Cómo se preparan las empresas argentinas para la era del autoservicio de combustibles
Con la inminente implementación del autoservicio en estaciones de servicio, las compañías locales ajustan sus estrategias e incorporan tecnología de última generación. En este contexto, una empresa líder desembarca en el país para ofrecerlo.

La Argentina se encuentra en un momento de transformación en su mercado de combustibles, con la inminente implementación del autoservicio en estaciones de servicio. 

En este contexto de expectativa, la empresa marplatense NCM Servicios dio paso importante al asociarse con la marca turca Mepsan, reconocida internacionalmente en la fabricación de surtidores de combustible, para introducir equipos compatibles con este sistema en el mercado local. Con este último movimiento buscará competir con las marcas ya establecidas, Wayne y Gilbarco, y marcar una nueva era en la manera en que los argentinos cargan combustible.

Mepsan llega al país en un momento decisivo, con el objetivo de aprovechar las oportunidades que trae la desregulación del sector y la habilitación del autoservicio de combustibles, recientemente anunciada por Federico Sturzenegger, ministro de Desregulación y Transformación del Estado. Aunque aún no se definió una fecha concreta para la implementación, el sector se prepara para realizar las adaptaciones necesarias en los equipos.

Una apuesta estratégica

El acuerdo entre NCM Servicios y Mepsan no es casual. Como informa NA, tras cuatro años de negociaciones, la empresa marplatense finalmente logró concretar esta alianza que permitirá ofrecer en el país equipos de última generación. Luciano Martín, socio gerente de NCM, destacó que "la innovación de los productos que traemos ahora tiene que ver más con la prestación del equipo con computadora incorporada con pantalla táctil". 

Estos surtidores, además de ser compatibles con sistemas de autodespacho, están diseñados para adaptarse a las necesidades específicas de las estaciones de servicio locales.

El catálogo incluye la línea Pro Smart, equipada con una pantalla táctil, una computadora integrada y un lector de códigos QR, lo que facilita la transición al autoservicio sin necesidad de infraestructura adicional.

Los surtidores de combustible Mepsan requieren una inversión de entre US$ 100.000 y US$ 150.000 para proveer tres islas de despacho en una estación de servicio.

Proyecciones de expansión

La inversión en tecnología no se detiene ahí. NCM Servicios anunció un plan de inversión de más de 2 millones de dólares para 2025, destinado a la comercialización de los surtidores Mepsan en el mercado argentino; y la construcción de una nueva planta en el parque industrial de Mar del Plata, con una inversión de 1,5 millones de dólares. Este segundo depósito, de 8000 m², será el centro de operaciones para la distribución y ensamblaje de los equipos.

El ensamblaje local de surtidores forma parte de una estrategia a largo plazo que busca abastecer el mercado argentino y también expandir la presencia en la región. Por el momento, los equipos disponibles se importan directamente desde Turquía, aunque se proyecta un aumento importante en el stock para satisfacer la demanda creciente.

Una mirada global

Mepsan, con presencia en 85 países y asociaciones estratégicas con gigantes del sector como Total, Gazprom y Aramco, aporta a NCM Servicios una reputación internacional. En Latinoamérica, además de Argentina, la marca tiene operaciones en México, Chile, Perú, Ecuador y Colombia.

La proyección de ventas de la empresa es ambiciosa: en los próximos dos años, planean equipar 100 nuevas estaciones de servicio con tecnología Mepsan. Su llegada al país marca un camuni hacia la modernización del mercado de combustibles en la Argentina.