Bricksave, la plataforma digital creada por una argentina que ofrece acceso a inversiones inmobiliarias privadas en Estados Unidos, anunció un acuerdo para adquirir a Alte Investments, una firma de inversiones con sede en el Reino Unido, a la espera de la aprobación de la Financial Conduct Authority (FCA). Una vez completada esta adquisición y su actual ronda de financiamiento, la compañía creada en 2017 y conocida por ofrecer oportunidades de inversión inmobiliaria a partir de los US$ 1000, alcanzaría una valoración de más de US$ 60 millones.
Según informaron desde la empresa, esta adquisición convierte a Bricksave en la mayor plataforma global de inversión inmobiliaria fraccionada, con un total de inversiones que superan los US$ 350 millones. Con esta operación buscarán impulsar su presencia global, ampliar su base de clientes e introducir productos innovadores de inversión inmobiliaria tanto en América como en Europa.
"Esta adquisición no solo fortalece nuestra posición en el mercado, sino que también mejora nuestra capacidad para ofrecer oportunidades de inversión diversificadas y de alto rendimiento a nuestros clientes. Con la experiencia combinada de ambas compañías, estamos preparados para establecer nuevos estándares en la industria de la inversión inmobiliaria", dijo Tom de Lucy, CEO de Bricksave, tras el anuncio.
Por su parte, Florent Danset, CEO de Alte, mencionó: "Esta asociación abre nuevas puertas a nuestros clientes y refuerza nuestra capacidad de ofrecer oportunidades sólidas de inversión transfronteriza. La reputación y el éxito de Bricksave en el mercado residencial estadounidense, combinados con nuestra experiencia en el sector inmobiliario europeo, se complementan a la perfección".
Este acuerdo se enmarca en un plan de crecimiento a través de adquisiciones que empezó el año pasado con la compra de la fintech colombiana Macondo. "Nuestra estrategia tiene que ver con crecer por adquisiciones de compañías chicas, donde nosotras les damos todo el know-how, las agregamos y nos permite expandirnos más rápido", dice Sofía Gancedo, COO y cofundadora de Bricksave, en diálogo con Forbes Argentina.
Qué hace Bricksave
Bricksave es conocida por ofrecer oportunidades de inversión inmobiliaria accesibles y de bajo riesgo a una audiencia global. La startup permite a cualquier persona, en cualquier parte del mundo, acceder a la compra de propiedades residenciales y terminadas en las ciudades más atractivas para la inversión, con un mínimo de US$ 1000. Si bien los rendimientos estimados que ofrece Bricksave suelen ser entre 7% y 9% netos anuales, en los últimos 12 meses, la compañía entregó a sus clientes una rentabilidad superior al 9,2%.
El diferencial de la empresa es que desarrolló un algoritmo que usa inteligencia artificial para buscar oportunidades de inversión en más de 100 ciudades de Estados Unidos. Este sistema examina 2 millones de data points, que incluyen variables tan diversas como la baja en los índices de delincuencia en una zona, los comparables de precios o la ocupación potencial de una propiedad.
"Nosotros no estamos casados con nada, no son desarrollos propios, no son propiedades nuestras. Entonces estamos del lado del inversor", plantea Gancedo.
Una vez identificada la propiedad, la compañía empieza un proceso de due diligence de un mes que si se aprueba luego se fondea la propiedad y una vez alcanzado el capital necesario, se adquiere la propiedad y se gestiona durante un periodo de dos a cuatro años.
Para el inversor es una experiencia completamente digital: pueden ver el rendimiento de su inversión en tiempo real a través de la plataforma, con los ingresos de alquiler depositados en sus billeteras digitales, retornos que pueden retirarse o reinvertirse.
La argentina detrás del desarrollo
Gancedo es la argentina detrás de la compañía. Formada en economía, pero con un fuerte perfil tecnológico, la emprendedora se interesó por el mundo del real estate cuando trabajó con la familia Costantini. "Siempre vi la tecnología como una herramienta para solucionar problemas económicos. Además, trabajé haciendo encuestas para bancos y veía que había una desconexión muy fuerte entre la gente y el manejo de su dinero", menciona.
Con la visión de permitirles a los argentinos invertir en ladrillos fuera del país decidió fundar Bricksave, pero no fue un camino fácil. "Los bancos no me daban ni bolilla", cuenta. Decidida a materializar su idea, viajó a Suiza donde logró convencer a un fondo europeo de invertir US$ 1,5 millones en su proyecto. "Les expliqué que vengo de un país donde la gente lo que puede ahorrar lo cambia a dólares, lo pone debajo del colchón y cuando llega suficiente capital se compra la propiedad, porque las propiedades han demostrado ser una gran protección contra procesos inflacionarios", comenta.
Con esa inversión inicial Bricksave se lanzó como la primera plataforma de crowdfunding inmobiliario en Latinoamérica, con la misión de democratizar el acceso a inversiones globales. "En la época de Macri, la gente estaba muy optimista, pero también tuvimos que crear una demanda y evangelizar ", dice.
Hoy tiene clientes en 32 países y Argentina es uno de ellos, a pesar del contexto: "Hoy obviamente hay una situación muy inusual en Argentina, que es el cepo. Para un argentino hoy es complicado invertir porque necesitamos recibir de una cuenta la plata y con el mismo nombre que la persona que está invirtiendo, es básico para inversiones. Pero es algo coyuntural, nadie dejó de invertir por eso", asegura la fundadora.
La empresa no descarta expandir su portfolio de inversiones hacia otros países, especialmente en Latinoamérica. Aunque Estados Unidos sigue siendo el mercado principal por su estabilidad y liquidez, la región presenta oportunidades interesantes. "Latinoamérica nos interesa mucho, pero siempre es importante hacer un estudio realista del riesgo", señala Gancedo.
Si bien Argentina representa un mercado atractivo por su apreciación inmobiliaria, la emprendedora reconoce que para inversores internacionales es difícil entender el contexto macroeconómico del país. Aun así, países como México, Colombia, Brasil y Uruguay han captado el interés de la plataforma. "Analizamos opciones en Uruguay, pero aún no hemos encontrado una rentabilidad superior a lo que podemos obtener en Estados Unidos", concluye la creadora de la empresa que planea alcanzar una valuación de entre US$ 150 y 200 millones en los próximos 24 meses.