Prisma porque se necesitaba que alguien tenga toda la información pero no se la comparta a los competidores y al mismo tiempo logre coordinarnos. Y fijate como termina la historia de Prisma, en un momento se vuelve más poderosa que los bancos y la terminan vendiendo. Veo en blockchain y siento que es un concepto que está percolando con una capa tecnológica en la que todos podemos usar el sistema, conectarnos a él y usar lo que allí está escrito, porque es inmutable, y puede auditarse con los debidos permisos pero nadie puede tomar la información del otro si no corresponde.
- ¿Y cuáles son los beneficios para los usuarios?
- Creo que lo último que vamos a ver en interoperabilidad es la portabilidad financiera. A ninguna empresa del sector le interesa que sus usuarios puedan irse gratuitamente a otro lado con su scoring y demás. Pero más allá de esa idea, que en algún momento llegará, el usuario es dueño de todo su background financiero y elige con quién compartirlo. Eso es lo que más motivados nos tiene y en lo que más estamos trabajando en América Latina.
- ¿La interoperabilidad puede darse también entre países a nivel regional?
- Sin lugar a dudas. Es bastante parecido y de hecho Argentina, en este envío transfronterizo, no es una ruta tan común. En el pasado sí lo fuimos como enviadores y hoy más por receptores, quizás por el alto caudal de de Venezolanos. Pero en otros países se observa como una necesidad más clara así que sin lugar a dudas. Lo estoy viendo a nivel de wallets también algunas directamente su campaña es traé tus dólares acá a través de Lemon, Belo, Payoneer, etc. En ese sentido, crypto, y las stablecoins en particular, pasa a ser un vehículo privilegiado.
El rol de la tokenización
Para Leo Elduayen hay dos grandes olas por venir en la industria: la digitalización de identidad y la tokenización de activos reales. El primer intento de tokenización de activos reales se quedó a mitad de camino cuando los miraban como inversión. Hubo un momento en que nos pasamos discutiendo si era un security o un utility, si ese token lo ofrecía un perfil de usuario a otro qué pasaba, etc. Todo enfocado en si generaba la democratización del acceso a la inversión, que eventualmente podría llegar aunque aún faltan algunas regulaciones que permitan la oferta pública por ejemplo, explica el fundador de la empresa que ya contabiliza más de 1 billón de dólares de activos tokenizados en diferentes protocolos blockchain. Y suma: Lo que creo es que esa tokenización de activos que uno ya tiene, en donde no estás cambiando quién puede acceder al mismo, ahora lo puedan disponibilizar como medio de pago. Eso nos vuelve a llevar a la interoperabilidad de canales al poder incluso pagar con un activo tokenizado, lo que nos da un dinamismo o liquidez total en el sistema financiero.
- ¿Qué tan importante es para la adopción que esos procesos se simplifiquen?
- Para mi esa adopción simplificada, en gran medida, le pertenece a los institucionales. Algunos cryptobancos lo han hecho y lo están haciendo muy bien y han logrado ocupar ese espacio. Pero mi sensación sobre la promesa de que los cryptobancos reemplazando al sistema tradicional se diluyó en el tiempo y cada vez ves más players, si querés incumbentes, enfocándose en el espacio. Sacando licencias o servicios de custodia u ofreciendo productos crypto, a través de los vehículos que se le permiten hoy porque no lo pueden hacer de forma directa. Para mi esa es la gran punta de lanza para llevar la adopción de los activos tokenizados y de crypto a más gente. Porque una de las cosas que el regulador no cede es que el activo detrás de la tokenización esté en custodia de alguien que pueda hacerlo. Eso te vuelve a llevar a fiduciarios, fideicomisos, a banca, etc. Ellos para mi tienen la oportunidad de empujar la simplicidad de la adopción.
- ¿Cómo influye en eso las crecientes propuestas por regulación?
