Kentucky, la tradicional cadena de pizzerías argentina fundada en 1942, anunció su desembarco en la zona más céntrica de Montevideo, en Uruguay, como parte de su plan de expansión a nivel internacional. 

La cadena inició su camino en la emblemática esquina porteña de Godoy Cruz y avenida Santa Fe, en en barrio de Palermo, con sus pizzas al molde de sello argentino. Recién en 2012 la marca apostó al proceso de expansión a través del modelo de franquicias, llevando su propuesta de pizza al corte, estilo reservado hasta ese momento solo para los transeúntes de la calle Corrientes, a todos los barrios porteños, que tiempo después continuaría su expansión en las zonas más comerciales de zona norte, oeste y sur de GBA.  

Hoy, con más de 70 sucursales en funcionamiento en el país, Kentucky anunció su desembarco internacional, con una inversión inicial estimada de US$ 1,2 millones para las primeras tres sucursales, y un plan de expansión que prevé dos aperturas más para febrero y marzo, y nuevas aperturas tanto en Montevideo como en otras localidades del interior del país vecino. 
 

Francisco Bazán, director de franquicias de Kentucky, expresa: “Esta nueva apertura nos llena de orgullo, porque implica llevar un pedacito de Buenos Aires al resto del mundo. Por el momento, el plan se centra en países limítrofes, mediante el modelo de negocios de franquicias como una gran oportunidad de expansión. Como marca nos interesa poder transmitir todo el conocimiento adquirido a lo largo de estos años de crecimiento sostenido, abrir la receta de ese éxito a quienes estén interesados en crecer en el negocio gastronómico y poder potenciar su desarrollo también; su éxito es el éxito de Kentucky”.   

La empresa cuenta con un formato mixto de locales que se dividen en autoservicio, el tradicional con mozo y el auto-pizza (drive-thru) siendo la primera pizzería argentina en ofrecer este tipo de modalidad. 

En plena pandemia, logró abrir ocho locales durante el 2021, y tiene previsto alcanzar las 120 franquicias, entre locales nacionales y en países limítrofes, en los próximos tres años con una inversión proyectada en US$ 5 millones , generando de esta forma 1.600 puestos nuevos de trabajo en total.