Los envíos de servicios al exterior desde los países de América Latina y el Caribe aumentaron 9,5% en el primer trimestre de 2024, lo cual corresponde a una tasa superior a la media global de 7,1%. Tras participar del la última edición de foro Outsource2LAC en Buenos Aires, que se enfoca en destacar las oportunidades de exportación de servicios desde la región, Fabrizio Opertti, gerente del Sector de Productividad, Comercio e Innovación del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), conversó con Forbes Argentina sobre las cómo ve el panorama para potenciar e incrementar las exportaciones de servicios en sectores como IA, telemedicina, automatización, videojuegos, Fintech, AgTech, aplicaciones de software, entre otros.
-¿Cuáles son las principales oportunidades para América Latina y el Caribe en la exportación de servicios basados en conocimiento? ¿Y para la Argentina en particular?
La región está en una posición privilegiada para destacar en la exportación de servicios globales o basados en conocimiento (SBC). Por ejemplo, entre 2005 y 2021, las exportaciones de SBC crecieron un 259%, casi cuatro veces más que las de bienes, que aumentaron apenas un 65% en el mismo periodo. Esto refleja el enorme potencial que tiene este sector en la región.
Los SBC no dependen de los vaivenes de los precios de las materias primas. Esto los convierte en un elemento clave para diversificar las exportaciones y reducir la vulnerabilidad ante los choques externos. Es importante destacar que el sector servicios emplea al 64% de la población regional, de las cuales las empresas de SBC son especialmente relevantes, ya que suelen ofrecer mejores salarios y valoran al capital humano más calificado.
La alta demanda de estos servicios en el mercado global también es un factor clave. Los países de la región ya han demostrado su capacidad para responder a esa demanda, lo que abre la puerta para que el sector siga creciendo. Este crecimiento tiene el potencial de contribuir a atacar problemas estructurales como la baja productividad y la pobreza..
Otro aspecto importante es la productividad. Según estudios del BID, las empresas que exportan servicios son un 7% más productivas que aquellas dedicadas a la exportación de bienes. Esto se traduce en una ventaja competitiva significativa para la región.
Además, el carácter tecnológico y digital de los SBC los hace más accesibles, ya que requieren menores inversiones iniciales. Esto es especialmente positivo para las pequeñas y medianas empresas, así como para los emprendedores individuales.
Finalmente, el impacto social de los SBC no puede pasar desapercibido. En sectores como los servicios financieros y profesionales, las mujeres tienen una mayor participación laboral en comparación con los sectores tradicionales de bienes.
Respecto a Argentina, el país se posiciona como uno de los principales exportadores de SBC en América Latina. En 2023, representaron aproximadamente el 51,6% de las exportaciones totales de servicios, tras un crecimiento promedio anual del 7,8% entre 2005 y 2023. Es un importante generador de empleo formal, con más de 340.000 trabajadores en 2022, de los cuales 140.000 estaban vinculados al sector de tecnologías de la información (TI). Una de sus principales fortalezas es el capital humano calificado y abundante, lo que permite no solo expandir las exportaciones de alto valor agregado, sino también atraer inversiones, escalar operaciones y fomentar la creación de empresas orientadas a los SBC. Áreas como consultorías empresariales, servicios audiovisuales, jurídicos, contables y de arquitectura muestran un gran dinamismo.
Otras ventajas de Argentina son la alta penetración de internet y un destacado nivel global en habilidades tecnológicas, particularmente en ciencias de datos. Estas características consolidan al país como un hub regional competitivo en mercados internacionales.
- ¿Qué cambios espera ver en el sector de SBC en los próximos cinco años?
Dado el impulso por la adopción de tecnologías avanzadas como la IA y la automatización, así como por la creciente demanda global de servicios digitales, América Latina y el Caribe experimentará una transformación significativa en los SBC en los próximos cinco años. Estos cambios no solo aumentarán la productividad, sino que también remodelarán los modelos de negocio en industrias clave.
