El rumor sobre el iPhone 12 se difundió poco después de que Apple sacara a la venta el iPhone SE, su segundo modelo económico, cien dólares más barato que el primer iPhone.
Esto suscita una pregunta: ¿Por qué de repente el fabricante de los productos tecnológicos más premium empezó a venderlos baratos? Como explicaré, Apple está entrando en una nueva etapa como empresa, en la que ya no le importarán las ganancias que deje el iPhone.
Los precios bajos podrán parecer una medida desesperada para defenderse de la competencia, pero como buena ajedrecista, Apple piensa con varias jugadas de anticipación: está usando los celulares baratos para aprovechar la que según su CEO, Tim Cook, es la madre de todas las oportunidades.
La cifra más importante para Apple como empresa
No cabe duda de que el iPhone es el producto más exitoso de la historia. Desde que se lanzó, Apple vendió más de un billón de dólares en iPhones, y durante años, generó más de la mitad de sus ventas.
Pero el iPhone no solo era la principal fuente de ingresos de la empresa, sino también su camino a los bolsillos de más de un millón de personas. Así lo revela el siguiente gráfico, que muestra la cantidad de dispositivos de Apple activos en todo el mundo. En cinco años, la empresa llegó a tener 1.500 millones de dispositivos activos, o sea, casi una de cada siete personas lleva un dispositivo de Apple todos los días:
Hoy, esos 1.500 millones de dispositivos son el principal motor de negocios de Apple y son más importantes inclusive que las ventas de celulares, porque con cada día que pasa Apple gana más plata con ellos.
La era de los servicios
Apple gana toneladas de plata fuera de sus tiendas gracias a los miles de servicios conectados a sus dispositivos. Por ejemplo, los pagos: Cada vez que alguien usa un iPhone para comprar, Apple recibe una tajada. Cuando ese usuario le paga al supermercado local con Apple Pay, Apple recibe una tajada. Cuando compra una aplicación en la App Store, Apple recibe una tajada.
Otra fuente de dinero es el conjunto de servicios por suscripción que Apple les encaja a los que tienen iPhone.
En primer lugar, Apple vende un servicio carísimo de garantía y seguro ?AppleCare? que representa un quinto del precio del celular. En segundo lugar, están el servicio de nube, iCloud, y el de suscripción a revistas, Apple News.
En tercer lugar, en 2015, Apple lanzó su servicio de streaming de música, Apple Music, que en solo cuatro años alcanzó 68 millones de suscriptores y se convirtió en el segundo servicio más grande del rubro en el mundo.
En cuarto lugar, el año pasado, Apple se metió en la guerra del streaming de videos con Apple TV+. La empresa no informó cuántos suscriptores tiene, pero según varias fuentes son entre 10 y 30 millones.
Licencia para cobrar
Una cara menos visible pero muy rentable de la división de servicios de Apple son las licencias. Apple les cobra miles de millones de dólares a las empresas por poner sus servicios o aplicaciones en los dispositivos de Apple. Por ejemplo, Google le paga a Apple nada menos que US$ 7.000 millones por año para ser el motor de búsqueda predeterminado del iPhone.
En 2017, los productos de Apple componían la mayor parte de las ganancias de la empresa; los servicios representaban solo el 15%. Hoy, los servicios aportan más de la mitad de las ganancias brutas de Apple? y eso que recién arrancan en ese rubro.
Por eso a Apple ya no le importa el precio del iPhone. Su objetivo es que sus celulares lleguen a cada vez más gente a cualquier precio, porque cuanta más gente tenga iPhone, más gente adquirirá servicios de Apple.
Es el fin de la vieja Apple, pero para bien.
Autor: Dan Runkevicius
Podés leer la nota completa en inglés acá