La venta de los cigarrillos tal y como los conocemos hasta hoy podría terminar dentro de 10 o 15 años, estimó André Calantzopoulos, CEO de Philip Morris International. “Un futuro en el que los cigarrillos quedan obsoletos está a nuestro alcance. De hecho, se puedo lograr con el estímulo regulatorio adecuado y el apoyo de la sociedad civil”, subrayó el líder empresarial durante la cumbre anual Concordia 2020.
Añadió que las agendas políticas y la ideología están frenando el progreso y manteniendo a millones de personas desinformadas. En ese sentido, aseguró que, en lugar de mantener una conversación con evidencia científica sobre las regulaciones de estos productos innovadores para dejar de fumar, hay resistencia impulsada organizaciones no gubernamentales y de salud pública .
“Estas organizaciones permiten que la desinformación aparezca como ciencia legítima. Anteponen el dogma a los datos y gastan más energía en atacar a una empresa que en ayudar a los seres humanos que deberían estar en el centro del debate”, acotó Calantzopoulos.
Apuntó que hoy en día hay productos que no involucran combustión que pueden ser una alternativa para las personas que continuarían fumando.
“Estos productos no están libres de riesgos. Y la mejor opción es nunca empezar a fumar o dejar el tabaco y la nicotina por completo. Pero para aquellos adultos que de otra manera continuarían fumando, los productos libres de humo científicamente validados son una opción mucho mejor que los cigarrillos”, agregó.
Datos del mercado argentino:
Según el último informe de la Organización Panamericana de la Salud a escala regional, en la Argentina, 3 de cada 10 adolescentes tienen predisposición al consumo de tabaco. Se trata de estudiantes de entre 13 y 15 años que visitan puntos de ventas donde proliferan avisos, publicidades o distintas promociones vinculadas a productos de tabaco. Esto es un dato que preocupa.
De todos modos, la prevalencia del tabaquismo presenta un descenso progresivo y sostenido desde el año 2005, cuando se hizo la primera Encuesta Nacional de Factores de Riesgo.
El último sondeo realizado en 2018 arrojó como resultado que el 22,2% de la población adulta consume tabaco, cuando en 2013 ese porcentaje era de 25,1%.
A su vez, se reveló en esa oportunidad la prevalencia de consumo de cigarrillo electrónico: el 1,1% de la población manifestó consumirlo.
Más datos: cada año mueren más de 44.000 argentinos por enfermedades relacionadas al tabaco, lo cual representa aproximadamente el 13% de las defunciones.