La IA se perfila como un motor de productividad, con el potencial de impactar a más del 14% de los empleos en la región, mejorando la eficiencia tanto en tareas técnicas como creativas. UNPD prevé que contribuya con más del 5% al PBI regional para 2030, con crecimiento esperado en sectores como salud, agricultura y servicios financieros.
Además, la inversión en infraestructura digital y servicios avanzados ligados a la IA sigue creciendo a un ritmo anual del 11%, y se espera que supere los US$ 80.000 millones este año. Por su parte, el sector fintech seguirá siendo un pilar de crecimiento para la región. Aunque América Latina actualmente recibe solo el 10% de la financiación global en fintech, se espera que esta industria genere el 15% de los ingresos globales del sector en los próximos años.
La agrotecnología será esencial para la transformación sostenible de la región. Se proyecta que la agricultura digital incremente la productividad en un 14% para 2033, con un mercado de análisis de datos agrícolas que alcanzará más de US$ 2.000 millones en los próximos cinco años. América Latina y el Caribe, que producirá hasta el 60% de las frutas y verduras globales para 2050, tiene una oportunidad única para liderar en este sector.
En la industria creativa, América Latina tiene una mayor proporción de jugadores (consumidores) que invierten su dinero en videojuegos (80%) en comparación con Estados Unidos (69%). Este crecimiento del mercado genera oportunidades para expandir adaptaciones de videojuegos en películas, streaming y televisión, una tendencia global que fusiona la rica cultura regional con el interés internacional por historias auténticas.
Otros sectores, como la telemedicina, también están en pleno desarrollo. El mercado de US$ 2.500 millones en América Latina se proyecta que se duplicará para 2029, reflejando una transformación en el acceso y la entrega de servicios de salud.
En términos económicos, toda esta evolución del sector de SBC no solo contribuirá a la diversificación de las economías de la región, alejándolas de la dependencia de bienes básicos, sino que también tiene el potencial de crear mayores empleos de alto valor agregado y de promover un desarrollo más inclusivo.
- El reciente crecimiento del ecosistema fintech en América Latina, que incluye un aumento del 340% entre 2017 y 2023, demuestra el dinamismo de la región. ¿Cómo ve la evolución del sector fintech en países como Argentina y su potencial exportador?
El auge de la digitalización está abriendo nuevas oportunidades, especialmente en el sector financiero. En efecto, el ecosistema fintech en América Latina ha demostrado ser uno de los sectores más dinámicos, liderando las inversiones de capital de riesgo en la región con un 46% en 2023. La creciente adopción de servicios financieros digitales, junto con la necesidad de atender a los segmentos no bancarizados, ha creado un entorno favorable para que las fintech diseñen soluciones inclusivas y centradas en el cliente. Este enfoque no solo promueve la inclusión financiera, sino que también amplía su base de usuarios y fortalece su posición en un mercado altamente competitivo.
En Argentina, empresas como Ualá y Mercado Pago se destacan por su capacidad de innovación, desarrollando soluciones digitales que están transformando tanto el mercado local como el internacional.
Por otro lado, la región enfrenta desafíos como el acceso a capital en un contexto de altas tasas de interés y el incremento de las preocupaciones relacionadas con la ciberseguridad. Sin embargo, estos retos, lejos de frenar el crecimiento, han impulsado la creatividad y la resiliencia de las fintech en la región, lo que vislumbra un futuro prometedor donde se presentan oportunidades para innovar, adaptarse y crecer.
- A pesar del crecimiento en las exportaciones de servicios, la región enfrenta desafíos internos como rezagos en infraestructura digital y capital humano. ¿Cuáles son las prioridades para superar estas barreras y fortalecer la competitividad de América Latina en el comercio global?
Además, la escasez de personal capacitado en tecnología limita la capacidad de la región para adaptarse a la transformación digital. Un informe del Banco Mundial destaca que solo el 40% de los trabajadores en la región tienen competencias digitales básicas y menos del 10% posee habilidades avanzadas. Esto afecta tanto al sector privado como a los gobiernos, que enfrentan dificultades para implementar proyectos tecnológicos en sus países por falta de personal calificado.
