Con casi tres décadas en el mercado local, La Fábrica supo posicionarse como un clásico dedicado a la producción y comercialización de productos para servicio de lunch, como sándwiches de miga, tortas y empanadas. “Esta concepción es la original, pero actualmente estamos sumando opciones a nuestro abanico de productos”, adelanta Ariel Matyas, socio gerente y gerente Comercial, e hijo de Gabriel Matyas, uno de los fundadores de la firma que cuenta con tres plantas de producción (dos en el partido de San Martin y una en Ciudadela).
Es que La Fábrica, que fue un proyecto iniciado por dos familias, Matyas y Bergoc, con una inversión inicial de US$ 20.000, fue concebida tal como se la conoce ahora en 1994, luego de varias experiencias previas relacionadas que derivaron en lo que es hoy.
“La idea surgió como respuesta a una necesidad puntual no satisfecha y a una categoría de productos no explotada. La oportunidad era poder dar a los clientes una solución rápida; de calidad y a excelente precio en materia de productos alimenticios propicios para reuniones sociales como fiestas de cumpleaños; bautismos y brindis corporativos. La categoría de productos que explotó la compañía es la de los sándwiches de miga; que previamente requerían de mucha anticipación para pedirlos en panaderías y que tenían precios muy elevados (tampoco existían locales especializados en este producto)”, analiza Ariel. De hecho, hoy, el producto más vendido es el triple de miga de jamón y queso.
La empresa, que actualmente está en manos de la familia Matyas y elabora unos 10 millones de triples de miga por año, atraviesa un 2022 de cambios y con mayor impulso: ampliación de la planta productiva, nuevo equipamiento para sandwichería y un sector para elaborar pan rallado, mientras define sus planes para 2023.
Los años de pandemia fueron complejos para el negocio, por los consecuentes aislamientos y la reducción de los eventos sociales. Frente a esta situación, la firma no se quedó de brazos cruzados: adaptó los productos a formatos más pequeños y de consumo individual, aunque el negocio principal se vio impactado por los cambios de hábitos sociales. No obstante, hoy el panorama es distinto. “La gente quiere recuperar el tiempo perdido”, dice Matyas y estima que ”este año esperamos crecer 100% en facturación y 40% en volumen", aunque prefiere mantener los números de facturación bajo reserva.
La firma se expande a través del modelo de franquicias. Actualmente, La Fábrica tiene 24 locales (3 abiertos en el último año), de los cuales 4 son propios y el resto franquiciados, y también tiene una segunda marca low cost con 7 sucursales. Actualmente, emplea a 120 personas de forma directa y unas 50 a través del franchising.
Por el momento, La Fábrica solo opera en la Argentina. No obstante, la estrategia considera el desembarco en el mercado paraguayo y uruguayo, donde tienen posibles socios estratégicos. “El sándwich de miga, nuestro producto icónico, es muy típico de la cultura rioplatense. Como posibilidad tenemos en vistas Uruguay, cuando surja el socio indicado”, cuenta Matyas.
Para lo que queda del año, el objetivo está puesto en “lanzar marcas digitales no relacionadas con los sándwiches de miga y un nuevo formato de franquicia para desarrollar nuestra expansión”. Y, de cara a 2023, la idea es abrir otras 10 sucursales, lanzar una línea de productos sin tacc y una línea de productos veganos.