Desde que el 19 de noviembre Javier Milei, el candidato por La Libertad Avanza, con acompañamiento de un sector de Juntos por el Cambio ganó el ballottage electoral y se consagró en el nuevo presidente argentino, se empezó a especular con una catarata de cambios en políticas económicas, muchas de las cuales fueron dadas a conocer recientemente por el flamante ministro de Economía Luis “Toto” Caputo, el martes 12 de diciembre.
Durante esa semana, previo al DNU que anunció Milei este miércoles por la noche en cadena nacional, el Centro de Opinión Pública de la Universidad de Belgrano (Copub) realizó un sondeo de opinión sobre las expectativas en el inicio del nuevo Gobierno.
Qué expectativas económicas y qué estados de ánimo predominan de cara a las próximas fiestas de fin de año y el inicio del verano; qué estrategias son las más utilizadas en el día a día para convivir con la elevada inflación y cuáles son las mayores preocupaciones económicas actuales para la ciudadanía son algunas de las consultas realizadas en el sondeo.
Entre los hallazgos, se encuentra que poco más de la mitad de las personas consultadas modificó sus decisiones vacacionales a partir de las medidas anunciadas por el nuevo Gobierno.
De ese porcentaje, un 32% acortó el tiempo que destinará a tomarse vacaciones, en tanto que el 31% cambió el destino elegido. Por otra parte, ocho de cada diez personas suspendierons sus vacaciones de verano.
La preocupación (41%), la esperanza (39%) y la ilusión (14%) son los estados anímicos que predominan de cara a las fiestas de fin de año en 2023. Solo un 4% dijo sentir indiferencia.
Según el relevamiento, que fue realizado entre el 13 y el 15 de diciembre sobre una muestra de 450 casos en la Ciudad de Buenos Aires, solo el 21% de las personas encuestadas cree que la economía estará mejor dentro de tres meses. Tres de cada diez consideran que estará peor, mientras que el 33% dice que estará igual.
En un año que cerrará con una alta aceleración de precios, seis de cada diez pesonas (62%) se siente con capacidad de enfrentar los obstáculos propios de una muy alta inflación. Las principales estrategias utilizadas para cubrirse de la inflación son son no conservar el capital en pesos argentinos (65%) y comprar dólares (16%) cuando es posible.
Respecto de la economía personal, el principal temor de las personas encuestadas es no llegar a cubrir los compromisos mensuales (51%), seguido por el aumento del costo de los servicios (32%), como electricidad, gas y transporte.