La solución pasa por fortalecer mecanismos de atracción y retención de talento digital, invertir en la capacitación de ejecutivos y funcionarios públicos, y promover la colaboración entre universidades y empresas. En este contexto, los llamados "finishing schools" se han convertido en una estrategia clave. Estos programas de formación específica, diseñados en función de la demanda empresarial, no solo mejoran la empleabilidad de los participantes, sino que también responden a necesidades concretas del mercado.
En Uruguay, por ejemplo, el BID ha apoyado en la creación de "finishing schools" en colaboración con empresas privadas para formar talento en áreas como IA y machine learning, además de establecer alianzas con universidades de prestigio como el MIT. En Chile, la iniciativa Talento Digital, también respaldada por el BID, ha capacitado a más de 23.500 personas, logrando que el 70% de los graduados obtuviera empleos o promociones laborales con incrementos salariales promedio del 48%.
Colombia, por su parte, ha centrado sus esfuerzos en exportar servicios de la economía naranja, como software, animación y videojuegos, generando expectativas de nuevos negocios por más de US$ 235 millones. En Jamaica, más de 4.000 personas han recibido formación en ciberseguridad y computación en la nube, con un enfoque especial en cerrar la brecha de género en sectores tecnológicos.
- ¿Qué sectores tienen mayor potencial de crecimiento en la región?
América Latina tiene varios sectores con gran potencial de expansión en el mercado de los SBC. Uno de ellos es el desarrollo de software y servicios de TI, que ha sido un pilar para las exportaciones del sector en la región. Entre 2013 y 2023, los SBC relacionados con TI aumentaron su participación global, pasando del 8,6% al 13,8% de las exportaciones de servicios. Estamos hablando, por ejemplo, de servicios profesionales, técnicos, financieros y de gestión empresarial que se han beneficiado de la creciente demanda internacional.
El ecosistema fintech también ha experimentado un crecimiento explosivo, con un aumento del 340% entre 2017 y 2023. América Latina cuenta con más de 3.000 plataformas fintech, convirtiéndose en un sector clave de la economía digital de la región. Países como Brasil, México y Argentina lideran esta revolución tecnológica con startups como Nubank, Ualá y Clip.
La agricultura tecnológica o AgTech es otra área en expansión, gracias al uso de sensores IoT, análisis de datos y automatización para mejorar la productividad agrícola y reducir el impacto ambiental. Países como Argentina, Uruguay y Brasil están a la vanguardia, exportando soluciones avanzadas de agricultura de precisión que refuerzan la posición de la región en los mercados globales de alimentos y tecnología.
En el ámbito creativo, los servicios audiovisuales y los videojuegos crecen a gran ritmo. Países como Argentina, Brasil y México tienen industrias audiovisuales consolidadas. Los ingresos del sector en estos tres países fueron de aproximadamente US$ 20.000 millones en 2021, con un aporte cada vez más importante de la industria del cine. Colombia, por su parte, está emergiendo con fuerza (un aumento del 15%, alcanzando US$ 2.300 millones en 2021). El sector de videojuegos de la región no se quedó atrás. En 2023, registró un aumento interanual del 4,3% en ingresos, consolidándose como una de las áreas de mayor expansión a nivel mundial. Empresas como Ironhide en Uruguay están capturando audiencias globales, consolidando a la región como un actor relevante en esta industria.
-¿Cuáles son las fortalezas que ve en Argentina como exportador de SBC?
En primer lugar, el país cuenta con una fuerza laboral altamente capacitada. Más de 340.000 trabajadores formales están empleados en el sector, lo que representa una parte significativa del empleo formal privado. Cada año, las universidades argentinas producen alrededor de 130.000 graduados en diversas disciplinas, especialmente en áreas estratégicas como tecnología y servicios. Además, el talento argentino es reconocido por sus habilidades en programación y desarrollo de software, lo que le permite competir en mercados de alta exigencia.
La infraestructura tecnológica también es un factor clave. El país cuenta con más de 4.200 empresas de software distribuidas en el país y más de 40 polos tecnológicos en ciudades como Buenos Aires, Córdoba, Rosario, Tandil, Mendoza y San Miguel de Tucumán. La alta penetración de internet, con más del 80% de la población conectada, refuerza aún más la capacidad del país para sostener y expandir el sector de SBC.
