A partir del 17 de agosto, residentes de Bend, Oregon (Estados Unidos) podrán reservar el local donde hoy se encuentra el último Blockbuster en funcionamiento como un espacio en Airbnb para pijamadas. Podrán hacerlo por 4 dólares las tres noches disponibles (18, 19 y 20 de septiembre).
Su dueña, Sandy Harding, será la anfitriona. La mujer explicó que esta iniciativa surgió como forma de agradecer el apoyo de la comunidad durante la pandemia. Los huéspedes deberán cumplir con los requisitos: deberán residir en Bend y provenir del mismo hogar para minimizar el riesgo.
La tienda será higienizada y preparada a partir del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) y al protocolo de limpieza de Airbnb. Luego del check-out de los últimos huéspedes, los clientes de la tienda podrán visitar por un tiempo limitado el living durante el horario de apertura del local.
Cuando comenzó la pandemia, Harding prestaba un servicio en la vereda para evitar la aglomeración de clientes. Los que querían una película en específico, tenían que llamar a la tienda y pagar el alquiler por teléfono. Cuando llegaban al local, un empleado de Blockbuster limpiaba la caja del DVD con toallitas desinfectantes y la colocaba en un bolsa con cierre hermético para llevarla al auto del cliente.
A pesar de los esfuerzos de la dueña y el persona, la tienda tenía de 10 a 15 clientes en la vereda por día y eso no era suficiente para sostener el negocio.
El comercio cerró dos veces durante la pandemia pero, según aclaró la dueña del último Blockbuster del mundo, le siguieron pagando a todos los empleados y ninguno fue despedido. Para afrontar esta situación, recibieron un préstamo de protección de nómina.