La empresa Shell reveló el jueves que la suspensión de sus operaciones en Rusia podría llevarla a registrar una pérdida de hasta US$ 5.000 millones en sus próximas ganancias trimestrales.
Al igual que muchas otras grandes empresas energéticas, Shell cerró sus operaciones en Rusia tras la invasión de Ucrania por parte del presidente Vladimir Putin a finales de febrero, saliendo de empresas conjuntas con la empresa estatal rusa de gas Gazprom y poniendo fin a su participación en el proyecto de gasoducto Nord Stream 2.
El rival de Shell, BP, que está saliendo de una participación de casi el 20% en el productor de petróleo ruso Rosneft, advirtió que las pérdidas potenciales podrían ascender a US$ 25.000 millones.
El gigante energético estadounidense Exxon Mobil también cesó sus operaciones en Rusia, abandonando participaciones estimadas en alrededor de US$ 4.000 millones a fines de 2021, mientras que el gigante noruego de petróleo y gas Equinor, mientras tanto, está dejando unos US$ 1.200 millones en inversiones rusas sobre la mesa.
Los analistas e inversores de Wall Street todavía están evaluando el impacto que las empresas occidentales sufrirán a partir de cortar los lazos con Rusia bajo fuertes sanciones, a esto se le suma el presidente Joe Biden listo para firmar una prohibición de la energía rusa, que fue aprobada por el Senado el jueves.
Pero a corto plazo, esas pérdidas se verán amortiguadas por los altos precios del petróleo y el gas, y el resurgimiento del sector se convertirá en el nuevo favorito del legendario inversionista Warren Buffett y su conglomerado inversor, Berkshire Hathaway.
Hecho sorprendente
El sector energético del S&P 500 ha subido casi un 40 % este año, superando con creces al índice de referencia más amplio, que ha bajado aproximadamente un 6% en 2022. Las acciones de BP han subido más del 11 % este año, con Shell subiendo un 26% y ExxonMobil un 37% y Equinor 46%.
A observar
Las principales empresas de energía proporcionarán más detalles sobre las pérdidas potenciales de la salida de Rusia en los informes de ganancias trimestrales del próximo mes. A pesar del impacto de la pérdida de negocios allí, la mayoría espera reportar sólidas ganancias en el primer trimestre, en gran parte gracias al aumento de los precios del petróleo y el gas.
Antecedentes clave
La invasión de Ucrania por parte de Rusia ha golpeado los mercados energéticos, lo que provocó que el precio del petróleo subiera hasta US$ 130 por barril el mes pasado, aunque desde entonces se han moderado un poco. Después de semanas de operaciones volátiles, el precio del West Texas Intermediate de referencia de EE.UU. ahora se ubica en US$ 98 por barril, mientras que el crudo Brent de referencia mundial se cotiza a alrededor de US$ 103 por barril.
*Publicada en Forbes US