La competitividad lingüística es otra fortaleza significativa. Por un lado, el español posiciona a Argentina como un proveedor natural para mercados hispanohablantes. Por otro lado, el nivel de inglés de los profesionales argentinos, reflejado en índices internacionales que lo ubican en el segundo lugar en América Latina, amplía las posibilidades de competir en mercados angloparlantes.
En términos de innovación, Argentina se destaca por su capacidad para generar y sostener empresas tecnológicas de alto impacto. Actualmente, cuenta con 12 unicornios, como Mercado Libre, Globant y Ualá, que no solo son referentes a nivel regional, sino que también atraen capital de riesgo y fomentan la creación de nuevas startups.
La diversificación de mercados también es un punto fuerte. Los principales destinos de exportación de SBC argentinos incluyen Estados Unidos, que concentra el 40% del total, seguido de Brasil y el Reino Unido. Esta diversificación reduce riesgos y fortalece la posición del país en mercados clave. Además, la proximidad horaria con Estados Unidos brinda una ventaja estratégica, permitiendo ofrecer servicios en tiempo real, algo especialmente valioso en áreas como desarrollo de software y servicios de TI.
A través del Régimen de Promoción de la Economía del Conocimiento, Argentina ofrece incentivos fiscales para empresas que invierten en actividades relacionadas con TI, exportación de servicios y capacitación de talento. Estas políticas han creado un entorno favorable para el crecimiento sostenido del sector, consolidando a Argentina como un actor clave en el mercado global de SBC.
-¿Cómo podría aprovecharlas mejor para expandir su alcance internacional?
En primer lugar, la implementación de programas de capacitación y recalificación laboral es fundamental. Además, mejorar la infraestructura tecnológica y de comunicaciones, como la expansión de la banda ancha y la optimización de los servicios de TI, resulta esencial para atraer y mantener inversiones. La colaboración regional también juega un papel importante, ya que una mayor integración con los países de América Latina y el Caribe fortalecería las cadenas de valor regionales, permitiendo a Argentina ofrecer soluciones tecnológicas competitivas a nivel global.
El BID ha sido un socio clave en este proceso, promoviendo el desarrollo del talento humano y las capacidades digitales mediante programas de formación especializados que tienen el potencial de mejorar la empleabilidad y los salarios. A esto hay que agregar el apoyo a la promoción de inversión extranjera directa y la modernización de agencias de promoción de comercio, junto con la mejora de la infraestructura tecnológica.
En Argentina, el BID ha implementado iniciativas concretas, como el "Programa de Apoyo a las Exportaciones de la Economía del Conocimiento", que fomenta exportaciones de alto valor añadido y desarrollo de habilidades en inteligencia artificial para empresas exportadoras, y un programa subnacional de desarrollo productivo en la provincia de Salta, que incluye infraestructura estratégica, centros tecnológicos y el fortalecimiento de la agencia de comercio exterior "ProSalta".
El país podría fortalecer su apuesta por alianzas entre el sector académico y privado para alinear la formación con las demandas del mercado internacional, simplificar procesos para la creación de startups exportadoras y promover inversiones en redes de fibra óptica y centros de datos.
- En 2023, Argentina exportó SBC por más de US$ 8.500 millones, pero sigue enfrentando desafíos en términos de infraestructura y acceso a mercados internacionales. ¿Qué medidas serían necesarias para potenciar aún más estas exportaciones?
Argentina ya está avanzando en la implementación de políticas clave para fortalecer las exportaciones de SBC. Por ejemplo, con el programa financiado por el BID, mencionado anteriormente, se abordan tres áreas fundamentales para posicionar al país como uno de los líderes regionales en este ámbito. Una de ellas es la adopción de tecnologías avanzadas, como la Inteligencia Artificial (IA). Un ejemplo relevante es la creación de un Centro de Inteligencia Artificial, que busca fomentar la implementación de aplicaciones basadas en IA en cadenas productivas con alto potencial exportador, fortaleciendo así la competitividad de las empresas argentinas en los mercados globales.