- Lo que a mi me gustaría que pase es que no se sobre regule y que simplemente se brinden certezas sobre la interpretación. Porque con la regulación que hay varios tenemos teorías o interpretaciones de como ya la regulación alcanza para operar. Pero cuando volves a los players institucionales, no tienen el mismo costo de oportunidad, es decir interpretarlo de una manera y que luego el regulador diga que no lo interpreta así, ni tampoco el mismo incentivo de quienes estamos construyendo en la industria. Lo que creo que va a pasar es que vamos a construir, implementar y lo que esté bien armado y sea de calidad va a quedar. Y ahí el regulador se va a sentar a darle forma a eso que ya es un hecho. Particularmente creo que es lo que pasará en la Argentina. También hay que entender que es un país con muchos problemas y en medio de eso en qué momento crypto es una prioridad en la agenda. Hasta es lógico que no lo sea.
- Pero en un país donde se estima que más de cinco millones de personas tienen crypto, ¿no debería darse un marco rápido por la cantidad de gente que usa estos activos?
- Creo que es el huevo y la gallina. Al tener los problemas que tenemos, florece crypto como florece. Cuando estas en la silla del regulador podes optar por el camino que más nos gustaría a la mayoría y decir la gente le está dando la vuelta por acá, demosle un marco porque ya es un hecho y listo. Pero del otro lado, podes seguir intentando resolver los problemas de raíz y no darle un marco al remedio que podrá tener cada uno cuan viable es o no. Yo creo que nos va a llevar mucho tiempo eso. Por eso creo que vamos a seguir usando estas tecnología porque nos resuelven los problemas que tenemos y en algún momento, donde ya sea un hecho consolidado, se regula e interpreta de esta manera.
Invertir en el sector para impulsar el crecimiento
Durante la mayor parte de su historia, Koibanx se dedicó a construir infraestructura para otras compañías o proyectos. Sin embargo, recientemente sumó un nuevo rol al invertir por primera vez en una compañía. Con N1U, nosotros estamos muy vinculados y junto a VISA y otros inversores ángeles involucrados participamos en su ronda de inversión seed. Por otro lado, Koibanx, aparte de ser socio, le provee la infraestructura a nivel de core blockchain, integración de crypto y demás, relata el CEO de la empresa.
- ¿Cómo fue esa experiencia?
- La verdad no es algo que hacemos normalmente, porque no estamos invirtiendo activamente en el mercado, y además el mercado de billeteras está relativamente saturado. Nos animamos específicamente con ellos no solo por el equipo sino por la estrategia de distinción clara. N1U está apuntando a los chicos y chicas a los cuales otras opciones les parecen aburridas. Ese segmento tan joven, que aún no está contaminado y pasa gran porcentaje de su tiempo online y siendo un equipo tan del riñón de ese segmento, nos llevó a tomar esa decisión.
- ¿Hay planes de volverse un VC por ejemplo?
- Ni de casualidad como un VC. Sí hemos empezado a tener conversaciones abiertas con fintech o compañías con ideas de unidades de negocio para las cuales nuestra infraestructura hace sentido y por ahí no tienen todo el ancho de banda para empujarlo. Entonces analizamos si con tecnología o dinero podemos ser socios de algunos de nuestros clientes.
- ¿Qué desafíos tienen para adelante?
- Hoy nuestro principal desafío es cómo habilitar no solamente técnicamente sino jurídicamente la infraestructura para la interoperabilidad. Creo que la región ha evolucionado en ese camino y lo que hemos logrado construir nosotros en ese ecosistema nos ha posicionado en un lugar bastante especial para seguir liderando esas múltiples conexiones técnica y jurídicamente que nos lleven a cumplir la promesa de dinamizar el sistema financiero.
- Se habla mucho de Argentina capital crypto. ¿Crees que toda esta infraestructura que ofrecen en América Latina algún día la podrán ofrecer a escala global?
- Me gusta pensar que sí. Obviamente pasos de bebés y hay mucho para hacer en Latinoamérica. Estamos teniendo algunas conversaciones para desembarcar en puertos lógicos como Estados Unidos o España pero de momento es tan grande lo que falta en América Latina que creo que hay que enfocarse ahí. Porque en cada país cuando destapas encontras mucho por resolver y por hacer. Pero sí, el gran sueño es llevar esta infraestructura a todo el mundo.