Además, se están impulsando estrategias para fortalecer las habilidades del capital humano. El programa incluye iniciativas de capacitación alineadas con las demandas del sector privado, con un énfasis en competencias avanzadas como análisis de datos y tecnologías 4.0. A su vez, el programa incluye actividades de fortalecimiento de cátedras que tratan temas de IA y el apoyo a redes de investigadores enfocados en estos temas.
En paralelo, se desarrollan acciones para fomentar la internacionalización de las empresas argentinas. Estas incluyen la promoción de certificaciones de calidad, la participación en ferias y ruedas de negocios internacionales, y la vinculación de startups locales con grandes corporaciones globales.
Con un enfoque integral que combina tecnología, talento humano y estrategias de expansión global, Argentina busca superar desafíos estructurales y continuar su consolidación como un referente en la exportación de SBC.
- ¿Cómo podría Argentina atraer más proyectos como el centro de datos de Google en Uruguay? ¿Qué sectores cree que tienen mayor atractivo para los inversores internacionales?
Argentina ha logrado posicionarse como un destino atractivo para la inversión extranjera directa (IED) en América Latina. Para seguir fortaleciendo esta tendencia, especialmente en sectores como los centros de datos, el país podría implementar diversas estrategias. Por ejemplo, Argentina ha logrado posicionarse como un destino clave para la instalación de centros globales de servicios compartidos, los cuales responden a las necesidades de empresas multinacionales en diversas industrias. Esta tendencia ha tenido un impacto significativo en la economía local, destacándose especialmente por las oportunidades de empleo que ofrece a los jóvenes profesionales. Más de 50 multinacionales, entre ellas JP Morgan, EY y Accenture, han elegido a Argentina para establecer sus operaciones, abarcando sectores como finanzas, tecnología, recursos humanos, impuestos y logística. Estos centros no solo fomentan el desarrollo económico, sino que también contribuyen a la creación de un ecosistema de negocios más competitivo y dinámico en el país.
El BID juega un papel clave en la promoción de la IED en América Latina, facilitando la creación de marcos normativos y regulatorios adecuados, así como la modernización de las agencias encargadas de promover las inversiones y el comercio. Además, apoya el fortalecimiento de la infraestructura tecnológica, esencial para atraer y retener inversiones. Un aspecto para resaltar es la adaptación de las políticas de promoción de exportaciones e inversiones a los servicios digitales, dado que muchas agencias de promoción comercial en la región aún operan bajo estrategias centradas en bienes físicos. El BID ha contribuido conocimiento y recursos financieros para la modernización de estas agencias, proporcionando financiamiento para mejorar sus capacidades y diseñar políticas basadas en datos desagregados.
Por otro lado, foros como Outsource2LAC, recientemente celebrado en Buenos Aires, especializado en la promoción del sector de servicios globales, han sido clave en la estrategia del BID para posicionar a la región como un destino atractivo para la inversión y las exportaciones de SBC. El foro ha facilitado más de 15.000 reuniones de matchmaking uno a uno en sus nueve ediciones previas, lo que ha generado aproximadamente US$ 450 millones en negocios proyectados.
Quiero destacar el papel de la plataforma ConnectAmericas en la promoción de exportaciones e inversiones, que celebró su décimo aniversario en 2024. La plataforma aprovecha las herramientas tecnológicas para ayudar a las pymes a internacionalizarse, y hoy cuenta con más de 1 millón de usuarios registrados, de los cuales 275.000 son empresas, y 14 millones de visitantes únicos provenientes de 180 países.
Además, el BID cuenta con un nuevo programa denominado "BID for the Americas", cuyo objetivo es atraer empresas de países miembros del Banco fuera de la región, provenientes de Norteamérica, Europa y Asia. En diciembre presentamos en Buenos Aires la "BID for the Americas App", una aplicación móvil y de escritorio impulsada por IA, que conecta a empresas con oportunidades de adquisiciones en proyectos financiados por el BID.